El Consejo de Ministros dio este martes, 6 de julio, el primer paso para que España tenga una ley de startups con la que quiere convertir al país “en uno de los hubs de atracción de inversión y talento en la nueva economía digital”, en palabras de la vicepresidenta segunda del Gobierno, Nadia Calviño.
Siguiente paso. Lo que ha hecho el Gobierno ha sido aprobar el informe sobre este anteproyecto de ley para, a continuación, someter el borrador a audiencia pública. En esta etapa, los sujetos potencialmente afectados por la norma tienen 15 días hábiles para hacer sus aportaciones.
- Aprobación definitiva. Excepto que recurra a la figura del real decreto ley, el Ejecutivo no aprueba leyes por sí solo. Trabaja en la elaboración de un anteproyecto de ley que remite a las Cortes –Congreso y Senado- para que lo tramiten y se incorporen los cambios apoyados por una mayoría de los partidos políticos en las cámaras.
En un titular. Según el borrador del anteproyecto de ley “de fomento del ecosistema de las empresas emergentes”, lo más destacado de la norma serán las rebajas e incentivos fiscales que pretenden aplicar a las startups.
¿Qué se considera una startup?
Esta ley será de aplicación a las empresas que cumplan simultáneamente estos requisitos:
- Ser de nueva creación o tener menos de cinco años, siete en el caso de compañías de biotecnología, energía e industriales.
- No haber surgido de una fusión, escisión o transformación de otra compañía.
- Tener la sede social o el establecimiento permanente en España y que el 60% de la plantilla tenga un contrato en nuestro país.
- Ser una empresa innovadora, entendiendo como tal que “su finalidad sea resolver un problema o mejorar una situación existente mediante el desarrollo de productos, servicios o procesos nuevos o mejorados”.
- La Empresa Nacional de Innovación (ENISA) será la que evalúe anualmente que los solicitantes de los beneficios de esta ley tienen este perfil.
- No distribuir dividendos ni cotizar en un mercado regulado o un sistema multilateral de negociación
- Que los fundadores no hayan creado ya una primera o segunda startup e que se haya beneficiado de lo establecido en esta ley
- Que los fundadores o quienes las dirijan estén al corriente del pago con Hacienda y no hayan sido condenados por una serie de delitos como el blanqueo de capitales, un delito societario o financiación del terrorismo, entre otros.
Fin de los beneficios de esta ley. La startup dejará de percibirlos si se extingue, es adquirida por una empresa no emergente o el volumen del negocio supera los cinco millones de euros anuales. También si realiza unas serie de actividades significativamente dañinas con el medio ambiente o si sus promotores o administradores son condenados por algún tipo delictivo.
¿Qué ventajas fiscales se contemplan para las startups en la ley?
Impuesto de Sociedades e Impuesto sobre la Renta de no residentes. El tipo general pasa del 25% al 15% en el primer ejercicio en el que la base imponible sea positiva y durante un máximo de cuatro años.
Aplazamiento de deudas tributarias. Podrán solicitarlo para el impuesto de sociedades y el gravamen sobre la renta de no residentes en el primer año en que la base imponible sea positiva y el siguiente. Hacienda concederá el aplazamiento, con dispensa de garantías y sin devengo de intereses de demora, por un periodo de doce y seis meses, respectivamente.
Nómadas digitales. El anteproyecto de ley los define como “personas cuyos empleos les permiten trabajar en remoto y cambiar de residencia habitualmente” y crea un régimen tributario específico que relaja las condiciones para que puedan someterse al impuesto sobre la renta de no residentes.
- Nuevo tipo de visado. Se establece el visado para el teletrabajo de carácter internacional que permite entrar y residir en España durante un máximo de un año mientras se trabaja como autónomo o para una empresa en cualquier lugar del mundo.
Stock options. Es el nombre con el que se conoce la entrega de acciones como forma de remuneración. En estos casos, se eleva de los 12.000 a los 45.000 euros el mínimo exento anual.
Menos impuestos por invertir en startups. En la ley de startups se eleva tanto la base máxima de deducción por invertir en empresas emergentes (aumenta de los 60.000 a los 100.000 euros al año) como el tipo de deducción, que pasa del 30% al 40%.
¿Qué otras medidas recoge el anteproyecto de ley?
Hacer más fácil el final. Como reconoce el borrador del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, el “fracaso” de una startup “debe aceptarse como un hecho normal”. Por ello, agiliza los trámites para el cese de actividad, que podrán cumplimentarse por vía electrónica.
No serán necesarios los pagos fraccionados. El texto elimina la obligatoriedad de pagar de forma fraccionada los impuestos de sociedades y de la renta de personas no residentes en los dos años siguientes a aquel en el que la base imponible sea positiva.
Menos datos para los inversores extranjeros. No será obligatorio obtener el número de identificación de extranjeros (NIE) para los inversores no residentes. Bastará con que ellos y sus representantes obtengan los números de identificación fiscal (NIE).
Fuentes:
- Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital: audiencia e información pública del anteproyecto de ley de fomento del ecosistema de empresas emergentes
- La Moncloa: referencias del Consejo de Ministros del 6 de julio de 2021
- Boletín Oficial del Estado: Ley 50/1997, de 27 de noviembre, del Gobierno.