La posibilidad de invertir en centrales nucleares en España para generar energía se ha reavivado ante el incremento del precio de la luz y el intento de reducir los recursos procedentes de Rusia. No obstante, esta intención plantea un escenario paradójico debido a la dependencia española del uranio enriquecido del que Rusia fue el mayor exportador a nivel mundial en 2020, según el Observatorio de la Complejidad Económica (OEC, por sus siglas en inglés).
Este elemento es el combustible de los siete reactores nucleares en España, según confirma a Newtral.es Alfonso Barbas Espa, ingeniero nuclear y miembro de la Sociedad Nuclear Española. Sin embargo, pese a que Rusia acapara en torno al 40% del enriquecimiento de esta materia prima en todo el globo, de acuerdo con Guillermo Sánchez León, profesor del Máster de Modelización Matemática de la Universidad de Salamanca (USAL), se pueden almacenar suficientes reservas de uranio enriquecido para garantizar el funcionamiento de las centrales.
Rusia es el principal exportador de uranio enriquecido
El proceso de creación del combustible nuclear abarca desde la minería del uranio y la fabricación de concentrados hasta la elaboración del combustible, pasando por la conversión del material y su enriquecimiento. En España, Enusa se encarga del proceso final. El resto de operaciones se realizan fuera de las fronteras del país, según indica la página web del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco).
(*) Uno de estos territorios es Rusia, que, antes de la invasión rusa de Ucrania, era uno de los principales proveedores de uranio para España. En 2021, un 29,1% de los concentrados de uranio comprados por España procedía de Rusia, país que además acumulaba un año antes, en 2020, en torno a la mitad de la capacidad mundial para producir uranio enriquecido, según la publicación Energía 2022 de Foro Nuclear.
Aun así, es complejo conocer hasta qué punto se extiende la dependencia energética de España con el país gobernado por Vladímir Putin. Según comunican desde la Secretaría de Estado de Comercio, las estadísticas de Aduanas acerca del uranio enriquecido “no reflejan su origen último”. “El uranio enriquecido suele ser objeto de una transformación –está en forma de gas y debe ser convertido en sólido– antes de ser importado y esto se hace en dos plantas: una en Reino Unido y otra en Estados Unidos”, explican.
Esto supone que, “a efectos de Aduanas”, el uranio enriquecido importado por España procede de estos dos países, “aunque una parte de él haya sido enriquecido previamente en Rusia”.
España dispone de reservas para dos recargas de un año y medio
Pese a esta dependencia energética del uranio enriquecido ruso, existe un bajo riesgo de desabastecimiento, según precisó el Gobierno en respuesta a una pregunta escrita del Congreso de marzo de 2022. Así, España, por ley, debe disponer de un mínimo del equivalente a “dos recargas de 18 meses” de los reactores, que es el plazo en el que se producen los cambios y la reordenación en el combustible de las nucleares.
Además, otro factor que reduce el riesgo es “la diversa distribución geográfica de los recursos de uranio, así como de las instalaciones en las que se llevan a cabo los procesos de conversión y enriquecimiento, situadas en países con estabilidad política”. Por ello, bajo el punto de vista de Barbas, la energía nuclear sigue aportando “independencia energética”.
Si bien Sánchez, especialista en energía de la USAL, reconoce la dependencia de Rusia, no solo en el uranio enriquecido sino también en los barcos que lo transportan, enfatiza la existencia de reservas en España y de instalaciones de enriquecimiento en Europa, así como la menor utilización de recursos energéticos en las nucleares que en otro tipo de centrales. “Con 100 toneladas [de uranio] tienes la misma capacidad eléctrica que con dos millones o tres millones de toneladas de carbón o de fuel”, ejemplifica.
En su memoria anual de 2021, publicada en junio de 2022, Enusa aseguró que, por el momento, no se espera que el conflicto en territorio ucraniano “vaya a tener efectos significativos en la actividad de aprovisionamiento de uranio” en España. Aunque dos meses antes reconocía que Rusia es “suministrador relevante” para el país en este ámbito, según recogía Europa Press, indicaba la existencia de un plan de contingencia para hacer frente a interrupciones del suministro.
Para qué se usa el uranio enriquecido en una central nuclear
Para producir energía en una central nuclear se requiere del uranio-235, es decir, uno de los isótopos que forman parte del uranio natural, como explica la Asociación Nuclear Mundial. Sin embargo, como este solo compone un 0,7% del recurso inicial, se produce el proceso a través del cual se enriquece y pasa a tener una concentración de entre un 3% y un 5%, “proporción usada en la mayoría de los reactores”, expone en su página web.
Posteriormente, este uranio enriquecido, principalmente exportado por Rusia en 2020, pasa a unas fábricas de combustible donde se transforma en polvo de dióxido de uranio, que se comprime en forma de pélets o pequeñas pastillas del material. Estas se introducen en unos tubos que, unidos a otros iguales, forman el combustible de una central. Estos compuestos permanecen en el núcleo del reactor “durante varios años”, según indica esta organización.
De acuerdo con datos publicados por la Asociación Nuclear Mundial, Rusia aglutina un 15,4% de la capacidad de enriquecimiento del uranio, un 19,4% de su compresión en pélets y un 17,8% de la composición de barras y del combustible final. Por tanto, pese a que existan alternativas de suministro para el uranio enriquecido, es necesario tener en cuenta que Rusia abarca una parte importante de la cadena de suministro de la energía nuclear.
*El artículo se ha actualizado para rectificar el puesto de Rusia como proveedor de España en cuanto a uranio enriquecido.
- Datos del Observatorio de la Complejidad Económica (OEC, por sus siglas en inglés) sobre el comercio internacional del uranio enriquecido
- Alfonso Barbas Espa, ingeniero nuclear y miembro de la Sociedad Nuclear Española
- Guillermo Sánchez León, profesor del Máster de Modelización Matemática de la Universidad de Salamanca (USAL) y especialista en energía
- Información sobre el combustible nuclear en la página web del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco)
- Informe ‘Energía 2022’ del Foro de la Industria Nuclear Española
- Prensa de la Secretaría de Estado de Comercio
- Respuesta del Gobierno a una pregunta escrita del Congreso sobre la importación española de uranio el 7 de marzo de 2022
- Real Decreto 1464/1999, de 17 de septiembre, sobre actividades de la primera parte del ciclo del combustible nuclear
- Memoria anual de 2021 de Enusa, publicada en junio de 2022
- Declaraciones de Enusa sobre los suministros de uranio procedentes de Rusia, recogidas en un artículo de Europa Press el 24 de febrero de 2022
- Información sobre el enriquecimiento de uranio según la Asociación Nuclear Mundial
- Datos sobre la fabricación de combustible nuclear de la Asociación Nuclear Mundial
el problema es que al parecer para los dirigentes europeos, la política importada desde el Norte, le ha calado más las mentes que la economía de sus naciones; cuando tienen que analizar la necesidad de comprarle a Rusia la mercancía necesaria para el desarrollo de su nación sólo piensan en V. Putin y no en su pueblo y en su economía; y eso que se han desgañitado criticando a los comunistas, quienes hasta ideologizaban el deporte, según sus detractores