Ni significa ser trans necesariamente ni resumirlo como “no ser ni hombre ni mujer” sería del todo preciso. Las personas no binarias están invisibilizadas y su realidad no siempre se conceptualiza de forma correcta. Así lo expone un informe publicado por el Ministerio de Igualdad en el Día Internacional de la visibilidad no binaria.
Dicho documento señala que del total de personas encuestadas, un 48% se considera no binaria y trans, pero un 33% no se identifica con el término trans pero sí con el de no binaria. Esto se debe a que una parte del colectivo de personas no binarias considera que ser trans es autodeterminar una identidad diferente a la asignada al nacer (cuando la persona se identifica con el mismo género que le asignaron al nacer se emplea el término cis). Sin embargo, otras personas no binarias consideran que el binarismo no solo hace alusión al género entendido hombre o mujer, sino al propio sistema de asignación: cis o trans. De ahí que no consideren que ser una persona no binaria implique necesariamente ser trans.
Por otro lado, el Estudio sobre las necesidades y demandas de las personas no binarias en España, dirigido por los investigadores Isabel López y Gorka Tobalina, expone las diferencias a la hora de definir el propio término. El 51% de las personas encuestadas coinciden en que “persona no binaria” sería una especie de “término paraguas” que aglutina a quienes “no se identifican con ser hombres o mujeres, al menos no de una manera absoluta o sostenida en el tiempo”.
Otra publicación académica sobre las personas no binarias, llevada a cabo por los investigadores Lucas Platero e Isabel López, lo definía así: “Ser una persona no binaria implica no identificarse plena y satisfactoriamente, de forma consistente y estable en el tiempo, con ninguna de las categorías disponibles, ni con las expectativas sociales relacionadas con cada una de ellas. Es un término amplio o paraguas que recoge mucha diversidad de sensibilidades”.
Personas no binarias: exigencias en su aspecto físico
Durante la presentación del informe, la investigadora Isabel López, de la organización 4Motion Systemic, señalaba que “no es conveniente que se convierta en una etiqueta estanca”: “La evidencia nos muestra que las personas encuestadas no tratan de crear una tercera categoría estanca en la que se puedan crear exigencias”.
López hacía referencia a cómo se entiende el no binarismo desde una sociedad binaria: “Esperan una persona que sea muy andrógina o que no cumpla con ningún tipo de rol de género o, por lo menos, no con solo uno, o que uses siempre el neutro”, dice una de las personas no binarias encuestadas cuyo testimonio queda recogido en el informe. Otra de ellas señala: “Una persona aparentemente andrógina, blanca, sin vello corporal, joven; al final va a ser mucho más aceptable que una persona racializada, gorda, con barba. Si tú le preguntas a una persona que no sabe nada sobre las personas no binarias, lo primero que le va a venir a la cabeza es una persona andrógina”.
Así, tal y como detallan los investigadores en el documento, muchas personas no binarias encuestadas coinciden en que la androginia, como una ambigüedad de género, sería un elemento clave que ayuda a que su realidad sea mejor interpretada y entendida. Sin embargo, puede ser contraproducente si, como apunta Isabel López, se convierte en una exigencia o un deber ser.
Es por ello que varias de las personas encuestadas hacen referencia a su aspecto: “Que me lean como mujer por tener pecho y la voz aguda es lo peor, porque la gente piensa que ser mujer es eso: tener pecho y voz aguda. Por eso se me ha pasado muchas veces por la cabeza hormonarme y hacerme la masculinización de pecho”, dice una de ellas. Y otra señala: “Parece que si no lo modifico [el cuerpo], los demás me siguen viendo como una mujer cis”.
Otra de las personas entrevistadas reconoce haber sentido presión precisamente para lo contrario, para no modificar su cuerpo: “Parece que si lo hago soy débil ante el sistema patriarcal y la industria médica patologizante”. Por ello, como exponía Isabel López, “la variabilidad es amplia”: “Hay personas no binarias que se sienten cómodas leídas con su expresión de género asociada a lo femenino y eso no significa que sean mujeres. Y hay personas no binarias que buscan cierta ambigüedad para reforzar su no binarismo. No hay una sola forma de ser no binarie”, añadía.
El informe sobre personas no binarias alude a estudios internacionales que cifran el número de personas no binarias entre un 7% y un 14% de la población mundial. El documento también hace referencia al passing, es decir, al uso consciente de una u otra expresión de género para que te lean de una determinada manera. Así, el 97% de las personas participantes de este estudio “utiliza las estrategias de passing en al menos uno de los ámbitos de su vida”: “Un 60% hace passing [performar el género masculino o el femenino] en la mayoría de los ámbitos de su vida. Estos datos se reflejan en realidades concretas como, por ejemplo, el miedo a perder el empleo”.
