De roedores a macacos: así se regulan las pruebas de las vacunas contra la COVID-19 en animales

Laboratorio de Egoreichenkov Evgenii | Shutterstock
Tiempo de lectura: 9 min

Mientras avanza la campaña de vacunación contra la COVID-19, distintos laboratorios españoles siguen desarrollando su propio candidato vacunal para hacer frente al virus. 

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Muchos de ellos se encuentran ya en fase de investigación con animales, un paso indispensable para estudiar la calidad del medicamento, la toxicidad o la respuesta inmune que produce. ¿En qué condiciones y bajo qué criterios éticos se realizan estas pruebas in vivo? Te lo explicamos.

¿Para qué sirven las pruebas de las vacunas en animales?

El virólogo Mariano Esteban del Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC) es líder de uno de los proyectos vacunales que va más avanzado en España. Según cuenta a Newtral.es, su equipo ya ha publicado en la revista Journal of Virology los datos que demuestran que su vacuna experimental tiene una eficacia del 100% en ratones humanizados -modificados genéticamente para que expresen el receptor humano ACE2-.

“Hemos podido comprobar que la potencial vacuna protege a estos animales frente a la enfermedad, frente a la letalidad y frente a la replicación del virus”, señala el virólogo, quien añade que estos resultados les acerca un poco más a la investigación en personas.

“El uso de animales en los ensayos de laboratorio de vacunas es muy importante porque ayuda a los científicos a predecir los efectos y la eficacia de una vacuna antes de probarla en humanos”, explica a Newtral.es la bióloga de la Universidad de California Joana Damas, quien investiga sobre el coronavirus.

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“Estas pruebas también permiten estudiar si las vacunas contra la COVID-19 ya comercializadas o en fase de desarrollo funcionan frente a las nuevas variantes del virus. Nosotros queremos ver en qué medida las variantes que circulan en España son sensibles a los anticuerpos que estamos produciendo”, añade Esteban.

¿Por qué se utilizan animales?

En la legislación de la Unión Europea se aclara que el uso de animales en investigación “sigue siendo necesario para proteger la salud humana y animal y el medio ambiente” hasta que no haya otras alternativas que garanticen la seguridad de los fármacos en humanos.

Esteban también recuerda que la investigación en animales “salva vidas” y que se trata de un procedimiento que está “rigurosamente regulado”. “Tenemos que cumplir en todo momento con los protocolos de las autoridades sanitarias y los ensayos en animales deben cumplir con los requisitos de los comités éticos”, destaca.

¿Cómo se regula la investigación en animales?

En la web de la Asociación de Comunicadores de Biotecnología, el genetista Lluís Montoliu explica que, antes de realizar cualquier experimento con animales, “el investigador debe tener la formación y capacitación necesarias, trabajar en un centro de investigación debidamente registrado y autorizado para la experimentación animal y proceder a obtener la autorización requerida antes de abordar el experimento”.

“Para obtener esta autorización en España se requieren tres revisiones por sucesivos comités independientes. El investigador debe primero concebir y describir el proyecto, argumentarlo con sumo detalle, revisando que no haya medios ni métodos alternativos posibles que eviten el uso de animales”, añade Montoliu.

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Si no queda más remedio que investigar las vacunas y fármacos en animales, los laboratorios tienen que seguir todos los procedimientos previstos en normas como la Directiva 2010/63/UE, según informa la Agencia Europea del Medicamento (EMA).

Los controles para que el uso de animales no amenace a las especies

La directiva se basa en el principio de las tres ‘R’: reemplazo, reducción y refinamiento. Es decir, los laboratorios deben sustituir el uso de animales por otros métodos sin ellos siempre que se pueda, reducir todo lo posible el número de animales sin que eso repercuta en la calidad de los resultados y llevar a cabo prácticas que minimicen el estrés o dolor de los ejemplares del estudio.

En esta norma también se recoge que “es necesario garantizar que el uso de animales en procedimientos no suponga una amenaza para la biodiversidad”. 

La directiva se basa en el principio de las tres ‘R’: reemplazo, reducción y refinamiento. Es decir, los laboratorios deben sustituir el uso de animales por otros métodos sin ellos siempre que se pueda, reducir todo lo posible el número de animales sin que eso repercuta en la calidad de los resultados y llevar a cabo prácticas que minimicen el estrés o dolor de los ejemplares del estudio.

Ratones, macacos y hurones en investigación

En España, las autoridades sanitarias nacionales y regionales también vigilan de cerca la investigación de fármacos en fase preclínica y obligan a la comunidad científica a dar cuenta de cada paso que dan.

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Según el último informe publicado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en 2019 las especies que más se emplearon en investigación en España fueron el ratón, la rata y la cobaya.  

Sin embargo, como destaca la Asociación Europea de Investigación Animal (EARA), en ratones no siempre es posible investigar los efectos de la COVID-19, por lo que es necesario realizar más pruebas en otros modelos animales como macacos “para ver si la vacuna puede realmente proteger al individuo de los efectos potencialmente devastadores de una infección”. 

