El Consejo Europeo en el ámbito de la energía ha terminado su encuentro extraordinario este viernes en el que preveía adoptar medidas energéticas concretas para hacer frente a los elevados precios de la luz y el gas en Europa. En la reunión se ha decidido, entre otras medidas, imponer una reducción obligatoria del 5% en la demanda de electricidad para todos los Estados miembros, como ha compartido el Consejo de la Unión Europea en un comunicado.
Otra de las propuestas a debatir era la aplicación de un tope a los beneficios extraordinarios de las tecnologías inframarginales, es decir, las que tienen costes más bajos (como las renovables o la nuclear), según adelantó la institución en una nota de prensa. En concreto, este límite se ha acordado en 180 euros por megavatio hora para los generadores de electricidad a través de renovables, nuclear o lignito.
Las medidas energéticas serán de aplicación del 1 de diciembre de 2022 hasta el 31 de diciembre del 2023. Como excepción, los objetivos de reducción de demanda se extenderán hasta el 31 de marzo de 2023 y el tope a los beneficios de las inframarginales, hasta el 30 de junio del próximo año.
El Consejo acepta las propuestas planteadas sobre medidas energéticas en Europa
La institución comunitaria ha acordado las propuestas que había anunciado, entre las que se encontraba la reducción de la demanda eléctrica y un tope a los beneficios de las renovables y de la energía nuclear.
Los países miembros han decidido imponer un descenso del consumo de electricidad en las horas punta de un 5%, mientras que dejan en manos de cada territorio la posibilidad de descender la demanda eléctrica en un 10%. En cuanto al límite establecido para las tecnologías inframarginales, el Consejo Europeo lo sitúa en 180 euros por megavatio hora.
Los Estados serán quienes recauden lo que se obtenga por encima de ese umbral. Esta cuantía se invertirá en medidas de “apoyo y protección para los consumidores finales de electricidad”, según subraya la institución comunitaria.
Como explicó a Newtral.es Ingmar Schlecht, investigador asociado en el Centro de Energía y Medioambiente de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Zúrich (Suiza), “las tecnologías inframarginales no son como el gas, que es la última que entra en el mercado, sino que son la nuclear o el lignito, que están obteniendo importantes beneficios”.
“La propuesta europea básicamente eliminaría los beneficios caídos del cielo de estas formas de energía”, comentó, ya que, según él, lo que haría esta medida energética en Europa es que la Administración es quedarse con la diferencia entre ese límite a los precios de las renovables y el precio del mercado mayorista. De esta forma, como expresa Rosa Mª Regueiro Ferreira, profesora de Economía Aplicada de la Universidad de Santiago de Compostela, se garantiza que las energéticas “no logran ingresos significativos excesivos respecto a su coste”.
Europa aplica una tasa de solidaridad a los combustibles fósiles entre sus medidas energéticas
A las anteriores propuestas, el Consejo Europeo en el ámbito de la energía añade una tasa de solidaridad para el sector de los combustibles fósiles. En particular, afectará a las empresas de petróleo, gas natural, carbón y refinería cuyos beneficios se hayan incrementado más de un 20% desde 2018.
No obstante, la contribución será temporal. De la misma forma que el tope a los beneficios de las inframarginales, la cuantía que se obtenga a través de esta medida energética se destinará a paliar los precios de la factura para los consumidores.
Además de las medidas energéticas mencionadas, el Consejo en el ámbito de la energía determinó que cada Estado miembro en Europa puede establecer un precio para el suministro de electricidad a pequeñas y medianas empresas, pymes, incluso por debajo de su coste, si bien se aplicará “de forma excepcional y temporal”.
No obstante, no se ha anunciado ningún acuerdo relativo a la reforma del mercado eléctrico europeo, que pretendía desligar el precio del gas del coste de la electricidad para que dejara de marcar el precio del resto de energías, aunque la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, aseguró que la configuración actual del mercado “ha dejado de ser justa para los consumidores”.
Ribera consideró que las propuestas europeas “se quedan cortas”
A su llegada al encuentro, la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, manifestó en declaraciones a los medios que el tope a las tecnologías inframarginales en España, que pone un límite a las compañías para evitar que superen el precio de 67 euros en sus contratos, “seguirá siendo aplicable en los términos en los que viene funcionando”, pese que el máximo establecido en el Consejo Europeo en el ámbito de la energía se sitúa por encima, en los 180 euros.
Pese al acuerdo posterior de las medidas energéticas que ya habían sido anunciadas por Europa, la vicepresidenta trasladó que desde el Ejecutivo se encuentran “decepcionados con la no-propuesta” europea acerca de la modificación en el precio de referencia del gas a nivel europeo. “los términos en los que la Comisión está haciendo las propuestas hoy se quedan cortas con respecto a lo que Europa necesita”, manifestó.
- Anuncio sobre el encuentro extraordinario del Consejo Europeo en el ámbito de la energía del 30 de septiembre de 2022
- Comunicado del Consejo de la Unión Europea sobre los acuerdos alcanzados en la reunión extraordinaria
- Nota de prensa de la Comisión Europea sobre una intervención de emergencia en el mercado de la energía
- Ingmar Schlecht, investigador asociado en el Centro de Energía y Medioambiente de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Zúrich (Suiza)
- Declaraciones de la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, antes de entrar a la reunión
- Real Decreto-ley 17/2021, de 14 de septiembre, de medidas urgentes para mitigar el impacto de la escalada de precios del gas natural en los mercados minoristas de gas y electricidad
0 Comentarios