Durante su discurso en el XX Congreso del PP en el que se elegirá a Alberto Núñez Feijóo como su sucesor, Pablo Casado ha anunciado que deja su acta de diputado en el Congreso, puesto que ha mantenido durante más de una década de forma ininterrumpida.
En total, Casado ha ocupado su escaño en cinco legislaturas en las que fue avanzando puestos hasta situarse en el primer sitio de la primera fila de la bancada popular en julio de 2018, cuando sustituyó a Mariano Rajoy al frente del PP. En todo este tiempo, Pablo Casado ha ocupado más de 20 puestos parlamentarios y registrado cerca de 180 iniciativas, como recoge la web del Congreso.
- Punto de partida. Hay que tener en cuenta que hay muchas disposiciones que los partidos suelen presentar como grupo parlamentario y no a título individual de sus diputados. Es el caso de las proposiciones de ley, la vía principal por la que las formaciones registran las leyes que quieren que se aprueben en el país.
Su mayor escaparate: las 57 preguntas en el pleno al Gobierno
En las cinco legislaturas en las que ha ejercido como diputado, Pablo Casado ha efectuado un total de 57 preguntas al Ejecutivo, 56 de ellas como líder de la oposición y dirigidas a Pedro Sánchez.
Se estrenó con este tipo de preguntas en septiembre de 2018, cuando pidió al dirigente socialista que hiciera una valoración de la situación política y económica de España. Se trata de una solicitud que, con algún matiz, ha repetido casi una decena de veces desde su escaño. En marzo de 2021 le pidió su valoración sobre “su actuación después de un año de pandemia”, en abril de 2020, sobre la “situación económica y social” que atravesaba el país en plena crisis del coronavirus y en septiembre de 2019, sobre la “situación del país” en general.
Las estrategias de Pablo Casado con este tipo de preguntas
Preguntas sobre nada para hablar de todo. Como demuestra la hemeroteca, Pablo Casado ha recurrido en numerosas ocasiones a la táctica de registrar preguntas muy ambiguas para, después, poder hablar de todo en su réplica al Gobierno. A la batería de valoraciones, se suman las preguntas que hizo a Sánchez sobre si tenía “un proyecto para España”, si gobernaba “de espaldas al Parlamento” o si los españoles se merecían “el espectáculo” que creía que estaba dando el Gobierno.
Darle la vuelta a los eslóganes del Gobierno. Desde que la pandemia llegó a España, Casado ha empleado los eslóganes impulsados por la Moncloa para inquirir, de forma irónica, a Pedro Sánchez sobre su gestión. Ocurrió con el de “no dejar a nadie atrás”, con el de que la sociedad “saldría más fuerte” de la crisis del coronavirus y con la reiterada frase de que el país había “derrotado al virus”.
Marcaje a los partidos nacionalistas. ERC, EH Bildu o el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont también han sido una constante en las intervenciones de las sesiones de control del líder popular. A veces de forma directa en la propia iniciativa, como la última que registró (“¿Cuánto más está dispuesto a ceder a sus socios independentistas para seguir en La Moncloa?”) y otras sin que se pudiera intuir a tenor de su pregunta. Fue el caso de marzo de 2021, cuando cuestionó a Sánchez por la “situación del desempleo” pero inició su intervención hablando de Puigdemont y de EH Bildu.
- Una pregunta florero. Antes de llegar a la presidencia del PP, Pablo Casado solo había preguntado una vez en la sesión de control. Fue a Luis de Guindos, entonces ministro de Economía de su mismo partido. Su intervención fue un halago constante al Gobierno de Rajoy en la que dio gracias hasta a Dios por que el PP estuviera en La Moncloa.
Su trabajo más silencioso: las 118 preguntas con respuesta escrita y los trabajos en las ponencias
Si bien como jefe de la oposición sus iniciativas se han centrado en las intervenciones en la sesión de control, como diputado raso, Pablo Casado centró su actividad parlamentaria individual en las preguntas por escrito al Gobierno.
Por Ávila. En total, registró 117 preguntas de este tipo en sus primeras tres legislaturas (2011-2019), periodo en el que llegó al Congreso como diputado por Ávila. Estos orígenes tuvieron un enorme peso en su actividad, en tanto que la práctica totalidad de las preguntas van sobre esta provincia o, en su defecto, sobre Castilla y León. Así, inquirió al Ejecutivo de Rajoy sobre el pago a proveedores, las prestaciones de la ley de Dependencia o el agua cedida de los pantanos; y, al de Sánchez, sobre las víctimas de violencia de género con protección policial y el Plan Extraordinario de Inversión en Carreteras. Todo en clave abulense.
