La guerra ha partido la redacción de los verificadores ucranianos de StopFake: algunos han tenido que abandonar el país, otros han decidido quedarse y un tercer grupo -particularmente entre los hombres- ha tenido que poner en pausa sus tareas como fact-checkers y unirse por ley a la defensa territorial. Por motivos de seguridad, Alina Mosendz-Manser, editora de StopFake en español, no puede brindar muchos más detalles en su entrevista con Newtral.es en el marco del Día Internacional del Fact-Checking que tiene lugar este 2 de abril.
“Nosotros trabajamos contra la desinformación rusa. Eso nos pone en bastante peligro”, explica la periodista ucraniana en un fluido español. Ella se encuentra dentro del grupo que trabaja desde fuera de Ucrania. Lo está haciendo en Suiza, adonde viajó por motivos personales algunos meses antes de que comenzara la invasión rusa. Sin embargo, su hogar sigue siendo Kiev, la ciudad en la que nació y de la que pudo sacar a tiempo a sus padres. “No sé qué está pasando con mi casa ahora allí. Que yo sepa, aún queda casa”, dice.
StopFake y VoxUkraine, los fact-checkers ucranianos
StopFake es una de las dos organizaciones ucranianas que forman parte de la International Fact-Checking Network (IFCN), una red global de verificadores que integra también Newtral.es. La otra es VoxUkraine. Creada en marzo de 2014 por graduados y estudiantes de periodismo de la Universidad Nacional de Kiev-Academia Mohyla, StopFake lleva años verificando la desinformación proveniente del Kremlin. Inició sus actividades en momentos en que se producía la anexión de Crimea y estallaba la guerra en el Dombás, en el este de Ucrania, y desde entonces “no ha pasado ni un día sin una noticia falsa desde Rusia”, según Mosendz-Manser.
StopFake ofrece contenidos en doce idiomas, entre ellos ruso, inglés y español, además de ucraniano. Mosendz-Manser traduce al español las verificaciones que realizan sus colegas y también produce sus propios contenidos para el mundo hispano-hablante. No solo estudió periodismo en la universidad en Kiev, sino también español, y vivió durante algún tiempo en Argentina (en San Miguel del Monte, provincia de Buenos Aires).
Cómo desmentir bulos en plena guerra
La invasión rusa en Ucrania ha provocado una avalancha de bulos en las redes sociales, como hemos contado en Newtral.es, lo que ha supuesto un gran desafío para los fact-checkers de todo el mundo. Sin embargo, para los verificadores ucranianos la complejidad es doble.
“Es un poco más difícil cuando tu propio país está en guerra porque tienes que estar más alerta. Hay cosas que no puedes publicar por cuestiones de seguridad, para no revelar algún tipo de información que pueda ponernos en riesgo”, explica Mosendz-Manser a Newtral.es. “Pero aun así, buscamos siempre acudir a las fuentes oficiales y a testigos presenciales que puedan confirmar las cosas desde el lugar de los hechos. También nos basamos en los datos ofrecidos por las organizaciones internacionales”, indica.
Según explica la editora de StopFake, en su organización buscan mantener la máxima rigurosidad a pesar de las circunstancias. “Si no encontramos suficientes evidencias para desmentir algo, no lo hacemos. Necesitamos confirmar los datos”, señala. Una tarea que ahora “es más difícil” debido a las complicaciones que supone obtener información confiable durante una guerra.
Las narrativas más habituales del Kremlin
Mosendz-Manser explica que en su organización tienen una larga experiencia lidiando con las narrativas y la propaganda del Kremlin. “Hemos visto durante estos ocho años todas las campañas de desinformación contra Ucrania por parte del Kremlin. No solo inventan noticias falsas, sino que promocionan temas y narrativas precisas. Y a estos temas precisos les agregan más falacias”, analiza.
