La baronesa Thyssen firma con Cultura un acuerdo por 97,5 millones de euros para el alquiler de sus obras hasta 2036

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Interior del Museo Thyssen | Fuente: Shutterstock
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La colección de la baronesa Thyssen se expondrá en la colección permanente del Museo Nacional Thyssen-Bornemisza de Madrid hasta 2036 por un coste anual de 6,5 millones de euros. El próximo 9 de febrero Carmen Cervera, baronesa Thyssen, firma con el ministro de Cultura, Miquel Iceta, el acuerdo para el alquiler de sus obras por un periodo de 15 años con un valor estimado de 97,5 millones de euros.

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Este contrato de arrendamiento, aprobado en agosto por el Consejo de Ministros, reconoce que, transcurrido ese tiempo, el Estado tendría una opción de compra preferente sobre la colección. El acuerdo inicial, firmado hace un año, incluye la vuelta del Mata Mua, una de las obras más conocidas de Paul Gauguin que se ha convertido en icono del Museo Thyssen. La vuelta del cuadro, que salió del museo durante la pandemia, fue una de las condiciones clave en la firma del acuerdo. 

Según señala el Ministerio de Cultura, el conjunto de pinturas y esculturas incluidas en el acuerdo con la baronesa Thyssen tienen un valor de 1.040 millones de euros. Entre estas 329 obras se encuentran algunas piezas de Braque, Gauguin, van Gogh, Kandinsky o Picasso, entre otros artistas. 

Mata Mua, Paul Gauguin

Este acuerdo entre Cultura y la baronesa Thyssen pone fin a varios años de prórrogas del préstamo gratuito acordado con el Estado en 2002 y que se ampliaba periódicamente.

Tras el acuerdo con Cultura se produce el reencuentro de las dos colecciones, la de la baronesa y la de su difunto marido, el barón Hans Heinrich von Thyssen-Bornemisza.

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Otros acuerdos entre el Thyssen y Cultura

1988: Primer contrato para el préstamo de obras

Con el fin de asegurar un futuro para sus cuadros, en la década de los 80 el barón propone a las autoridades suizas una ampliación de la galería Villa Favorita donde se exponían hasta entonces las obras. Según se explica en la página oficial de la colección, al no encontrar apoyo financiero para llevarla a cabo, el barón comenzó a explorar la posibilidad de un emplazamiento en el extranjero.

Es en este momento cuando aparece la oferta del Gobierno español junto a otras como la de Reino Unido, Alemania o la Fundación Getty. “La influencia de su esposa, la española Carmen Cervera, fue en última instancia decisiva para que el barón decidiese alojar su colección en España”, sostienen en la web.

Así, en 1988 se autoriza el sometimiento a legislación extranjera del contrato que establece las condiciones para la instalación en España de la mayor parte de la Colección Thyssen-Bornemisza. En concreto, se fija que el contrato entre el Reino de España y Favorita Trustees Limited, sociedad propietaria de la colección registrada en Bermuda, quedara sometido al derecho inglés. Ese mismo año, el barón y el Estado firmaron el primer contrato para el préstamo de 775 obras y se creó la Fundación Colección Thyssen-Bornemisza, que en 1989 se reconoce e inscribe como fundación cultural privada de servicio y promoción.

1990: Concesión de dos créditos para la Fundación 

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A través del Ministerio de Cultura se conceden, en 1990, dos créditos extraordinarios a la Fundación Colección Thyssen-Bornemisza por un importe de 9.000 millones de pesetas para atender a los gastos derivados de la instalación de la colección en España. 

De esta cantidad, 2.000 millones de pesetas se destinaron a las obras de acondicionamiento del Palacio de Villahermosa, donde se encuentra ubicada la colección. Los 7.000 millones de pesetas restantes fueron otorgados en concepto de “fondo fundacional”. 

