Suplantan al director del CNIC, Valentín Fuster, para estafar con medicamentos fraudulentos

El director del Centro Nacional de Investigaciones Cardiológicas (CNIC), Valentín Fuster, recibe desde hace un año un aluvión de llamadas y mensajes de colegas de profesión extrañados por unos anuncios en los que, aparentemente, el famoso cardiólogo recomienda remedios milagrosos para la hipertensión y cremas que parecen el bálsamo de Fierabrás.

“La gente me llama, me escriben y me preguntan qué diablos me ha pasado en la cabeza. Me han llamado este año unas 500 personas y ya estoy cansado de todo esto”, declara Fuster en una entrevista con Newtral.es desde Estados Unidos, donde ejerce como director del Instituto Cardiovascular del reputado hospital neoyorquino Monte Sinaí.

Los últimos productos que se anuncian con la imagen de Valentín Fuster son Hondrostrong y Cardiline, entre otros muchos. Lo primero es un ungüento “revolucionario” a base de aceites que se presenta como la solución a enfermedades como la artritis, la artrosis o lesiones de menisco, mientras que lo segundo son unas cápsulas que dicen “curar” la hipertensión.

Todo forma parte de una estafa que suplanta la identidad de reconocidos médicos y científicos, cuya imagen es utilizada en supuestas entrevistas publicadas en webs con apariencia de medios de comunicación para hablar de las bondades de estos productos.

El propósito es engañar a personas mayores que sufren patologías cardiovasculares o reumáticas, y a las que hacen creer que esos supuestos fármacos ─que no tienen ningún rigor científico─ habrían sido avalados por eminencias de la Medicina.

Hondrostrong, el fraude que utiliza a Valentín Fuster y a su esposa

Uno de los últimos fraudes que emplea la imagen de Valentín Fuster es Hondrostrong, un supuesto bálsamo hecho a base de aceites que, según los promotores, “hace frente” a la artritis, la artrosis o la osteoporosis, entre otras enfermedades.

Varios anuncios a través de redes sociales conducen a una entrevista falsa en la que el director del CNIC, que es un organismo de investigación vinculado al Ministerio de Ciencia, presenta este supuesto medicamento como una creación de Fuster que él mismo habría fabricado para aliviar una supuesta osteoartritis de su esposa, de quien también muestran fotografías reales.

La entrevista está plagada de información falsa y datos erróneos sobre el cardiólogo. Por ejemplo, asegura que trabajó como “ortopedista hasta el 2009” y presenta a su cónyuge como su “futura esposa”, pese a que llevan casados más de cincuenta años.

“Esto es una vergüenza. Nunca me han hecho esta entrevista. Han ido pasando diferentes medicaciones que han dicho que yo era el que las recomendaba; una cosa vergonzosa. He ido a la policía, a los abogados y no sé si se va a resolver, pero es una vergüenza”, explica Fuster visiblemente irritado.

Su equipo del Centro Nacional de Investigaciones Cardiológicas lo denunció el año pasado, pero los anuncios siguen proliferando y difundiendo tanto su imagen como la de su mujer para promocionar productos fraudulentos como Hondrostrong. Una de las cuestiones más peliagudas es que, por razones de su cargo como director del CNIC y editor de la Revista Americana del Corazón, Valentín Fuster no puede hacer declaraciones que favorezcan a una parte de la industria. “Yo no puedo promocionar nada”, atestigua el cardiólogo.

Sin embargo, “desde hace un año y medio me están utilizando con productos distintos. Pasan de web en web y es muy difícil localizarlos. Cada dos semanas o cada mes salgo yo con una entrevista y productos distintos”, lamenta.

La estafa también suplanta a otros médicos famosos de España y América Latina

La misma entrevista falsa a Valentín Fuster aparece calcada en otras webs, pero con otros protagonistas. De esta forma, la estafa también emplea la imagen de otro reconocido médico, el cirujano y divulgador español Mario Alonso Puig. Desde Newtral.es nos hemos puesto en contacto con el equipo de este cirujano, que confirma que se trata de “una estafa total”.

“Nos llaman personas mayores diciendo que están preguntando en las farmacias por el producto y nos da mucha pena”, explican. Según su equipo, el cirujano ya ha reportado este caso como una estafa y ha pedido asesoría legal para conocer qué medidas emprender contra este fraude.

