Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han disparado este miércoles contra una delegación diplomática internacional compuesta por más de 25 representantes procedentes de 32 países europeos, americanos, árabes y asiáticos y de organizaciones internacionales, que se encontraban de visita en Yenín, ciudad al norte de Cisjordania. El derecho internacional establece que el personal diplomático “es inviolable”, por lo que un ataque hacia este puede tener consecuencias, según los expertos.
Qué ha ocurrido. La delegación diplomática estaba compuesta por varios embajadores, cónsules y otros representantes de España, Portugal, Francia, Italia, Canadá, Finlandia y Reino Unido, entre otros.
El grupo acudió este miércoles a Yenín en una misión oficial organizada por la Autoridad Nacional Palestina para “observar y evaluar la situación humanitaria y documentar las continuas violaciones perpetradas” por Israel en Cisjordania.
La delegación se reunió con el Gobernador de Yenín y otros representantes locales y posteriormente visitó las inmediaciones del campamento de refugiados palestinos situado en la ciudad. Fue en ese momento cuando las fuerzas israelíes abrieron fuego contra los representantes.
- Fuentes oficiales de Exteriores de España afirman a Newtral.es que el ministerio está investigando lo sucedido y que había solo un español en el grupo de diplomáticos “que se encuentra bien”. “Estamos en contacto con otros países afectados para coordinar conjuntamente una respuesta a lo ocurrido”, concluyen.
La respuesta de Israel. Las FDI han dado su propia versión del incidente. Según el ejército, la expedición “se desvió” de la ruta aprobada para su visita y llegó a una zona donde estaba prohibido permanecer” por lo que “una fuerza de las FDI que operaba en el punto disparó un tiro de dispersión” sin causar daños ni víctimas.
Cómo está protegido el personal diplomático. El estatus del personal diplomático a nivel internacional viene recogido en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961.
Su artículo 29 establece que “la persona del agente diplomático es inviolable. No puede ser objeto de ninguna forma de detención o arresto. El Estado receptor le tratará con el debido respeto y adoptará todas las medidas adecuadas para impedir cualquier atentado contra su persona, su libertad o su dignidad”. Esta protección se extiende también a su residencia particular y bienes.
Julio Guinea, profesor de Derecho de la Unión Europea en la Universidad Europea, explica a Newtral.es que esta norma “se trata de una obligación jurídica en términos absolutos que no decae ni siquiera en contextos de tensión política o conflicto armado como el que estamos viendo” en este caso.
El personal diplomático durante un conflicto. En situación de conflicto armado, el personal diplomático adquiere de forma adicional el régimen general de inmunidad de la población civil que recoge el Protocolo I adicional a los Convenios de Ginebra de 1949.
En este sentido, el experto señala que el personal diplomático “no pierde el estatus que le da la Convención de Viena por el hecho de que estalle un conflicto armado, sino que su inviolabilidad se refuerza ya que entra dentro de la categoría de persona protegida”.
- Por tanto, indica, “cualquier acto de violencia deliberada contra los diplomáticos constituye una violación grave del Derecho Internacional Humanitario y es incluso susceptible de ser calificado como crimen de guerra”.
Por otro lado, el artículo 22 de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas recoge también que el Estado receptor al que acude este personal diplomático tiene la obligación especial de adoptar todas las medidas adecuadas para protegerlos de cualquier daño o de que se atente contra su dignidad.
Sin embargo, explica Guinea, “en contextos en los que el Estado receptor se encuentra en situación de ocupación, como ocurre en los territorios palestinos, la obligación de proteger a los diplomáticos extranjeros no desaparece, sino que recae con más fuerza sobre la potencia ocupante”, por lo que en este caso es Israel el encargado de asegurar la seguridad de este tipo de misiones.
Consecuencias. El experto señala que cuando hay un ataque contra el personal diplomático “ya sea consciente o negligente”, se incurre en una violacion del derecho internacional que tendrá consecuencias de diferentes grados.
- Estas pueden ser desde responsabilidades estatales que conllevan la obligación de cesar en el acto, ofrecer garantías de que no se va a repetir y reparar íntegramente el daño a procesos penales internacionales contra mandos militares, funcionarios o incluso autoridades políticas cuando el hecho sea constituyente de un crimen de guerra o incluso contra la humanidad.
- Julio Guinea, profesor de Derecho de la Unión Europea en la Universidad Europea
- Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961
- Protocolo I adicional a los Convenios de Ginebra de 1949
- Ministerio de Asuntos Exteriores de Palestina
- Agencia WAFA
- UNRWA
- Tuit de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI)
- Ministerio de Asuntos Exteriores de España
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