Tras el golpe militar al Gobierno de Níger, sonaron vítores a Rusia y a Vladímir Putin durante una protesta de apoyo a la junta militar frente a la embajada francesa en el país. Como recoge la CNN, los manifestantes apoyaron a gritos al líder ruso y expresaron su indignación por la influencia de Francia en su antigua colonia. Entre la multitud se oían gritos de “viva Putin”, “viva Rusia” y “abajo Francia”.
La imagen es una perfecta metáfora de la situación actual en el Sahel, una zona del norte del continente africano a la que pertenece Níger, especialmente pobre pero rica en recursos naturales como petróleo, gas y materias primas que son explotados por las economías de Occidente de manera sistemática, según los expertos consultados. Como señalan, Rusia se aprovecha del malestar que genera esta relación, percibida por la población como desigual e injusta, y de su inestabilidad política. El golpe militar en Níger se une al polvorín que provocaron los golpes de Estado de Malí en 2020 y 2021, y de Burkina Faso, que sufrió su segunda rebelión militar el año pasado.
Desde entonces, el Grupo Wagner está presente en estos países: ofrecen seguridad y cooperación militar, cultivan una narrativa anticolonialista y actúan como un medio propagandístico prorruso.
La importancia de la crisis en Níger para Rusia
Hasta el golpe militar iniciado el pasado 26 de julio, Níger era el último bastión que le quedaba a Occidente bajo su influencia en el Sahel, según confirma a Newtral.es Simón Suárez, profesor de Historia y Cultura de Rusia de la Universidad de Granada. A su vinculación económica —Níger fue el principal proveedor de uranio de la Unión Europea en 2021, como te contamos en Newtral.es—, se une su colaboración en materia migratoria. El Ejecutivo de Níger ha actuado estrechamente con la Unión Europea en varias iniciativas conjuntas, como indican desde la Comisión Europea, que le considera un “socio de confianza”.
“Hasta ahora el Gobierno de Níger era prooccidental, recibía una gran cantidad de dinero de fondos de desarrollo de la UE, y el país celebraba elecciones hasta cierto punto democráticas”, explica Mariano López de Miguel, doctor en Historia Contemporánea por la Universidad de Murcia. “No obstante, Rusia también actuaba en Níger entrenando al ejército y en material de hardware militar para hacer frente a posibles insurrecciones en el país”, añade el doctor.
De manera paralela, un creciente sentimiento antioccidental se extiende por la región. “La percepción de la población en Níger es que Occidente explota de manera sistemática sus cuantiosos recursos naturales, mientras se mantiene como uno de los países más pobres del mundo”, indica López de Miguel. Una percepción basada en datos oficiales: Níger fue el séptimo país del mundo con mayor producción minera de uranio en 2022, según la Asociación Nuclear Mundial y es el tercer país menos desarrollado del mundo, de acuerdo con el Índice de Desarrollo Humano (IDH) del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) de 2021, superando tan solo a Chad y Sudán del Sur.
“Hay un oprobio hacia lo francés como herencia postcolonial en Níger, y en otros países del Sahel hay heridas abiertas que no se han reparado ya que tampoco ha habido por parte de Francia una intención de compensar económicamente al país por el espolio y su mal hacer”, afirma López de Miguel. De la misma manera se expresa Jesús A. Núñez, codirector del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria (IECAH). “Son los errores de Occidente los que le ofrecen a Rusia la oportunidad de entrar en países donde no tenía prácticamente presencia importante; Moscú se presenta como la alternativa a la colonia”, indica.
Y esta es una baza perfecta para desestabilizar la zona especialmente volátil. “Rusia aprovecha este sentimiento como herramienta de propaganda, apoya los levantamientos militares que expulsan del país a las tropas occidentales y se instala en países ricos en materias primas y estratégicamente localizados en el continente”, añade el doctor de la Universidad de Murcia.
Para el codirector del IECAH, el golpe militar en Níger es una oportunidad para Rusia de ganar una posición que hasta ahora no tiene. “Níger está en la órbita de Occidente y de Francia más concretamente; si sale bien el golpe, marcarán distancias con Occidente, lo que le permitirá a Moscú entrar en el país”.
