La hostelería atraviesa un momento crítico como uno de los sectores más afectados por la crisis derivada del coronavirus. En las últimas semanas el sector se ha movilizado en contra de algunas medidas restrictivas puestas en marcha por las autonomías para contener la expansión de la segunda ola de la COVID-19, tras un verano encomendado a las terrazas y ante un otoño de complicadas proyecciones económicas.
- Este sector representó en 2018, según el más reciente Anuario de la Hostelería de España, un 6,2% del PIB español.
[65.000 cierres previstos en un año negro para la hostelería en España]
Partamos de la base de que hay que coger con pinzas las estadísticas de lo que se llamaba allá por junio la “nueva normalidad”. Nos centramos en este caso en los indicadores de actividad del sector servicios (IASS) que publica el Instituto Nacional de Estadística (INE) registran una evolución mensual a través de una encuesta continua a 28.000 empresas y permiten analizar la tendencia sobre dos variables: la cifra de negocios y el personal ocupado.
En nuestro ‘pronóstiko’, ponemos la lupa en el mes de agosto, cuyo dato intermensual se publicará el próximo 21 de octubre.
Lo más importante
En julio, un mes en el que se esperaba reanudar la movilidad, la hostelería experimentó el mayor crecimiento mensual de las actividades del sector servicios al subir en un 48,9% en la serie corregida de efectos estacionales y de calendario, por encima de la variación del 18,7% de la venta y reparación de vehículos y motocicletas, que le sigue en segundo lugar.
La foto global que hace el INE del sector servicios en julio refleja tres meses consecutivos de avances en la facturación tras los meses del confinamiento, aunque en el séptimo mes del año reveló cierta moderación, al anotar una subida en la facturación del 7,9% en la serie corregida de estacionalidad y calendario.
¿Cuál es el contexto?
Tras el desplome de los servicios en los meses del confinamiento, la hostelería fue la locomotora para el conjunto del sector terciario en junio, al remontar en un 182,9% con respecto a mayo. Es a partir del 21 de junio, fin del estado de alarma, cuando empiezan a desplegarse las terrazas, las condiciones climáticas mejoran y la idea de que la propagación del virus es menor en espacios abiertos empieza a cundir entre la ciudadanía.
- Tanto en junio como en julio, la restauración y el ocio tuvieron un mejor comportamiento que los servicios de alojamiento, las dos actividades que componen la hostelería.
- El dinamismo de la hostelería seguía hasta marzo de 2020, cuando estalla la crisis del coronavirus, una tendencia estable.
¿Qué hay que tener en cuenta?
- Hacia mediados de agosto, los rebrotes en determinados puntos de la geografía empezaron a provocar las primeras restricciones en plena campaña turística. Y fueron contundentes: la clausura de discotecas y locales de ocio nocturno, y la fijación de horarios de cierre a la una de la madrugada.
- En este momento, a finales de septiembre, la regulación del ocio difiere de un territorio a otro en función de la administración que esté al mando, de manera que se puede dar la circunstancia de encontrar aforos reducidos al 50% y barras cerradas en un pueblo y servicio interior prohibido en el de al lado.
- Además, el sector aglutina un quinto de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) iniciados desde el inicio de la pandemia y cuya extensión hasta final de año está en el aire.
- Por eso, el sector se ha movilizado en las últimas semanas en varias ciudades españolas para pedir que los ERTE se alarguen y la hostelería deje de ser exhibida como un agravante de la expansión comunitaria del virus. El PP ha pedido prorrogarlos hasta el 1 de abril de 2021.
- El INE ratificó este miércoles la entrada de España en recesión y moderó el avance del cálculo del hundimiento del PIB en el segundo trimestre, que queda en un 17,8%. El comercio, el transporte y la hostelería registraron en conjunto la mayor contracción de todas las actividades, un 39,6%.
#Fact
Los datos correspondientes al mes de agosto del Informe sobre Empleo en Turismo elaborado por Turespaña, que depende del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, revelan que en el octavo mes del año, el turismo experimentó en términos interanuales una caída del 13,4% en cotizantes, que se traduce en 351.029 personas.
- En este panorama, la hostelería perdió en agosto de 2020 un total de 273.849 afiliados (172.022 de servicios de comidas y bebidas y 101.827 de alojamiento) con respecto al mismo periodo del año anterior.
- Las agencias de viajes perdieron 9.733 afiliados y otras actividades, otros 67.447.