Circulan en las redes sociales publicaciones acompañadas de un vídeo en el que se ve a un hombre herido, con humo en la cara, durante una protesta, y en las que se afirma que el incidente ocurrió en Colombia y está relacionado a un efecto de las vacunas COVID-19. Sin embargo, es falso. El vídeo no fue grabado en Colombia sino en Irak y tampoco guarda relación con las vacunas debido a que ocurrió en octubre de 2019, meses antes de que la Organización Mundial de la Salud declarara la COVID-19 como pandemia, el 11 de marzo de 2020.
“Parece que algo dentro de sus cabezas hizo un cortocircuito, quizás causado por microondas o radiación electromagnética”, dice la descripción que se comparte con el vídeo desde diciembre de 2021 en Facebook, Twitter y canales de Telegram. También menciona que las personas que “se han puesto la ‘vacuna’ de la muerte, están sujetas a catástrofes internas causadas por la interacción de ondas electromagnéticas y metales pesados, grafeno y otros”.
El vídeo fue grabado en Irak y no en Colombia
Las publicaciones ubican el vídeo, falsamente, en Colombia. Pero realmente el incidente ocurrió en Irak, en octubre de 2019, durante protestas que fueron reprimidas por agentes policiales. Las expresiones que se escuchan en el vídeo no se hacen en español.
El analista político iraquí Sajad Jiyad publicó la secuencia en su cuenta de Twitter el 26 de octubre de 2019 para denunciar a los agentes policiales por disparar gas lacrimógeno directamente contra los manifestantes. “Cuántas veces hemos visto tiros a la cabeza como este. Esto no es accidental, es sistemático”, escribió en inglés.
Una búsqueda inversa del vídeo nos llevó a una publicación en Twitter del medio de comunicación Baghdad Post, cuya página ya no está disponible en la web. Según el tuit, las imágenes muestran el momento en que un recipiente con gas lacrimógeno quema el ojo de un manifestante.
El vídeo del hombre con humo en el rostro fue documentado por Amnistía Internacional
Amnistía Internacional documentó la represión en Irak en un informe en el que Lynn Maalouf, directora de investigación para Oriente Medio, menciona que las fuerzas de seguridad iraquíes lanzaron granadas de tipo militar contra manifestantes en Bagdad, “aparentemente apuntando a sus cabezas o cuerpos a quemarropa”.
“Esto ha tenido resultados devastadores, en múltiples casos perforando los cráneos de las víctimas, resultando en horribles heridas y muerte después de que las granadas se incrustaran dentro de sus cabezas”, señala Maalouf, experta de Amnistía Internacional.
En el informe se recogen testimonios de las víctimas de la represión que describen, por ejemplo, cómo un hombre “al que se le incrustó una de las granadas en el cráneo cayó instantáneamente al suelo y salió humo de su cabeza”. Las protestas ocurridas en el otoño de 2019 dejaron al menos 600 muertos y 21.000 heridos, según la agencia France 24.
El vídeo del hombre con humo en el rostro fue usado en un reporte de NBC News
Según Amnistía Internacional, un video filmado el 25 o el 26 de octubre muestra a un grupo de manifestantes caminando sobre el puente Jimhouriya en dirección a la Zona Verde de la ciudad. “De repente, un manifestante masculino cae al suelo agarrándose la cabeza. Se ven columnas de humo o gas que salen de la herida”, explica.
Parte de la secuencia que circula por las redes sociales fue usada en un reportaje de la cadena estadounidense NBC News, publicado el 18 de noviembre de 2019, donde se informa de que las protestas en Irak fueron sangrientas. “Los vídeos que se comparten en las redes sociales se han vuelto cada vez más horripilantes”, dice.
El vídeo fue verificado por AFP Factual y Bolivia Verifica, miembros de la red internacional de verificadores IFCN, al igual que Newtral.es.
Las vacunas no contienen grafeno
De acuerdo con las publicaciones que circulan en las redes sociales, las vacunas contra la COVID-19 están “sujetas a catástrofes internas causadas por la interacción de ondas electromagnéticas y metales pesados, grafeno y otros”, sin embargo eso es falso, como lo hemos verificado en Newtral.es.
En este artículo desmentimos que las vacunas contra la COVID-19 causen “trombosis en el cerebro por el grafeno”. Tampoco es cierto que el grafeno esté en las vacunas autorizadas.
Al respecto, el presidente de la Asociación Española de Vacunología, Amós García, señaló a Newtral.es que “no aparece referenciado que las vacunas tengan grafeno”.