Cuando se le pregunta cómo está, Irene Paredes traga saliva y deja brotar el brillo en los ojos. Deportivamente, su año satisface dos sueños de la infancia, el de ganar una Champions League y levantar un trofeo de campeona del Mundo con la selección española. En lo personal, 2023 dejará mella en su memoria. El fallecimiento de su padre y el movimiento ‘Se acabó’ marcan cuatro meses “difíciles de digerir”, reconoce a Newtral. “Pero me siento muy arropada y poquito a poco miro hacia adelante”, recalca.
En la segunda concentración de la selección española de fútbol después de ganar el Mundial se respira alivio y tranquilidad. Atrás queda la primera lista, en la que las futbolistas fueron obligadas a asistir, pero de la que salieron dos resultados positivos para la clasificación para los Juegos Olímpicos de París 2024. También un éxito aún mayor que el deportivo, el altavoz social y la apertura del diálogo con la Federación para mejorar su estructura. “Si las niñas no se encuentran con todas las trabas que hemos tenido ni esa sensación de no pertenecer al fútbol, será un triunfo más importante que ganar un Mundial”.
«Sentimos que somos referentes sociales»
La reflexión de Irene Paredes (Legazpi, 1991) llega en el momento de asimilar hechos. El mayor triunfo de las mujeres en el fútbol español dio paso muy rápidamente a un mensaje de hartazgo con el movimiento ‘Se acabó’, que respondía a los actos de Luis Rubiales con Jenni Hermoso pero especialmente a un problema de machismo estructural. “Sentimos que somos referentes sociales pero creo que aún no nos damos cuenta, y que lo valoraremos con el tiempo, igual que sucederá con el Mundial. Todavía ayer al reencontrarnos en el vestuario comentábamos que habíamos ganado”.
Para corroborar ese triunfo social, las futbolistas de la selección española han conseguido un convenio de diálogo con la Federación Española de Fútbol (RFEF) y el Consejo Superior de Deportes (CSD). Un documento que la propia Irene Paredes firmó este lunes junto a las otras dos capitanas, Alexia Putellas y Olga Carmona. “Creando la Comisión Mixta nos aseguramos de tener un control de lo que se hace en unas fechas concretas. Nosotras propondremos necesidades y ellos podrán exigirnos cosas. Es un documento que, quedando por escrito, no son solo palabras. Nos compromete a las tres partes a hablar para mejorar”.

Irene Paredes: “No es una pelea que haya acabado, pero puede allanar el camino”
La ‘nueva’ capitana de la selección española de fútbol, Irene Paredes, no necesita un trozo de tela que le señale como líder de un vestuario porque ya lo hace la experiencia. “No voy a ser diferente. A Alexia y a mí se nos ha dado otra vez la capitanía y vamos a intentar hacerlo lo mejor posible”, dice mientras recuerda a ambas ofreciendo el trofeo de campeonas en su primer partido en España, en Córdoba. “A Alexia la quiero mucho, y que levantásemos el trofeo juntas fue algo muy bonito, especialmente después de todo lo que hemos pasado”.
Para Irene Paredes sí es importante el relato, y la forma de transmitirlo. Con tres Mundiales a sus espaldas y mucho trabajo dentro y fuera de España para tener un entorno profesional, la central del FC Barcelona desea que el legado continúe. “Espero que nuestro discurso, también el de Jenni, cale en la gente más joven porque todo se aprende, se transforma y se reproduce. Cuando llegas aquí todo es nuevo, vas tomando conciencia de cosas que quizás no son normales y que hay que cambiar o mejorar”, incide.
Su rol durante las últimas semanas ha ido en esa línea de generar conciencia entre las futbolistas más jóvenes, que desconocen el proceso por el que Irene Pardes, Alexia Putellas o Jenni Hermoso han pasado durante años. “Aprendí de buenas líderes, en el Athletic tuve gente muy buena en la que fijarme y que me ayudó a entender muchas cosas. Lo que decimos llegará a gente que con el tiempo irá madurando y teniendo experiencia para que puedan intervenir si sucede algo similar. Ojalá solo tengan que dedicarse al fútbol y no hablen tanto de lo extradeportivo, pero si les hemos aportado algo estaré súper contenta, estoy segura de que lo harán bien”.
“A todas las mujeres se nos demanda socialmente más”
La normalidad llama a las puertas de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, pero las veteranas siguen señalando un camino difícil. “Hemos vivido momentos muy desagradables, hay un proceso judicial abierto y tenemos compañeras sufriendo. No es una pelea que haya acabado, esto es algo muy largo que puede allanar el camino a las niñas y que puede mejorar nuestra situación, pero como futbolistas y como mujeres en la sociedad estoy segura de que esto no va a acabar aquí porque es un tema social y cultural. Nos ha tocado abrir el camino y sabemos que es importante”.
Para Irene Paredes hay factores que se escapan de lo deportivo a tener en cuenta. “A todas las mujeres se nos demanda más socialmente, en todos los trabajos. Vemos que todavía hay gente que no nos entiende, lo hemos explicado mil veces, solo queremos jugar al fútbol de manera profesional. Nos pasan cosas que a los hombres no nos han pasado. A partir de ahí todo es muy obvio, con cosas más pequeñitas o más grandes, pero solo demandamos mejoras mientras seguimos jugando al fútbol”.

«Siento orgullo de haber conseguido un Mundial en esta situación»
Esta idea, insiste Irene Paredes, incluye la normalidad en el propio vestuario. El regreso de Jenni Hermoso, quien no fue convocada en la primera concentración tras el Mundial, es una línea más en este proceso. “Ha sido muy duro, queremos cerrar esto e iniciar el camino junto a ella. Su vida es jugar al fútbol y es lo que ha querido desde el principio. Viene a sumar por algo obvio, su fútbol, pero también como persona, por su forma de ser y su liderazgo. Jenni es una persona que hace muy bien al vestuario, queremos que vuelva a disfrutar”.
Las campeonas del Mundo miran ahora a las gradas de los campos de fútbol, a las propias gradas de la Ciudad del Fútbol de la Federación, y ven a centenares de niños y niñas que se agolparon para pedir un autógrafo o una foto a sus referentes. Y esta idea, señalan, marca que el camino está abierto. “Hemos notado un cambio en nuestro día a día y siento orgullo de haber conseguido un Mundial en la situación actual”, concluye Irene Paredes.
Tiene toda la razón del mundo,el tratamiento recibido ha sido bochorno, la federación ha sido machista 100/100,que se vayan todos