El 25 de enero de 2024, Kenneth Smith se convirtió en el primer preso ejecutado con gas nitrógeno en Estados Unidos. Se trata de un método que nunca se había aplicado en el país pero que contemplan varios estados en sus normativas como alternativa a la inyección letal, ya que existen distintas ejecuciones con las que se aplican las penas de muerte en Estados Unidos.
- En noviembre de 2022, el estado de Alabama ya trató de ejecutar a Smith para cumplir con la condena de la pena capital. Sin embargo, las autoridades no pudieron encontrarle la vena para inocular la inyección letal, por lo que se pospuso la ejecución con nitrógeno.
A día de hoy, de los 50 estados que conforman el país, 27 contemplan la pena de muerte en sus normativas, mientras que 23 la abolieron en distintos años –desde Michigan en 1847 (solo la mantuvo para penas de traición, pero la abolió de forma completa en 1963) hasta Virginia en 2021. Así lo recoge la organización sin ánimo de lucro Death Penalty Information Center (DPIC), reconocida por organismos como la Biblioteca del Congreso estadounidense.
Datos. La inyección letal es, según el registro de la DPIC, el método más utilizado y está contemplado en los 27 estados que cuentan con este tipo de condena. En el 88,5% de las ejecuciones por penas de muerte en Estados Unidos (1.402 de las 1.583 contabilizadas desde 1976), el modo ha sido este. No obstante, la organización indica que ante “la resistencia de las farmacéuticas a suministrar medicamentos que se suelen utilizar en las inyecciones letales, algunos estados permiten ahora métodos alternativos”.
El gas nitrógeno es una de las ejecuciones alternativas que contemplan, en concreto, siete estados, pero no es la única. La electrocución, la horca e incluso un pelotón de fusilamiento –estas dos últimas se han llevado a cabo en tres ocasiones, respectivamente– son algunas de ellas.
Las ejecuciones alternativas que podrían aplicar a reos con penas de muerte en Estados Unidos
Como recoge la DPIC en un documento publicado por la Corte Suprema de Estados Unidos en 2020, los principales mecanismos para realizar las ejecuciones han sido “la horca, la electrocución, la cámara de gas, el pelotón de fusilamiento y la inyección letal”, ninguno de ellos declarados inconstitucional por el Tribunal Supremo, como señala el informe (aunque sí lo han hecho algunos tribunales estatales). En concreto, hay cinco métodos de ejecución alternativos autorizados.
La electrocución o silla eléctrica. Hay siete estados (Alabama, Arkansas, Florida, Kentucky, Mississippi, Oklahoma y Tennessee) que contemplan esta forma de ejecución como alternativa, mientras que en Carolina del Sur es el método principal. Desde 1976, 163 presos han sido ejecutados por esta vía. Como define la DPIC, “se da una sacudida de entre 500 y 2000 voltios, que dura unos 30 segundos […]. Los médicos esperan unos segundos a que el cuerpo se enfríe y comprueban si el corazón del preso sigue latiendo. En caso afirmativo, se aplica otra descarga. Este proceso continúa hasta que el preso muere”. El último ejecutado se registró en 2020.
El gas letal o cámara de gas. En los últimos 47 años, se ha ejecutado la pena de muerte con este método a 13 personas en Estados Unidos, el último de ellos, Kenneth Smith. Se introdujo por primera vez en 1924, cuando “se intentó bombear gas cianuro” en la habitación de un condenado. A día de hoy, siete estados lo autorizan como método de ejecución alternativo (Alabama, Mississippi, Oklahoma –los tres autorizan la hipoxia de nitrógeno–, Arizona, California, Missouri y Wyoming –estos últimos no especifican qué tipo de gas se usaría).
