Fact Fiction

La historia real detrás de ‘Tierra de nadie’, la película que hace una radiografía del narcotráfico en Cádiz

Tierra de nadie
Los actores Jesús Carroza, Karra Elejalde y Luis Zahera, que interpretan a los tres personajes principales. Foto: Dossier de prensa.
Tiempo de lectura: 5 min

La película Tierra de nadie (disponible en Prime Video) refleja el problema del narcotráfico en Cádiz a través de la amistad de tres viejos amigos que se ven irremediablemente unidos en el traslado rutinario de un yate incautado a un cártel mexicano. 

Publicidad
  • La película utiliza la amistad para narrar la historia porque el productor y creador de la idea original, Álvaro Ariza, ha vivido en Barbate (Cádiz) “el tiempo suficiente para ver cómo amigos de toda la vida eligen caminos muy diferentes, aunque sean tus amigos de siempre”. 

Este traslado no existió de la forma en que narra la ficción, pero sí es algo que ocurre con frecuencia. En Tierra de nadie, un depositario judicial llamado Benito (interpretado por Jesús Carroza) debe trasladar una lancha que tiene escondida cocaína.

  • Un depositario judicial es un civil que custodia bienes que un juzgado le designa, tras habérsele concedido previamente el servicio de tener un depósito. 

Ariza explica a Newtral.es que “es muy difícil que haya droga en un barco y no la encuentre la Guardia Civil, pero nos pareció más cinematográfico contarlo desde ahí”. 

Por tanto, Tierra de nadie construye una historia ficticia a través de diferentes hechos reales que suceden en Cádiz a diario y que Ariza ha visto en su infancia. De hecho, la idea original nace de hablar con Óscar Rodríguez, un depositario judicial real en Cádiz en el que se basa el personaje de Benito. 

Publicidad
  • Los otros dos protagonistas, que son un guardia civil llamado Mateo (Luis Zahera) y un pescador convertido en narco por la miseria llamado Juan (Karra Elejalde), no existieron de verdad, aunque se basan en testimonios reales de guardias civiles y afectados por el narcotráfico. 

La agencia de prensa de la película, Bowfinger, asegura a Newtral.es que tanto Ariza como Fernando Navarro (guionista) “han estado varios años documentando la película para poder contar la realidad del narcotráfico desde diferentes ángulos”. 

La realidad del narcotráfico en Cádiz. “El narcotraficante de ahora no es el mismo que el narcotraficante de los años 90”, señala Ariza a Newtral.es. El creador cuenta que “ahora Cádiz es una nueva ruta, la que fuera ruta del hachís ahora también lo es de la cocaína y de armas. Es el objetivo de mafias mucho más grandes”.

  • En la película, el conflicto nace porque irrumpe en la zona un cártel mexicano que se dedica al negocio de la cocaína, que es mucho más violento que la venta de hachís, a lo que estaba acostumbrado Cádiz. 
  • Ariza asegura que en la realidad no son solo mafias mexicanas, pero que se escogió esa porque Tierra de nadie está coproducida por el mexicano Chris Hool. 
Publicidad

El creador añade que “la problemática a la que se enfrentan quienes viven o ejercen su labor allí también es mucho mayor”. 

  • El País lo denomina “narcocultura”, en referencia a una situación normalizada en la zona hasta el punto de que se percibe como el enemigo a aquel que trata de impedir la actividad.
Foto del rodaje de la película. Dossier de prensa.

La figura del depositario judicial. La Guardia Civil no se dedica al transporte de los vehículos incautados, según explica Ariza, sino que son civiles que se exponen “a un riesgo extremo y están muy desprotegidos” ante cualquier intento de robo. En cualquier momento “pueden prescindir de ellos o deberles dinero desde las propias instituciones sin grandes consecuencias”, añade. 

Publicidad

En Tierra de nadie, Benito convirtió su terreno en un depósito judicial que llenó de cámaras y donde vive con sus perros y su novia. Los narcos entran con frecuencia a su casa para robar los vehículos. 

  • Rodríguez vive exactamente igual, según recoge El Mundo. Tiene 14 cámaras de seguridad, dos perros y está atento las 24 horas del día para evitar que los narcos le roben el material para revenderlo. 
  • Sin embargo, en la vida real, Rodríguez está separado y su hija vive con su exmujer. En la película, la novia de Benito le deja por el modo de vida que lleva y porque no sabe si podrá tener hijos con él. 

“La realidad superó a la ficción”. El director de Tierra de nadie, Albert Pintó, contó a RTVE (una de las productoras de la película) que cuando estaban rodando “la realidad superó a la ficción” porque “pasaron las mismas cosas” que estaban grabando. Por ejemplo, “un asalto y un choque con un camión y el asesinato a dos guardias civiles”.

El segundo caso que menciona Pintó fue el más sonado: el atropello mortal de dos guardias civiles por parte de una narcolancha en Barbate el 9 de febrero de 2024. Como contamos en Newtral.es, varias narcolanchas se refugiaron de un temporal en el puerto y seis agentes se acercaron a bordo de una zódiac para identificarlos esa noche. Fue entonces cuando fueron embestidos. 

  • En aquel momento, organizaciones como la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) volvieron a pedir “aumentar los efectivos y los medios con los que los guardias civiles han de perseguir a los narcotraficantes”.

Tierra de nadie también refleja la poca eficacia de las instituciones y la corrupción policial que, en parte, es uno de los motivos por los que se produce el traslado de la forma en la que ocurre en la película.

  • “Sabes perfectamente que esa gentuza tiene mejores yates que nosotros, mejores coches, más dinero, mejor infraestructura. Son un Estado dentro de otro Estado”, le dice en un momento determinado Mateo a Benito, quien está asustado por el peligro del traslado y pide refuerzo policial.
Mateo, Benito y Juan en la película. Dossier de prensa.

Fuentes
  • Declaraciones de Álvaro Ariza, productor y creador de la idea original, a Newtral.es
  • Respuesta de una de las productoras de la película a Newtral.es
  • Entrevista de RTVE a Albert Pintó, el director
  • Reportaje de ‘El Mundo’ a Óscar Rodríguez, en quien se basa el personaje de Jesús Carroza
  • Artículo de ‘El País’ sobre el narcotráfico en Cádiz