El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, defendió desde el principio -noviembre de 2019- que el acuerdo para que la Supercopa se jugara los próximos años en Arabia Saudí era algo que trascendía el campo de juego.
Frente a las críticas por pactar con un país donde no se respetan los derechos humanos básicos, Rubiales se alineó con la tesis de los dirigentes saudíes, que defendían el deporte como una “herramienta para la apertura y la igualdad social”.
Palabras como estas resuenan estos días en los que El Confidencial ha publicado que Rubiales y el jugador del Fútbol Club Barcelona Gerard Piqué fueron los que gestionaron el pacto. A cambio, la empresa del futbolista (Kosmos) habría recibido por cada cita anual una comisión millonaria y la RFEF, cerca de 40 millones de euros libres de impuestos.
Celebrar la Supercopa para no “darle la espalda” a la sociedad saudí
Desde el primer momento, Luis Rubiales aseguró que como parte del acuerdo la RFEF había pactado una serie de medidas sociales que favorecerían la igualdad de género en Arabia Saudí. Entre otras, “el acceso sin restricciones de las mujeres a los partidos, y la puesta en marcha de una competición de fútbol femenino en Arabia”, según recoge el comunicado oficial.
En este contexto, Rubiales aseguraba que había decidido cerrar el pacto para que se jugara la Supercopa en Arabia Saudí para no “darle la espalda” a la sociedad de este país, declaró en una entrevista en la Cadena SER en noviembre de 2019.
“Podíamos optar a hacerlo en otro país y darle la espalda a los mujeres y hombres que viven en Arabia Saudí (…) o participar activamente para hacer ver que una sociedad puede transformarse”
Luis Rubiales
La “obligación moral” de la Federación para “ayudar” a través de la Supercopa
Las críticas que generó la decisión hicieron que las preguntas sobre la conveniencia de celebrar la Supercopa en Arabia Saudí fueran recurrentes. Otro de los argumentos que esgrimió para justificar el acuerdo fue la “obligación moral” que tenía la Federación de ayudar a cambiar la desigualdad social del país.
«La RFEF ha incluido ciertas materias de índole social porque veíamos una obligación moral por nuestra parte el ir allí a ayudar. ¿Teníamos ofertas económicas e intereses económicos similares? Los teníamos, pero veíamos una oportunidad»
Luis Rubiales
En contra del “discurso de la comodidad” que apostaba por no ir
A los pocos días, Luis Rubiales dio un paso más. Ya no solo defendía su postura, sino que criticaba a quienes censuraban que esta competición española se celebrara en Arabia Saudí, a la cual denominaba como «la Supercopa de la igualdad». En su opinión, se trataba de un discurso “fácil” que llegaba “directo al corazón de la gente”, pero que era equivocado: “En mi humilde opinión tenemos que hacer justo lo contrario”, exponía durante el sorteo de la Copa del Rey de 2019-2020.
“Podíamos tener el discurso fácil de la comodidad, de la calidez. Un discurso que llega directo al corazón de la gente: no hay igualdad y no vamos. Eso es equivocarse. En mi humilde opinión tenemos que hacer justo lo contrario”
Luis Rubiales
De igual modo, aseguró que los ingresos que la RFEF iba a conseguir por celebrar la Supercopa en Arabia Saudí eran «los mismos» que los que se obtendrían en otros países: «Os lo puedo asegurar», insistía.
“Lo que estamos haciendo es ayudar a la mujer en el fútbol”
En 2022, y a pesar de que la de 2021 se celebró en Sevilla por la pandemia, Rubiales mantenía la misma línea en su discurso: ante los micrófonos de la Cadena SER se centraba en los terrenos de juego y se desentendía del resto por considerarlo “cuestiones políticas”.
“A nivel ético, lo que estamos haciendo es ayudar mucho al desarrollo de la mujer en el fútbol, que es nuestro cometido. El resto de cuestiones, son cuestiones políticas que permanecen al margen del fútbol”
Luis Rubiales
