En los últimos días nos han llegado a través del servicio de verificación de WhatsApp (+34 627 28 08 15) de Newtral.es preguntas sobre la veracidad de una cadena atribuída a Robert Kennedy Jr en la que este asegura que las vacunas de ARNm (mensajero) que se están investigando en la lucha contra el SARS-CoV-2 cambiarán el material genético de las personas, que esto “traerá consecuencias” y responsabiliza de todo ello, entre otros, al empresario Bill Gates.
El mensaje es falso e idéntico, salvo por un par de párrafos, a otro texto que hemos recibido y que está escrito, supuestamente, por la naturópata alemana Anette Lillinger. Los compañeros de Africa Check dicen no haber encontrado la carta de esta última más allá de las palabras compartidas en redes sociales. Tras indagar, hemos hallado un perfil de Linkedin que responde a este nombre, pero no hay nada relacionado con el texto. Tampoco en la empresa para la que trabaja esta señora. En el caso de Kennedy Jr ocurre lo mismo: no hay pruebas de que él haya escrito estas palabras, aunque varias líneas corresponden a un artículo publicado por el sobrino del presidente estadounidense asesinado.
Diferentes títulos, mismo objetivo: no hay que vacunarse
Ambas cadenas no se andan con rodeos en su encabezado. “Seria carta de advertencia de la naturópata alemana, Anette Lillinger, a todos sus pacientes que preguntaban acerca de la próxima vacuna contra el coronavirus”. La de Kennedy Jr es más directa: “Vacuna COVID USA = DAÑO GENÉTICO IRREVERSIBLE – UN CRIMEN CONTRA LA HUMANIDAD”. Así, todo en mayúscula.
Robert Kennedy Jr no es médico
En su introducción ya encontramos el primer problema: el mensaje comienza con la frase “para todos mis pacientes”, y el sobrino del famoso presidente de los Estados Unidos asesinado no es médico, sino abogado. Sobre la naturopatía, supuesta dedicación de Lillinger, ha sido calificada como pseudociencia por el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos de España.
Enfermedades y efectos secundarios producidos por la vacunación
En el texto atribuido a Lillinger, el primer párrafo es distinto del de Kennedy Jr. En el de la naturópata, leemos que en los “últimos 20 años” ha recibido pacientes “que habían desarrollado síntomas después de la vacunación” y que “por supuesto, tales síntomas / enfermedades producidos artificialmente siempre fueron un desafío”.
No especifica cuáles son tales respuestas negativas, pero en Newtral.es ya hemos desmentido que las vacunas puedan provocar autismo o la muerte súbita de menores. Por poner un ejemplo, la inyección contra la gripe puede causar dolor de cabeza o algún otro efecto secundario leve, pero solo una persona entre un millón podría contraer una enfermedad grave como es el síndrome de Guillain-Barré.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), gracias a la inmunización se previenen entre dos y tres millones de muertes al año causadas por diferentes enfermedades. De mejorar la cobertura de vacunas, “se podrían evitar otros 1,5 millones de defunciones” en el mundo.

Párrafos idénticos
El grueso de ambos mensajes se centra en las vacunas de ARNm de las que, aseguran, ”intervienen directamente en el material genético del paciente y, por lo tanto, cambian el material genético individual, que representa la manipulación genética”.
Este argumento es falso. Las vacunas de ARN mensajero en humanos inyectan en una persona el libro de instrucciones, una versión incompleta, trocitos del virus que se quiere erradicar, en las propias células. En este caso, del SARS-CoV-2 que genera la COVID-19. Estas partes serían incapaces de provocar la enfermedad, pero sí suficientes para estimular las defensas y generar anticuerpos. Eso es lo que haría la vacuna de Moderna, la más prometedora hasta el momento y de la que, tras dos rondas con ensayos en humanos, no se ha detectado daño genético.
Documento malinterpretado. Fauci y Gates responsables
En el final de ambas cadenas encontramos la tercera de las diferencias: el texto atribuido a Kennedy Jr. concluye responsabilizando al director del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas de EEUU, Anthony Fauci, y al empresario tecnológico Bill Gates, de esta falsa modificación genética en los humanos a través de las vacunas de ARNm.
Sobre Fauci y Gates, son señalados reiteradamente por los defensores de teorías conspirativas de estar detrás de un plan de las élites mundiales para aumentar su poder a costa de despoblar el planeta o controlar a la gente con mecanismos microscópicos, complots que ya hemos desmentido.
El párrafo afirma que la vacuna “desarrollada y respaldada” por Fauci y Gates “utilizó tecnología experimental de ARNm. Tres de los 15 conejillos de indias humanos (20%) experimentaron un evento adverso grave«. Esta parte del mensaje está extraída de un artículo publicado por Kennedy Jr en mayo de 2020, en el que acusaba a la farmacéutica Moderna de no publicar unos resultados negativos de las pruebas de la vacuna contra la COVID-19 en animales. El texto cita al comunicado de esta empresa farmacéutica en el que informó de los avances de la fase 1 de su vacuna contra la COVID-19.
Sobre este último documento, el doctor Fernando Pulido recuerda que los ensayos clínicos “tienen una metodología muy regulada, con una terminología precisa” regulada por el documento ICH-E6 sobre Buenas Prácticas Clínicas.
“El Consejo Internacional para la Armonización de los Requisitos Técnicos de los Productos Farmacéuticos de Uso en Humanos (ICH en inglés) es un consorcio del que forman parte las agencias de medicamentos americana (FDA), Europea (EMA) y Japonesa, para estandarizar los procedimientos de los ensayos clínicos”, señala el doctor Pulido, integrante de la Unidad de Infección VIH del Hospital Universitario 12 de Octubre, en Madrid
Efectos adversos
“En un ensayo clínico se considera efecto adverso grave (Serious Adverse Event, SAE) aquellos efectos que provocan la muerte del sujeto, ponen en peligro su vida, obligan a hospitalizar al paciente o a prolongar el tiempo de hospitalización, resultan en discapacidad significativa o permanente o generan una anomalía congénita o defecto de nacimiento”, señala el también profesor asociado de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid.
Explica, además, que los grados de los efectos adversos y alteraciones analíticas, en escalas de grado 1 a 4, “se corresponden a una clasificación tabulada y consensuada para poder tener una valoración clara de la intensidad de cada hallazgo” y que “puede haber alteraciones grado 4 que no sean graves, aunque sea una alteración analítica cuantitativamente (numéricamente) importante”.
“Los efectos adversos del estudio mencionado no se consideran SAEs desde un punto de vista metodológico (no cumplen esos criterios). Tampoco son grado 4. Las declaraciones parecen usar una interpretación no científico técnica de «serious», sino una valoración subjetiva de quien las hace”, defiende.
Hasta la fecha, los eventos adversos más notables se observaron al nivel de dosis de 250 µg, que incluyeron a tres participantes con síntomas sistémicos de grado 3, solo después de la segunda dosis. Todos los eventos adversos han sido transitorios y se resuelven por sí solos. No se han informado eventos adversos de grado 4 o eventos adversos graves, se puede leer en el documento de Moderna compartido por Kennedy Jr.
Conclusión
No hemos encontrado pruebas de que Robert Kennedy Jr. o Anette Lillinger hayan escrito este mensaje, aunque parte de uno de ellos corresponde a un artículo del familiar del presidente estadounidense asesinado. En cualquier caso, tanto el texto que se le atribuye al primero como el que se le atribuye casi idéntico a Lillinger, contiene numerosas afirmaciones falsas sobre las vacunas. Por tanto, el contenido de esta cadena de Whatsapp es falso.
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