A finales de 2020, cuando comenzaron a aparecer las diferentes vacunas contra la COVID-19 tras casi un año de pandemia, se inició otra carrera: ver cuál de ellas tenía una mayor eficacia en los laboratorios. Para observar la validez de estas vacunas se realizan ensayos clínicos que determinan su eficacia, medida que compara las tasas de enfermedad entre personas vacunadas y las no vacunadas.
Para calcularlo, se miden los casos de infectados entre personas que han recibido la vacuna y los que han tomado un placebo.
[Dos noticias buenas y otra regular de la vacuna de Janssen]
Este término difiere de otro que también se utiliza mucho en este contexto: la efectividad. La principal diferencia entre ambos es que la eficacia se mide en “ensayos clínicos controlados”, mientras que la efectividad se calcula cuando la vacuna ha sido ya probada en la población.
Obteniendo la eficacia o la efectividad de las vacunas es posible medir la proporción de las personas vacunadas que estarían protegidas por la vacuna.
Los estudios realizados en laboratorios avalan la eficacia de las vacunas contra la COVID-19. Pero todavía es pronto para saber cuál es su efectividad en la población general. En cambio, sí es posible conocer los resultados de las vacunas que se encuentran en el calendario de vacunación.
Los datos facilitados a Newtral.es por el Centro Nacional de Epidemiología (CNE) del Instituto de Salud Carlos III muestran que la mayor parte de las vacunas del calendario tienen una efectividad superior al 90%.
A lo largo del tiempo y gracias al calendario de vacunación, se ha logrado reducir la incidencia de las enfermedades en la población. Las vacunas facilitan la protección creando la llamada inmunidad de grupo.
Muchas veces, como explican desde el CNE, la edad recomendada para la vacunación no pretende únicamente la protección del individuo, sino también la disminución de la transmisión a grupos “más vulnerables”.
Aún así, hay algunas vacunas que cuentan con un porcentaje menor de efectividad, como es el caso de la gripe. Teniendo en cuenta que las cepas varían cada año la efectividad cambia. Además, como indican desde el Ministerio de Sanidad, influye la edad y el estado de salud de la persona vacunada.
A pesar de la variación anual, según diferentes estudios, la efectividad de la vacuna contra la gripe es del 69% en la población infantil entre 6 meses y 8 años, del 52-70% entre adultos de 50 a 64 años y del 38-46% en personas mayores de 65 años siempre que los antígenos de la vacuna se correspondan con los que se encuentran en la cepa en circulación.
Estos resultados muestran una diferencia considerable con el caso de la difteria o la rubéola, cuya efectividad es superior al 95% y cuya protección es duradera.
A tener en cuenta
Como explican desde el CNE, ninguna vacuna es “100% eficaz” ya que un “pequeño porcentaje de las personas no están protegidas después de la vacunación y para otras la protección puede disminuir con el tiempo”.
Además, otras personas no pueden recibir algunas tipologías de vacunas debido a su sistema inmunológico. Hay que tener en cuenta que la efectividad de las vacunas depende también de la temporada o de las variantes de las cepas, como es el caso de la gripe, que varía cada año.
Por ello, hay que medir estos datos teniendo en cuenta estas anotaciones, sobre todo de aquellas vacunas incorporadas recientemente en el calendario de vacunación.
Eficacia en las vacunas contra la COVID-19
En el caso de las vacunas contra la COVID-19 es posible medir la eficacia en los ensayos clínicos, pero todavía es pronto para tener datos sobre la efectividad. Sobre la vacuna de Janssen, una de las últimas aprobadas, la Agencia Europea del Medicamento (EMA) indica que, como resultado de los ensayos clínicos, se observó una eficacia del 67%.
Este dato se obtiene tras la aparición de 116 casos en 19.630 personas, en comparación con los 348 de los 19.691 que habían recibido el placebo.
En el caso de Pfizer/BioNTech, los estudios que se realizaron mostraron una eficacia del 95%. En total, se detectaron ocho casos de 18.198 con síntomas entre los vacunados y 162 en los 18.325 del grupo placebo, como indica la agencia española del medicamento.
Fuentes:
- Organización Mundial de la Salud
- Centro Nacional de Epidemiología (CNE) del Instituto de Salud Carlos III
- Ministerio de Sanidad
- Agencia Europea del Medicamento (EMA)
Las líneas del gráfico no guardan mucha proporción con los datos ¿no?
Para que sirve una vacuna que tienes casi un 40 por ciento de posibilidades de contagiarte sobre todo existiendo vacunas que te protejan en un 95 por ciento
Yo entiendo que es una cuestión económica de sanidad
Yo desde luego digan lo que digan no me la pondré
Supongo que se refiere a la de Janssen que según dice el artículo tiene una eficacia de casi un 70% (no casi un 60%).
Pues usted hará lo que le dé la gana, fantástico. Pero saldrá de esta situación de pandemia gracias a la gente que sí que se vacunará por todos los demás.
Usted siga aportando desde su sillón, majete.
Las líneas del gráfico no guardan mucha proporción con los datos ¿no?