Asimismo, precisan que el doctor “no ejerce la Medicina desde hace muchos años” y que su falsa entrevista, al igual que la de Fuster, está plagada de datos erróneos. “Su mujer tan siquiera se llama Camila”, apostillan.

Sin embargo, esta estafa no sólo opera en España. El mismo fraude se da en Ecuador, donde han suplantado al presidente de la Sociedad Ecuatoriana de Reumatología para hablar de las bondades de estos productos en otra entrevista falsa. La institución médica desmintió cualquier relación con esa publicidad.

Webs que mutan, teleoperadores en España y suplantación de un famoso laboratorio

Las webs que publican las entrevistas falsas están alojadas en servidores de distintos países como Estonia, Alemania, Rusia o Brasil y mutan cada poco tiempo, de forma que complica las tareas para dar con los promotores.

Para comprar estos productos que se publicitan con falsas entrevistas es necesario facilitar un número de contacto. En poco tiempo, un teleoperador se pone en contacto con el comprador y le pide los datos del domicilio para que un repartidor haga la entrega del producto. Una vez llega la mercancía es cuando se paga, según los promotores del fraude.

Al menos en España, quien se pone en contacto con el comprador es un teleoperador que llama desde un número de teléfono español. Cuando se le pregunta por los fabricantes del producto en cuestión, señala a los Laboratorios Heel, ubicados en la Comunidad de Madrid.

Desde Newtral.es hemos contactado con estos laboratorios, que niegan cualquier relación con estos productos. De hecho, estos laboratorios son conocidos y sus productos se venden en farmacias, a diferencia de los falsos medicamentos del fraude.

Asimismo, nos hemos puesto en contacto con la Policía Nacional para conocer el estado de las investigaciones de esta estafa tras la denuncia de Valentín Fuster, pero no hemos obtenido respuesta.

Los médicos desmontan las propiedades milagrosas de Hondrostrong

Además del fraude de las entrevistas falsas a eminencias de la Medicina para promocionar Hondrostrong, el producto promete una serie de beneficios que los expertos también consideran una estafa.

La portavoz de la Sociedad Española de Reumatología, Montserrat Romera, explica en declaraciones a Newtral.es que la composición de este ungüento y sus supuestas propiedades no cuentan con “ninguna evidencia científica”. Sin embargo, lo más sorprendente es que Hondrostrong dice ser útil para multitud de enfermedades que tienen poca relación entre sí: la artrosis, la osteoporosis, la artritis, lesiones de menisco y un largo etcétera.

“La osteoporosis es una enfermedad del hueso, una falta de masa ósea; la artritis es una enfermedad autoinmune y la artrosis es una enfermedad que da una alteración especialmente en el cartílago. Es decir, son totalmente diferentes. Pensar que una crema que te pones en la rodilla va a entrar en la articulación es una cosa increíble. En todo caso, se pueden tomar pomadas antiinflamatorias”, explica Romera.

En este sentido, pide a quienes se puedan sentir atraídos por estos productos que “no hagan caso de Internet” y que, en caso de duda, escriban a sociedades médicas o científicas y pregunten a su médico. “Si hubiera una pomada mágica, lo primero que haríamos sería recetarla, pero no la hay”, y “existen más de 200 enfermedades reumáticas”, concluye.

En el caso de Cardiline, el producto que suplantó a Valentín Fuster antes que Hondrostrong, el director del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares asegura que sus propiedades son “un bulo”.

Supuestamente, estas cápsulas están hechas con raíz de ortiga, valeriana, tiamina, hojas de espino y otros componentes como la “riboflavina”. A juicio del doctor Fuster, decir que un producto así puede curar la hipertensión “es un absurdo completo”, e insiste en que “estas combinaciones no sirven para nada” y que cualquier medicamento debe contar con “estudios randomizados”.

Por último, Fuster pide que esta suplantación de identidad para promocionar estos medicamentos fraudulentos pare cuanto antes. “La cantidad de correspondencia que he tenido de todo el mundo y a todo nivel es impresionante. Estoy cansado de ello”, explica, y lamenta el daño reputacional que puede acarrear este tipo de publicidad engañosa tanto para él como para la institución pública que dirige.

*Con la colaboración de Marta Gutiérrez