Novedades BOE | Rebaja de impuestos para los agricultores y ganaderos afectados por la sequía

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Foto: SHUTTERSTOCK.
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El Boletín Oficial del Estado (BOE) de este martes 25 de abril se publica una rebaja de impuestos para los agricultores y ganaderos afectados por la sequía y que se aplicará en el periodo impositivo de 2022 del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas. Se trata de una orden del Ministerio de Hacienda y Función Pública que plantea una reducción general del rendimiento neto del 25%, que puede ser del 30 o el 50% en casos más vulnerables.

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La orden publicada en el BOE, cita un informe del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, que pone de manifiesto que durante 2022 se han producido “circunstancias excepcionales”, haciendo referencia a la sequía y otras condiciones climáticas, que ha afectado al “desarrollo de actividades agrícolas y ganaderas”. En el informe se aconseja reducir Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas a las personas afectadas, para paliar la situación.

De esta forma, en el artículo 1 de esta orden, publicada en el BOE, se aprueba la reducción de los índices de rendimiento neto aplicables en 2022 por las actividades de agricultores y ganaderos afectados, los cuales se localizan en determinadas zonas geográficas, que se detallan en el anexo que acompaña la orden.

La orden, publicada en el BOE, establece una reducción general de los impuestos del 25% para los agricultores y ganaderos, que según detalla el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, podrán aplicarse aproximadamente a cerca de 800.000 de ellos

Apuntan que entre los sectores afectados, los que se encuentren en una situación más vulnerable, se beneficiarán además de reducciones específicas, “que son del 50 % en el caso del olivar, el almendro y la apicultura, y del 30 % para cereales, oleaginosas y leguminosas, castaño, melocotón, nectarina, albaricoque y los demás sectores ganaderos”.

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El ministerio estima que el conjunto de las reducciones contempladas en la orden supone una rebaja de la base imponible del orden de 1.807 millones de euros en los impuestos que pagan los agricultores y ganaderos, afectados por la sequía y otras circunstancias excepcionales.

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