Por Madrid. En las elecciones del 28-A, como cabeza de lista del PP, cambió su circunscripción y se presentó por Madrid. Como es habitual entre los líderes de los partidos, dejó a su vez de impulsar iniciativas de este tipo a título propio, habiendo en su registro particular una única cuestión planteada: la petición de información sobre el “establecimiento de un impuesto por el uso de autovías que hasta el momento no estaban sujetas a gravamen en la provincia de Madrid”.
Además, según consta en la web del Congreso, entre 2011 y 2015 Pablo Casado participó en las ponencias de seis leyes, esto es, el grupo que se encarga de elaborar una primera versión de una ley a partir de la propuesta inicial y las enmiendas que quieren incorporar las formaciones.
Su área de especialización: Asuntos Exteriores
Todas esas normas estaban relacionadas con la política internacional, pues en su mayoría eran transposiciones de directivas europeas o leyes sobre la acción exterior del Estado o los tratados internacionales.
Esta especialización la confirman los cargos parlamentarios que ocupó hasta que llegó a la presidencia del PP, posición en la que no se ostentan puestos dentro del grupo parlamentario. Aunque Pablo Casado pasó por no pocas áreas (Constitucional, Justicia, Seguridad Vial…), la que más se repite es la de política exterior.
En la XII Legislatura fue vicepresidente de la Comisión Mixta para la UE, mismo órgano en el que fue vocal en la legislatura anterior. También fue portavoz de la Comisión de Asuntos Exteriores y vocal de la Comisión de Cooperación para el Desarrollo, entre otros.
Su intervención más recordada en el pleno: las distancias que marcó con Vox
Como presidente del PP, Pablo Casado ha protagonizado importantes debates en el Congreso de los Diputados: ha intervenido en la investidura de Sánchez, en los numerosos debates que hubo sobre las prórrogas del estado de alarma durante la pandemia o en el pleno que abordó los Presupuestos de 2021 y 2022, por poner algún ejemplo.
Sin embargo, su intervención más sonada ha sido la de la moción de censura de Vox contra el Gobierno encabezado por Sánchez. El PP llegaba a la cita entre dos aguas, la del Ejecutivo de coalición contra el que había ejercido una oposición sin tregua y la del partido de ultraderecha.
El 22 de octubre de 2020, Casado tenía claro por dónde señalar su camino. “Hasta aquí hemos llegado”, llegó a espetar a Santiago Abascal, con quien aseguró que tenía “muchas diferencias”: “Votaremos no porque decimos no a la ruptura que usted busca. No a la polarización que usted necesita –como Sánchez–. No a esa España a garrotazos en blanco y negro, de trincheras, ira y miedo”. Tras este discurso, el líder del PP se llevó la mayor ovación que se recuerda de su bancada.
Su despedida: la oposición que quiso ejercer
También sonaron aplausos el día de su despedida, fechada para la hemeroteca política el 23 de febrero de 2022. El día anterior había dimitido su secretario general, Teodoro García Egea, y esa misma tarde Pablo Casado tenía una cita con los dirigentes territoriales de su partido para esclarecer cómo iba a ser su salida de Génova 13.
Sin embargo, decidió acudir a su cita de los miércoles con la sesión de control al Gobierno. A diferencia de las 55 veces anteriores, en su intervención no preguntó a Sánchez ni replicó sus argumentos, sino que hizo un alegato por su forma de hacer oposición: “Entiendo la política desde la defensa de los más nobles principios y valores, desde el respeto a los adversarios y la entrega a los compañeros, todo para servir a España y a la causa de la libertad, porque ese es el futuro que merecen nuestros hijos y que debemos construir todos juntos”.
Al terminar, el presidente del Ejecutivo le deseó lo mejor en “lo personal” y, en cuanto acabó su intervención, Pablo Casado abandonó el hemiciclo seguido únicamente por tres de los 87 diputados que, junto con él, componen el grupo parlamentario. Se quedó en su sitio Cuca Gamarra, actual portavoz en la Cámara baja y coordinadora general hasta que el PP elija a su nuevo presidente.