- Como contamos en Newtral.es y recoge la DPIC, fue en 1999 la última vez que se aplicó este método para llevar cumplir con la pena de muerte en Estados unidos. Distintos organismos como la ONU o Amnistía Internacional han criticado este método por considerar que puede ser “doloroso”. “Al principio hay indicios extremos de horror, dolor y estrangulamiento”, definió Clifton Duffy, exdirector de la penitenciaría de San Quenton (California).
La horca. Hasta en tres ocasiones desde 1976 se ha llevado a cabo este tipo de ejecución en Estados Unidos para aplicar una pena de muerte. En la actualidad, solo Nuevo Hampshire mantiene este tipo de ejecución (aunque la pena capital está abolida en este estado, no tiene carácter retroactivo, por lo que las personas condenadas a muerte pueden seguir siendo ejecutadas por este método alternativo). “Si la cuerda es demasiado larga, el preso podría ser decapitado, y si es demasiado corta, el estrangulamiento podría durar hasta 45 minutos”, advierte la DPIC. La última vez que se aplicó este método de ejecución fue en 1996.
El pelotón de fusilamiento. Mississippi, Oklahoma, Utah, Idaho y Carolina del Sur son los cinco estados que mantienen este tipo de ejecución como alternativa. Se han registrado tres ocasiones en las que un preso ha sido ejecutado por esta vía, la última de ellas en 2010 por petición del reo Ronnie Gardner, al considerar que la inyección letal había resultado fallida y dolorosa en otros presos, como informó su abogado a la BBC. El preso, atado a una silla por la cintura y la cabeza, se sitúa frente a una pared y queda rodeado de sacos de arena “para absorber la sangre”, como detalla la DPIC. En estos casos, suelen participar cinco tiradores.
Las críticas a los tipos de ejecuciones en Estados Unidos
La ejecución de Kenneth Smith ha suscitado la crítica de organismos internacionales. “La asfixia mediante gas de nitrógeno podría constituir tortura u otro trato o castigo cruel, inhumano o degradante conforme a la normativa internacional de derechos humanos”, denunció Ravina Shamdasani, la portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Por su parte, desde Amnistía Internacional denuncian que, desde 1973, se han contabilizado 191 personas condenadas a muerte que fueron liberadas después de haberse demostrado su inocencia.
- En 2023, se ejecutaron 24 prisioneros condenados a pena de muerte en Estados Unidos. La media de edad de los ejecutados era de 54 años y el tiempo transcurrido de media entre que se dictó la sentencia y se llevó a cabo la ejecución fue de 22 años (siendo 37 años el máximo y 13 el mínimo).
Los datos varían en función del territorio. Texas cuenta con sus propias estadísticas, recogidas en la web del Departamento de Justicia del estado. Allí, la edad media es de 39 años, mientras que el tiempo de espera es de 11,2 años. Entre los más jóvenes están tres hombres de 24 años (ejecutados en 1985, 1986 y 2002).
- Death Penalty Information Center (DPIC)
- Constitución de Michigan
- Corte Suprema de Estados Unidos
- Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos
- Amnistía Internacional
- Departamento de Justicia de Texas
- Time
- BBC
hay un pequeño detalle que no comentais en la noticia...
Y es que en los estados unidos tiene una legislación federal y otra estatal... Es decir que aunque se haya abolido la pena de muerte en el estado, si el reo se la ha condenado a muerte por delito federal, podría ser ejecutado incluso en estados donde esta abolida
Me parece que la decapitación en publico debería ser considerada para exterminar a los asesinos, violadores y secuestradores. Estos miserables seres enfermos, no tienen cura.
Hola Juanito
Tu comentario demuestra inhumanidad.
Ya que no se suprime la pena de muerte al menos debería aplicarse de la manera mas discreta (en el penal) y rápida posible (guillotina). Esta manera fue la que se usó en Francia la última vez en emplearse la guillotina.
En un maravilloso escrito titulado "el reo, el pueblo, y el verdugo" Concepción Arenal señaló los males que conlleva la pena de muerte. Es mala para el reo, es mala para el verdugo y es mala para la sociedad
Salvador