1993: El Estado compra parte de la colección del barón

La remodelación completa del antiguo palacio de Villahermosa finalizó en 1992, año en el que el museo abrió al público sus puertas por primera vez. En junio de 1993, se firmó la venta definitiva de parte de las obras del barón al Estado por un total de 350 millones de dólares. Ese mismo año, cuando el barón Thyssen hizo el reparto del resto de sus cuadros y bienes entre los diversos miembros de la familia, algunos –entre los que se encuentran obras de Monet, Renoir o Degas– pasaron a la propiedad de Carmen Cervera.

Mediante un real decreto-ley el Estado asumió la obligación de aportar 42.277 millones de pesetas a la Fundación Colección Thyssen-Bornemisza para la financiación de la compra de la parte de la colección acordada. 

“La presencia definitiva en España de la colección Thyssen-Bormenisza constituye una ocasión única para colmar las lagunas existentes en las colecciones de pintura moderna de nuestro país y reforzar las existentes de pintura antigua, al tiempo que da pleno sentido a la inversión realizada para conseguir su préstamo temporal”

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Además, con la entrada en vigor del real decreto-ley, el Gobierno quedó autorizado para llevar a cabo una serie de acciones. Entre ellas se encuentra la cesión gratuita del Palacio de Villahermosa a la Fundación Colección Thyssen-Bornemisza, siempre y cuando se destinara a albergar y exhibir al público las obras de la colección. De igual modo, se autorizó al Gobierno para que, mediante el contrato, adoptara el compromiso de aportar los recursos necesarios para cubrir las diferencias que pudieran producirse entre los ingresos y gastos para el cumplimiento de sus fines fundacionales.

2002: Préstamo gratuito de las obras 

Las obras correspondientes a la colección de la baronesa Thyssen han sido prestadas gratuitamente desde 2002. Sin embargo, son pocos los detalles que se conocen de las sucesivas prórrogas de este acuerdo.

En una solicitud de derecho de acceso en la que se solicitaba tanto la consulta del contrato de este préstamo como la del de adquisición de 1993, se recoge que estos tienen naturaleza de contrato privado confidencial. “Por la información que contienen quedan protegidos por los límites relativos a los intereses económicos y comerciales, secreto profesional y garantía de la confidencialidad, reconocidos en la Ley 19/2013, de 9 de diciembre, de transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno”, especifica el documento.

La reserva del Estado para asegurar las obras de arte expuestas en el Thyssen

Desde 1999 el Gobierno ha otorgado la garantía del Estado a diferentes obras de arte para su exhibición en el Thyssen. Este sistema de seguro público protege las obras de arte frente a los posibles daños que puedan sufrir desde que se prestan hasta que se devuelven a su titular. Se trata de una cantidad, equivalente al valor de la pieza, que el Ministerio de Cultura tendría que abonar a su prestador en caso de pérdida, sustracción o destrucción de la obra.

Según las órdenes que aparecen recogidas en el BOE con este fin, en los últimos 23 años se ha concedido esta garantía en, al menos, 119 ocasiones. El importe de cobertura de las obras garantizadas por el Estado para ser expuestas en el Thyssen va desde los 629.418.508,59 euros de 61 obras para la exposición «Edward Hopper» de 2012, a los 818.799,64 euros por los que se aseguró la obra Gilt de Robert Rauschenberg en 2015. En 2021, el Estado reservó 2,4 millones de euros para asegurar las obras expuestas en este museo, lo que supone un 17,6% más que en el año anterior.

En caso de que la obra de arte asegurada se haya visto dañada, la indemnización cubriría el coste de la restauración de la misma, acordado entre el prestador y el ministerio. Si no llegasen a ningún acuerdo, sería un perito quien determinara esa cantidad. Además, se debería abonar una cantidad igual a la depreciación de su valor de mercado después de la restauración. Aún así, la cuantía de esta indemnización no podrá exceder del valor de la obra declarado en la solicitud y reconocido en la orden de otorgamiento de garantía del Estado.

[Las obras de arte aseguradas con la garantía del Estado en 2021]