Entre estas narrativas difundidas por Rusia desde hace años, Mosendz-Manser menciona el supuesto apoyo al nazismo en Ucrania o la idea de que su país es un Estado fallido. “Lo adaptaban en cada idioma y en cada país. En España se utilizó la figura del futbolista Roman Zozulia para intentar vincular a Ucrania con el nazismo”, asegura. Zozulia, un futbolista ucraniano que juega en España desde hace años y ha pasado por varios clubes, ha sido señalado por sus presuntos vínculos con grupos nacionalistas o extremistas ucranianos, pero el jugador ha negado las acusaciones.
Entre las narrativas que reseña Mosendz-Manser, también se encuentra la idea difundida desde Rusia de que “Ucrania estaba cometiendo un genocidio en el Dombás” o de que “Ucrania se preparaba para atacar Crimea, la propia Rusia o incluso Bielorrusia”.
Ya durante la guerra, explica la verificadora, se difundieron desinformaciones sobre el propio desarrollo del conflicto. Por ejemplo, “que Járkov u otras ciudades se estaban rindiendo”, o que el presidente Volodímir Zelenski “había pedido a la población bajar las armas”.
“Son muchos bulos, decenas a diario”, afirma la verificadora ucraniana. “Desde hace tiempo, he aprendido una cosa sobre la propaganda rusa. Cuando veo que están culpando a Ucrania, hay que pensar que pueden llevar a cabo alguna acción en los próximos días. Culpan con anticipación para realizar algo que tienen planificado», analiza sobre la lógica de desinformación del Kremlin.
La organización sufre ciberataques permanentes desde Rusia
Entre sus diferentes servicios, StopFake cuenta también con verificaciones en ruso. Estos contenidos no solo tienen como público a la población ruso-parlante en Ucrania, sino también a los propios rusos, según Mosendz-Manser. Si bien la web de StopFake está bloqueada en Rusia desde hace tiempo, la periodista asegura que algunos lectores en ese país acceden a la página a través de VPN que conectan desde otros países.
La organización ucraniana de verificación, según indica Mosendz-Manser a Newtral.es, es objetivo permanente de ciberataques desde Rusia, desde antes de la invasión iniciada el febrero pasado. “Nuestra página es atacada a diario muchísimas veces. Por suerte nuestro equipo de protección lo hace muy bien y estamos repeliendo muchos ataques”, señala.
El trabajo de los verificadores de VoxUkraine
La otra gran organización de verificación en Ucrania es VoxUkraine, nacida también en 2014 por el impulso original de un grupo de economistas, como explica en su web. En noviembre de 2015 se constituyó en una organización civil y en 2018 pasó a formar parte de la IFCN.
Yuliia Zhaha, analista de desinformación de VoxUkraine, ha explicado cómo se ha visto afectado el trabajo de su organización en una conversación en Twitter organizada por los verificadores estadounidenses de PolitiFact este 1 de abril.
“Todo ha cambiado para nosotros”, afirmó en esta conversación realizada con motivo del Día Internacional del Fact-Checking. “Con el comienzo de la guerra, nuestras operaciones se han visto algo interrumpidas porque parte del equipo no pudo seguir trabajando, ya que debieron escapar a un lugar más seguro o tuvieron que ocuparse de cuidar de sus vidas”.
Sobre el trabajo de verificación que realiza el equipo, Zhaha ha explicado: “Básicamente seguimos el mismo procedimiento que teníamos antes, aunque ahora mismo hay muchos más bulos y tienen otra carga emocional, porque son sobre nosotros. Nuestra ventaja es que sabemos el idioma, conocemos la geografía y conocemos a los funcionarios que van a hablar sobre el tema y las fuentes donde buscar”. Esto les permite actuar con mayor rapidez, explica Zhaha, quien ha deseado que el conflicto acabe lo más pronto posible: “Cuanto antes gane Ucrania la guerra, antes podremos volver a funcionar con normalidad en nuestra organización”.