Circula por redes sociales un vídeo de una declaración ante los medios de una agente de policía. Las publicaciones que lo difunden afirman lo siguiente: “La Policía Federal Australiana revela una verdad impactante: lo que se denominó un ataque terrorista antisemita fue en realidad una operación de bandera falsa. Bandas del crimen organizado utilizan el antisemitismo para provocar una reacción específica de las fuerzas del orden”. Pero está sacado de contexto.
- El vídeo se difunde desde el 17 de diciembre de 2025, días después del atentado terrorista en la playa de Bondi, en Sídney (Australia), cuando un padre y su hijo abrieron fuego contra las personas que celebraban la festividad judía de Jánuca.
- Sin embargo, la comparecencia de la agente tuvo lugar el 10 de marzo y describe otra operación policial. Por tanto, el vídeo no tiene ninguna relación con el ataque en la playa de Bondi.
El vídeo original. Tras buscar en Google la declaración en inglés de la agente de policía en el vídeo, hemos encontrado su comparecencia completa.
- Fue publicada por la Policía Federal Australiana el 10 de marzo de 2025.
- La declaración la dio Krissy Barrett, subcomisionada de Antiterrorismo e Investigaciones Especiales.
- En la comparecencia, Barret informa sobre la operación Kissinger, una investigación relacionada con una caravana hallada con explosivos y material antisemita en Dural, Australia, en enero de 2025. Una operación de “falsa bandera“ sin relación al atentado de Bondi.
Operación ‘Kissinger’. Según el relato de la agente, la operación Kissinger fue una investigación llevada a cabo por el Equipo Conjunto Antiterrorista, tras el descubrimiento de una caravana con explosivos y material antisemita en Dural (Sídney) el 19 de enero de 2025.
- La caravana fue localizada inicialmente por un vecino que dio el aviso a la policía, informa The Guardian. Contenía una lista de objetivos judíos y suficientes explosivos para crear una zona de explosión de 40 metros.
- Los investigadores determinaron “casi de inmediato” que el caso no era una amenaza terrorista real, sino un “complot terrorista fabricado, esencialmente una estafa criminal”, informó Barret.
- Llegaron a esta conclusión por “lo fácil que fue localizar la caravana y por lo visibles que eran los explosivos dentro de ella. Además, no había detonador”, explicó la agente.
- Barret apuntó que la caravana “nunca iba a causar un ataque real con víctimas masivas, sino que fue diseñada por criminales que querían generar miedo con fines personales”.
