Hay más mujeres que hombres que optan por estudiar un doctorado en España, pero a medida que sus carreras investigadoras avanzan, la proporción de ellas se va reduciendo y solo una de cada cuatro ostenta el puesto de catedrática de universidad, según el informe Científicas en Cifras 2023 (págs. 47-50), elaborado por el Ministerio de Ciencia, que emplea datos del curso 2020-2021. En cifras, esta realidad supone que pese a que hubiese un 50,3% de mujeres estudiando un doctorado frente a un 49,7% de hombres, a la hora de alcanzar el cargo de funcionario catedrático de universidad las proporciones se dieron la vuelta y la brecha se amplió, con solo un 25,6% de mujeres frente a un 74,4% de hombres.
Este fenómeno se conoce como ‘efecto tijera’ o ‘efecto pinza’, y se explica por diversos factores, como la precariedad, la inestabilidad, la mayor insatisfacción, el mayor pesimismo respecto a su desarrollo profesional, la conciliación, los estereotipos, los sesgos o las discriminaciones directas o indirectas de género, entre otros problemas estructurales, como explica el informe.
Este gráfico forma parte de la serie #En1Gráfico. Usamos datos y visualización para sintetizar y explicar un tema de actualidad.
(*) El grado D incluye el personal investigador en la etapa predoctoral. El grado C corresponde con el primer puesto doctor de acceso a la universidad. El grado B se refiere, entre otros, a profesor titular, catedrático de escuela, titular de escuela doctor, lector doctor, visitante doctor y contratado doctor de universidades públicas. El grado A corresponde con la figura de funcionario catedrático de universidad.
- Informe Científicas en Cifras 2023