La teoría racista del Gran Reemplazo ha vuelto a los titulares de todo el mundo con el tiroteo en un supermercado de Buffalo, Nueva York. Antes, las mismas dos palabras acompañaron las noticias de otras ciudades estadounidenses como El Paso, Pittsburgh o Poway. También en Christchurch, Nueva Zelanda.
En todas esas localidades, un hombre blanco con un arma de fuego mató a una o varias personas por pura motivación racista. Los asesinos de esas masacres tenían en común el haber mencionado el Gran Reemplazo como parte del marco ideológico del que partieron antes de lanzar sus ataques.
En resumen, esta teoría defiende que una élite de judíos está orquestando un plan para sustituir a la población nativa estadounidense por inmigrantes. Pero no los nativos americanos precolombinos, sino los blancos que llegaron después.
Pese a la simpleza conspiranoica, la teoría del Gran Reemplazo en realidad está llena de aristas. Sus seguidores se apoyan en estadísticas que van desde cambios demográficos recientes a cifras de criminalidad y de fertilidad. Todo con el propósito de demostrar que hay una conspiración para sustituir a los blancos por inmigrantes que luego votan lo que las élites judías les dicen que voten.
Pero la problemática no es ya que el Gran Reemplazo siga estando presente en el imaginario de asesinos como el de Buffalo, sino que su marco ideológico esté tan globalizado. O lo que es peor, que en Estados Unidos forme parte rutinaria de la política y los medios de comunicación.
Pirámide hacia los vertederos de internet
Antes de llegar al mainstream, la teoría del Gran Reemplazo empezó a cultivarse en los bajos fondos de la red donde habitó el tirador de Buffalo. Para entender mejor el contexto, cabe imaginarse internet como una pirámide invertida. La mayoría de usuarios conviven en la superficie más amplia:
- Facebook, Twitter o Twitch estarían en esa plaza pública más multitudinaria, supervisada por algunas de las compañías más poderosas del planeta. La moderación que las empresas ejercen de sus plataformas dificulta la difusión de estas teorías.
- La red de foros Reddit estaría en un segundo nivel. Antiguamente, era más Viejo Oeste, pero su crecimiento exponencial y las controversias de movimientos que fermentaron allí terminaron cambiando el panorama. Allí crecieron fenómenos antifeministas como Gamergate y comunidades políticas extremistas como la altright y TheDonald (seguidores acérrimos e irónicos de Donald Trump).
- Discord sería el nivel intermedio (y el más novedoso, pues es la red de creación más reciente). La plataforma de chats permite crear servidores públicos y privados. El tirador de Buffalo lo aprovechó para crear un diario privado en el que fue recapitulando sus preparativos —y divagando sobre el Gran Reemplazo—.
- El foro 4chan ocuparía el siguiente estrato. En el tablón de imágenes, sus usuarios publican de forma anónima y sus publicaciones se borran a los pocos días. 4chan ha sido el campo de cultivo para campañas de acoso y teorías de la conspiración tóxicas como Pizzagate y QAnon.
- El foro 8chan, o 8kun, ocuparía el penúltimo nivel. La publicación anónima y el bajísimo nivel de moderación han convertido a 8kun en el destino para todos aquellos descontentos con los niveles superiores de la pirámide. Muchas veces, por los excesos de moderación.
- La dark web sería el último estrato, una parte de internet que requiere software o autorización específica para acceder a sus dominios.
Gran Reemplazo y Buffalo: una historia conectada
La pirámide es importante para entender por qué el tirador de Buffalo mencionó el Gran Reemplazo en el manifiesto del que se han hecho eco los medios de comunicación estos días.
- El tirador de Buffalo navegaba habitualmente por foros de Reddit. En mayo de 2020, en plena pandemia en Estados Unidos, se introdujo en las cavernas de 4chan.
- En 4chan, el tirador dice que se radicalizó con los memes y las estadísticas sobre temas raciales y migratorios que empezó a ver en la plataforma. Llegado un punto, dio con el vídeo de la masacre de 51 personas en Christchurch, Nueva Zelanda, y con el manifiesto de aquel asesino.
- El tirador de Buffalo recapituló todo su proceso de radicalización en su servidor privado de Discord, donde habló del Gran Reemplazo o de lo que aprendió del tirador de Christchurch y de otros como él. Además, hizo un seguimiento de todos los pasos con los que se preparó para ir al supermercado Tops en el que acabaría matando a 10 personas.
- Ese tiroteo lo retransmitió en la plataforma Twitch y el vídeo de esa retransmisión fue luego propagado por montones de otras plataformas pese a que el directo solo lo vieron una veintena de personas.
- El vídeo, o extractos del vídeo, acabaron publicados en redes como Facebook, Twitter, Reddit e Instagram, donde las compañías están intentando hacer lo posible para frenar su alcance.
La base de votantes de 4chan
Estos días, los medios estadounidenses han estado poniendo el foco en los voceros de la derecha que han alimentado la teoría del Gran Reemplazo mencionada por el tirador de Buffalo. Pero es un error pensar en ellos como el origen (o acaso la instancia más importante) de estas teorías.
Volviendo a la pirámide, los usuarios que hay en los estratos más bajos, o no interactúan en los más altos (como Facebook o Twitter) o simplemente carecen de la influencia como para hacer ruido en esos niveles superiores (como un presentador de Fox News o un senador republicano).
