El asalto al Capitolio del 6 de enero fue la nota final de Donald Trump en la presidencia de Estados Unidos, que le ha conducido a un segundo impeachment, aunque fue también un hecho sin precedentes en el trumpismo como movimiento. Esta tarde (12.00h. en Washington DC), tendrá lugar la investidura de Joe Biden como presidente de Estados Unidos, y hereda de Donald Trump un país dividido y desbordado por la pandemia, con más de 24 millones de contagiados y 400.000 muertos a causa del COVID-19 según los datos de Johns Hopkins.
En una de sus últimas actuaciones como presidente, Donald Trump ha indultado a su exestratega Steve Bannon, imputado por defraudar a donantes para el muro fronterizo. Bannon trabajó varios meses en la Casa Blanca, hasta que fue despedido. La causa por la que está imputado aún está a la espera de juicio, por lo que el indulto de Trump es “preventivo”. En total, Trump ha firmado 73 indultos y ha conmutado la pena de otros 70 condenados, según la Casa Blanca.
El proceso de investidura de Joe Biden no sufrirá alteraciones respecto al protocolo histórico. Jurará el cargo sobre la misma Biblia que ha utilizado con ese fin durante toda su carrera política: un enorme tomo que es propiedad de su familia desde 1893, y que mide casi 13 centímetros de ancho. El presidente electo se apoyó por última vez en esa Biblia para jurar en 2013 su segundo mandato como vicepresidente estadounidense, una ceremonia en la que también le prestó juramento la jueza Sotomayor, que repetirá este 20 de enero.
Las diferencias respecto a anteriores investiduras de presidentes de EE.UU. radican en la seguridad en torno a la COVID-19. La tribuna no estará repleta ni habrá masas en la explanada del National Mall, ante el Capitolio. Para evitar posibles contagios se mantendrá una distancia social de 1,8 metros y la asistencia permitida será muy reducida: este año solo habrá 1.070 invitados cuando en investiduras anteriores la cifra de invitados alcanzaba los 200.000.
Trump, deja la Casa Blanca antes de la investidura de Biden
El presidente saliente de EEUU abandonó la Casa Blanca junto a su esposa, Melania, en el helicóptero presidencial, Marine One, horas antes de la toma de posesión de su sucesor, el demócrata Joe Biden. Trump viajó a la base aérea militar de Andrews (Maryland), a las afueras de Washington DC, desde donde el avión presidencial, Air Force One, le llevará a su club privado de Palm Beach (Florida).
Con este gesto, Trump desoyó la tradición de estar presente en la ceremonia de investidura de su sucesor, que estará condicionada por la seguridad, esta vez no contra la COVID-19. 25.000 militares desplegados en Washington DC, ante los temores de nuevos ataques tras el asalto del día 6, instigados por el trumpismo radical y los seguidores de la teoría de la conspiración QAnon.
A ese respecto, los procesos judiciales contra los asaltantes continúan, y también contra el presunto instigador del asalto, Donald Trump, que verá lejos de la Casa Blanca cómo se desarrolla el impeachment contra su figura, que de ser aprobado sería el primero de la historia, y le podría impediría concurrir en las presidenciales de 2024, como era su intención.
[El segundo ¿y definitivo? ‘impeachment’ contra Trump]
Biden y sus retos
Al margen de recuperar la cohesión en un país polarizado, Joe Biden afronta desde hoy, y ya como presidente, diversos retos en su presidencia. En el análisis de Emilio Doménech se dividen en diez. En clave interna, la bandera progresista, el bloqueo senatorial, la incógnita del Supremo, el desafío activista y las amenazas estatales. En clave global, la COVID-19, la situación de la Sanidad, el cambio climático, la política exterior y la inmigración.
Fuck Trump , he will be prosecuted and he will end his days in prison....