La presencia de Rusia en África se ejemplifica en la República Centroafricana
Rusia está presente en África a través de relaciones comerciales con numerosos países. También diplomáticas y militares a través de la expansión del Grupo Wagner desde Mozambique y Sudán (2017), seguido de la República Centroafricana (2018), más tarde Libia (2019) y, más recientemente, en Malí. Su presencia se materializa en tareas de entrenamiento (las juntas militares en el poder y los gobiernos le han pedido ayuda para combatir a los yihadistas) y en la explotación de los recursos naturales.
Así lo detalla un documento de la División de Coordinación y Estudios de Seguridad y Defensa del Gobierno de España, pero también funcionarios europeos y estadounidenses. La fortaleza de estos vínculos entre África y Rusia se percibió en la primera votación de condena a la invasión rusa en Ucrania, cuando la mitad de las naciones africanas se abstuvieron.
“Rusia lleva tiempo en África, hizo acto de presencia de manera más notable en el Magreb tras la gran desestabilización que supuso la Primavera Árabe, y de ahí se extendió al resto del continente”, indica López de Miguel, doctor en Historia Contemporánea por la Universidad de Murcia.
Pero son la influencia de Moscú en la República Centroafricana (RCA) y la posterior entrada en Malí de las tropas Wagner las relaciones que ejemplifican la creciente influencia de Rusia en el continente que podría extenderse ahora a Níger.
Como detalla un informe del Instituto Español de Estudios Estratégicos (IEEE), la presencia de Rusia en la RCA no ha dejado de crecer desde 2017, cuando el presidente Faustin-Archange Touadéra pidió ayuda al Kremlin para lograr controlar su territorio, en conflicto desde 2013, como también relata un documento del International Crisis Group (ICG), organismo que trabaja en la prevención de conflictos.
Así, en 2018, Rusia y la RCA firmaron un acuerdo en materia de cooperación militar que permitía el suministro ruso de armas al país africano, así como el envío de instructores para formar y entrenar al personal de seguridad. Esta relación se manifiesta en otros ámbitos además del militar. A nivel político, Touadéra gobierna aconsejado por asesores rusos; a nivel económico y comercial, el Gobierno otorgó a dos empresas rusas licencias de extracción de oro y diamantes.
Moscú en el Sahel: sentimiento antifrancés y riquezas minerales
Tras RCA, Sudán y Libia, Rusia llegó al Sahel de la mano de la junta militar de Malí. Como detalla el informe del IEEE, desde su independencia de Francia en 1960, Malí ha desarrollado una extensa cooperación tanto diplomática como económica, cultural y militar con la potencia soviética. Desde el golpe militar del 2020 se han incrementado los informes que demuestran la presencia de elementos de Wagner en el país.
Como explicó a Newtral.es Benjamin Petrini, investigador del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos, “Rusia se presentó a Malí como la alternativa a los países de Occidente. Ambos firmaron un pacto de seguridad que facilitó la entrada del grupo en el país”. La presencia de este grupo en Malí impulsó la decisión de retirada de militares de los países europeos.
Este patrón es el que siguieron las tropas Wagner de Rusia cuando desembarcaron en Burkina Faso y el que podrían seguir en Níger si el golpe no fracasa. Como contamos en este medio, el golpista Ibrahim Traoré aseguró en una entrevista para la radio francesa que “Rusia es un Estado como cualquier otro; ya estamos colaborando […] Incluso en nuestro ejército utilizamos mucho equipo ruso. Así que ya es un socio para Burkina Faso”.
- Simón Suárez, profesor de Historia y Cultura de Rusia de la Universidad de Granada
- Mariano López de Miguel, doctor en Historia Contemporánea por la Universidad de Murcia
- Jesús A. Núñez, codirector del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria (IECAH)
- Informe de la Comisión Europea sobre las relaciones con Níger en materia de migración
- Asociación Nuclear Mundial
- Índice de Desarrollo Humano (IDH) del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)
- Documento de Defensa sobre la influencia de Rusia en África
- Informe del Instituto Español de Estudios Estratégicos (IEEE)
- Documento del International Crisis Group (ICG)
Y ayuda a la expansión del grupo Wagner la ineficacia de las Normas de Enfrentamiento de las unidades OTAN/ONU, que impide la eficacia contra la lucha fundamentalista islámica. Se decantan por ellos porque SI son eficaces y por tanto la relación coste/eficacia es menor.