Nos habéis preguntado a través de nuestro servicio de verificación de WhatsApp por unas declaraciones de Robert F. Kennedy Jr., secretario de Salud de Estados Unidos, en las que afirma que en los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) ocultaron un estudio de 1999 que revelaba un aumento del 1.135% en el riesgo de autismo por la vacuna de la hepatitis. Sin embargo, esto es falso.
- El político se refiere a la fase preliminar de un estudio publicado en 2003 que, tras llevar a cabo la segunda fase del mismo, no encontró ninguna relación significativa entre las vacunas contra la hepatitis y el autismo. Asimismo, el documento inicial no se “mantuvo en secreto” y tampoco menciona un aumento del 1.135%.
Robert F. Kennedy Jr. (RFK Jr.), sobrino del expresidente John Fitzgerald Kennedy, ha difundido varios bulos y desinformaciones vinculando las vacunas y el autismo. En esta ocasión, el secretario de Salud hizo las declaraciones en una entrevista con Tucker Carlson, presentador estadounidense de extrema derecha.
- “Los CDC hicieron un estudio en 1999. Trajeron a un equipo de científicos bajo la dirección de un investigador belga llamado Thomas Verstraeten y analizaron los datos. Observaron a los niños que habían recibido la vacuna contra la hepatitis en los primeros 30 días de vida y los compararon con los niños que habían recibido la vacuna más tarde o no la habían recibido en absoluto. Finalmente, encontraron un 1.135% de riesgo elevado de autismo entre los niños vacunados”, afirmó Kennedy.
El documento al que se refiere RFK Jr. existe, pero era una fase preliminar y no demuestra que las vacunas contra la hepatitis B aumenten en un 1.135% el riesgo de autismo
En 1999, un resumen de los CDC presentado por varios doctores, liderados por el belga Thomas Verstraeten, planteaba la existencia de un “mayor riesgo de trastornos neurológicos del desarrollo tras una exposición elevada a vacunas que contienen timerosal en el primer mes de vida”.
- A diferencia de lo que afirmó en su entrevista con Carlson el secretario de Salud, este resumen no se refería específicamente a las vacunas contra la hepatitis y no menciona que el riesgo de autismo aumente un 1.135%.
Es un resumen, no una investigación. Los resúmenes (abstract en inglés), en ocasiones, funcionan como una fase preliminar a una investigación en profundidad y solo ofrecen un primer vistazo a los datos. En este caso, presenta únicamente el contexto, los métodos utilizados, los resultados y la conclusión.
- En 2004 Verstraeten afirmó en una nota explicativa que “los resultados de la primera fase eran demasiado propensos a posibles sesgos como para servir de base a importantes decisiones de salud pública”.
Sus autores pusieron en duda su propio resumen. Siguiendo el proceso de investigación, en 2003 los doctores publicaron la segunda fase y las conclusiones del estudio en la revista científica Pediatrics, de la Academia Estadounidense de Pediatría. Este no encontró “asociaciones significativas consistentes” entre la exposición al timerosal en vacunas y el autismo.
No era secreto. En el vídeo viral, RFK Jr. afirma que los CDC habían “mantenido en secreto” el estudio sobre el supuesto vínculo entre las vacunas contra la hepatitis B y el riesgo de autismo y que fue posteriormente encubierto, pero esto tampoco es cierto.
- El resumen original fue presentado en la Conferencia Anual del Servicio de Inteligencia Epidemiológica.
- Verstraeten afirmó en su nota explicativa del 2004 que el estudio se planeó desde el principio para ser realizado en dos fases. Además, negó que los CDC diseñaran la segunda fase para contradecir la primera.
En los años posteriores a la publicación de la primera fase surgieron acusaciones de mala conducta en torno a la investigación por parte de Verstraeten y los CDC.
- No obstante, en 2007 el Comité de Salud del Senado de Estados Unidos concluyó que “las acusaciones de que los investigadores sentían que estaban influenciados por conflictos de intereses, de que los CDC interferían en los estudios y de que los organismos de salud pública encubrían las pruebas no podían demostrarse.”
Tiomersal en vacunas. El tiomersal es un compuesto que contiene mercurio y es utilizado en algunas vacunas como conservante. Los datos de diversos estudios muestran que los efectos secundarios más frecuentes del timerosal son reacciones leves, como enrojecimiento, y debido a las bajas dosis de timerosal en las vacunas, no encuentran pruebas de daños causados por su dosis.
- En Estados Unidos, según los CDC, el tiomersal se eliminó como medida preventiva de las vacunas infantiles en 2001.
- En España, el Ministerio de Sanidad afirma que la mayoría de las vacunas autorizadas actualmente para la comercialización no contienen tiomersal y destaca que “en aquellos países que se ha eliminado de las vacunas infantiles, la frecuencia de autismo ha seguido aumentando, contrariamente a lo que se esperaría si el tiomersal causara autismo”.