Además, un 60% considera que sería necesario cuestionar el binarismo de los propios registros estadísticos, ya sea en el Registro Civil como en los formularios médicos. Es decir, reclaman, por ejemplo, que sea posible modificar la mención registral del sexo (en el DNI) para que haya una casilla neutra o en blanco. Esta posibilidad estaba contemplada en el primer borrador del anteproyecto de ley trans y LGTBI, pero finalmente fue eliminada antes de pasar a trámite parlamentario.
Así, el proyecto de ley trans y LGTBI no contempla ninguna medida específica para las personas no binarias, algo que podría cambiar durante la fase de enmiendas.
Necesidades en el ámbito sanitario y el no binarismo
El ámbito sanitario es uno de los más inseguros para las personas no binarias, tal y como concluye el informe publicado por el Ministerio de Igualdad. Aquí, un 87% de las personas encuestadas hace passing, es decir, enmascarar su no binarismo para encajar en el binarismo sanitario para recibir la atención que requieren.
En palabras de una de las personas entrevistadas: “Porque yo voy a la consulta, porque yo tengo pene, yo tengo pechos, y no quiero cambiar nada, pero es que el médico da a entender que yo soy un varón trans. Y me pregunta si ya me quité el útero, si ya me quité los ovarios…”.
Otra de ellas relata su experiencia así: “Soy enfermera y conozco el circuito sanitario. Me parece que el circuito sanitario es superhostil para las personas trans en general. Y creo que para las personas enebé [palabra que procede del deletreo de las siglas NB, de No Binario] en particular es mucho más, si cabe. Porque he realizado acompañamientos de chiques que al final tienen que dar unas respuestas impostadas para acceder a las hormonas o para acceder a listas de espera para las cirugías. Si tú al final dices que eres una persona no binaria pero que quieres estrógenos o quieres de esto, le explota la cabeza [en referencia al personal sanitario]”.
Como señala la publicación académica de Lucas Platero e Isabel López (Universitat Autònoma de Barcelona, 2018), las personas no binarias “se enfrentan al miedo constante al rechazo y las consecuencias que tienen sus decisiones”. “Este miedo tiene efectos en la salud, terminar los estudios, encontrar un trabajo o simplemente tener un grupo de amistades”, añaden los autores.
Un paper publicado en The Lancet en 2020 apunta que las personas no binarias tienen más barreras en la atención médica que las personas trans que se identifican con el género binario. “Esto incluye escasez y obstáculos relevantes en la atención, en la información o en la obtención, por ejemplo, de tratamiento hormonal”, apunta el estudio científico. Y añade, además, que “es probable que estas experiencias juntas hayan contribuido sustancialmente a las altas tasas de depresión, ansiedad e ideación suicida observada en jóvenes que se identifican como no binarios”.
- Estudio sobre las necesidades y demandas de las personas no binarias en España (Ministerio de Igualdad, 2022)
- Las personas trans no binarias en el Estado Español (Universitat Autònoma de Barcelona, 2018)
- Youths with a non-binary gender identity: a review of their sociodemographic and clinical profile (The Lancet, 2020)
- Rueda de prensa del Ministerio de Igualdad para la presentación del informe sobre personas no binarias (14 de julio de 2022)
MIEDO AL RECHAZO, no bro eso se le llama baja autoestima, si te identificas como no binario esta bien pero ¿Que importa si las personas no te consderan androgino? a ellos que le importa, eso se le llama inseguridad
Mejor pónganse a trabajar.
Que necesidad absurda de llamar la atención, no pueden pretender que a primera vista la gente sepa cómo te identificas... El tema sanitario aún me parece peor cuando para que te den cita en el traumatólogo hay esperas de más de 6 meses y tenemos que estar hormonando y tratando estos problemas... No puedo entenderlo...
La adolescencia siempre a sido complicada pero la estáis retorciendo todavía más...
Vuelve a leerlo, despacio, por favor.
Exacto, sus sentimientos y dolencias son de carácter psicológico o patológico, no son acordes a su biologia
Vuelve a leerlo, despacio, por favor.
Parece que todos los problemas de los "enebé" son de carácter psicológico (no identificación, inseguridad, miedo... querer casito) porque no hay ninguna peculiaridad biológica que les haga requerir tratamientos particulares)