- Es decir, que el poder de los usuarios de 4chan o 8kun no va determinado por el número de seguidores o suscriptores que tienen como sí pasa en Twitter o Facebook.
- Por tanto, la popularidad va atada a las interacciones que tenga una publicación en 4chan o 8kun. O también, a la organización concertada de muchos usuarios para montar una campaña en alguno de los otros estratos de la pirámide.
- Un ejemplo sería cómo miles de usuarios que concretan en 4chan una campaña de acoso contra una mujer en Twitter, que es lo que pasó en Gamergate.
Esa clase de movimientos mejor organizados ha ido derivando en fenómenos mediáticos muy poderosos:
- El movimiento antifeminista Gamergate fue uno de ellos. A raíz de esa campaña, el antagonismo contra las mujeres sigue muy presente dentro de una parte de la comunidad gamer.
- La teoría de la conspiración Pizzagate terminó dando germen a una de las teorías de la conspiración más disparatadas (pero también influyentes) del momento, QAnon.
- Y Trump contó en las presidenciales de 2016 con el apoyo de los creadores de memes de foros como Reddit y 4chan que cimentaron su relevancia cultural en la red.
Un meme, un voto
La capacidad de crear memes es desestimada con mucha facilidad en el entorno mediático mainstream, pero figuras como Trump o Elon Musk llevan años demostrando el poder político y social que tienen. Y en el caso del tirador de Buffalo y la teoría del Gran Reemplazo también es importante.
- Desde hace años, los memes irónicos son el arma y escudo de la extrema derecha online. Arma en forma de mensajes deplorables contra minorías discriminadas y escudo porque, al ser un meme, uno siempre puede defenderse de acusaciones al son de: «No, en realidad era solo una broma».
- Los memes permiten además crear un código y una simbología que al final solo reconocen quienes conviven el suficiente tiempo en una comunidad.
- Y en lugares como 4chan y 8kun, estar versado en su mitología te da un pase VIP casi automático. Si te ríes con ellos, eres uno de ellos.
Al final, foros como 4chan conjugan el entretenimiento que aportan los memes con el disfrute de jugar a la incorrección política y el interés de consumir tanta nueva información.
- Al ser plataformas anónimas, 4chan permite que sus usuarios digan todas esas cosas que no se pueden decir más arriba en la pirámide.
- Y al decir tantas incorrecciones discriminatorias, es más fácil introducir luego estadísticas manipuladas, datos fuera de contexto y argumentos memeizados con los que la audiencia va poco a poco radicalizándose.
«Ahora tienes este nuevo mundo irónico de asesinos. Es un mundo diferente —simplemente, un flujo constante de malas estadísticas, malos memes, malas mentiras sobre la gente a la que quieren odiar—. Ese es el camino de 4chan: dices cosas que son indignantes y que no necesariamente crees. Y con el paso del tiempo, acabas creyendo en ellas».
J.J. MacNab, profesor del programa sobre extremismo en la Universidad George Washington.
Destino: ‘Fox News’
Cuando Steve Bannon dirigía el portal de extrema derecha Breitbart, fichó al polemista Milo Yiannopoulos para dirigir la sección de videojuegos. Yiannopoulos se centró en asuntos culturales como el Gamergate, llevando temas candentes en comunidades como 4chan a una audiencia generalista.
«Me di cuenta de que Milo podía conectar con estos niños de inmediato. Puedes activar a un ejército. Vienen a través de Gamergate o lo que sea y entonces se activan en política y en Trump».
Steve Bannon, en entrevista con Joshua Green.
El proceso que describe Bannon no es muy diferente del que hemos ido viendo a lo largo de los últimos años por parte de la derecha pro-Trump. Han cogido temas culturales capaces de mover mucha conversación en redes sociales y la han empaquetado en mensaje político de fuego y furia.
Es de ahí que lleguemos a un mundo en el que el partido republicano sea abrumadoramente más antivacunas, más pro-QAnon y más pro-Gran Reemplazo, algo que se ha hecho evidente tras el tiroteo de Buffalo.
- El presentador de Fox News Tucker Carlson, el más visto de las cadenas de cable de noticias en Estados Unidos, ha mencionado la teoría del Gran Reemplazo en más de 400 ocasiones en los últimos años, según un análisis de The New York Times.
- Y figuras mediáticas de la derecha Laura Ingraham, Bill O’Reilly, Anne Coulter o Jeanine Pirro también lo han hecho en sus programas de la cadena de noticias conservadora desde hace años.
El Gran Reemplazo: ni buffalo ni Fox News
La estrategia recuerda a lo que hicieron Bannon y Yiannopoulos, hacer sonar el silbato de perro para que todos esos potenciales votantes sepan reconocer los códigos con los que les hablan. Porque si están versados en los mismos memes, los mensajes calan más hondo. Y se nota:
- Uno de cada tres estadounidenses cree que existe una iniciativa organizada para «reemplazar a estadounidenses nativos con inmigrantes para ganancias electorales», según encuesta de Associated Press.
Al final, no es que el tirador de Buffalo haya aprendido nada de Fox News, ni viceversa. Son discursos que se retroalimentan. Unos quieren fama y memes, y otros quieren audiencia y votos. Y mientras tanto, ambos frentes siguen alimentando el pecado que arrastra Estados Unidos desde el comienzo de su historia: el supremacismo blanco.