Ratones de laboratorio | Shutterstock

Desde la Universidad de Oxford, que ha desarrollado junto a la farmacéutica AstraZeneca una de las vacunas contra la COVID-19, informan a Newtral.es de que en sus ensayos “utilizaron varias especies animales en los ensayos de seguridad y eficacia como hurones, ratones y macacos Rhesus”.

El uso vigilado de primates en investigación de medicamentos

“Se utilizaron macacos porque, como primates, son parientes cercanos de los humanos. Además, los macacos Rhesus se han utilizado mucho en investigación médica en el pasado, lo que nos permite conocer cómo se asemeja su sistema inmunitario al nuestro.  Actualmente son las especies animales recomendadas para probar las vacunas contra el coronavirus”, señalan desde Oxford.

El uso de animales en experimentos y pruebas científicas en Reino Unido también se regula en virtud de la Ley de Animales en Procedimientos Científicos de 1986, que también sigue los principios de las tres ‘R’, indican.

Según la legislación de la UE, el uso de primates no humanos está vigilado y  “debe permitirse solo en aquellas áreas biomédicas esenciales para el beneficio de los seres humanos para las que aún no se dispone de otros métodos alternativos de sustitución”.

Los ensayos preclínicos para las vacunas contra la COVID-19

“En investigación es éticamente inaceptable utilizar a los seres humanos en ciertos ensayos por lo que hay que recurrir a modelos animales. También hay variables que se pueden controlar en un animal (como la dieta, el alojamiento, el aire limpio, la humedad y la temperatura) que no se podrían controlar en personas”, señalan desde Oxford.

Como ya explicamos en Newtral.es, las potenciales vacunas contra la COVID-19 se prueban en humanos en los ensayos clínicos, divididos en cuatro fases en las que se va incrementando progresivamente el número de participantes. Tres de ellas se desarrollan en ambientes controlados de laboratorio y la última durante las campañas de vacunación de los países.

Para agilizar el desarrollo de una vacuna segura contra la COVID-19, la EMA y la Agencia Reguladora de Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) aclararon al principio de la pandemia que, aunque seguía siendo necesario “obtener datos y caracterizar la respuesta inmunitaria inducida por el candidato a vacuna contra el SARS-CoV-2 en animales”, era posible solapar esta fase con las primeras pruebas de la vacuna en humanos.

Las directrices de la EMA sobre las pruebas en animales

Es decir, la EMA recuerda a Newtral.es que, como todos los medicamentos autorizados en la UE, las vacunas COVID-19 se prueban antes de su comercialización en el laboratorio y en animales.

Pero “no es necesario demostrar la eficacia de la vacuna candidata contra el SARS-CoV-2 en modelos animales antes de proceder a los ensayos clínicos”, aunque sí su seguridad.

Por ejemplo, Esteban aclara que para iniciar la fase I y II de los ensayos clínicos en personas (donde se comprueba inicialmente que el fármaco es seguro y funciona en un número limitado de voluntarios) las agencias reguladoras les piden los datos de las pruebas en vacunas en ratones y hámster.

Sin embargo, para la fase clínica III (donde se verifican de forma robusta los aspectos de seguridad y eficacia del fármaco) “ya te piden un modelo animal superior como son los macacos”.

El desarrollo en tiempo récord de vacunas contra la COVID-19, eficaces y seguras, fue el hito científico más destacado de 2020 para la prestigiosa revista Science.

Un proceso que fue posible gracias al trabajo de la comunidad científica y al aumento de financiación, “pero también a una pequeña, pero significativa, investigación en animales”, recuerda la EARA.

Fuentes:

  • Mariano Esteban, virólogo del Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC).
  • La bióloga de la Universidad de California Joana Damas, una de las autoras del análisis computacional sobre los animales que pueden infectarse de coronavirus, publicado en septiembre en la revista científica PNAS.
  • Declaraciones a Newtral.es desde la Universidad de Oxford.
  • Declaraciones a Newtral.es desde la Agencia Europea de Medicamentos. 

5 Comentarios

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  • Es tortura por lo que pasan esos animales. Más encima se les causa tanto daño para beneficiar a la especie más destructiva del planeta.
    3 "R" ¿Reducir? ¿Reducir el número de animales muertxs? me pregunto yo. Dejemos de pensar que nuestra vida está por sobre otrxs y alejémonos de los aires de superioridad.

  • No existe ningún y no hay excusa para que los científicos y farmacéuticos etc.. tengan maltratado los animales que forman parte de este mundo.
    Esta gente no pagará en esta vida pero existe otra.....
    La culpa también los gobiernos del todo mundo que permiten hacer este tipo de experimentos. Ya según existe otras pruebas celulares para evitar el sufrimiento de los animales. Basta ya.
    Existe listado de marcas comerciales que también permiten maltrato animal para hacerse rico y no les importa nada. Como siempre lo que importa es el ? verdad....!

  • Como siempre!!! Los k menos culpa tienen son los k tienen k
    Pagar por las atrocidades d los
    humanos.

  • Es éticamente inaceptable testear en animales porque nadie quiere morir

    • No es justo que "hombres de ciencia" no tengan ética respecto a la vida y sigan testeando en animales que no pueden defenderse y están a merced de las acciones de los humanos