Los acuerdos de la derecha con la ultraderecha no son una “anomalía” en Europa como dice Rufián

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Foto: Fernando Alvarado | EFE
“Cuando la ultraderecha gana en Europa, no la frena solo la socialdemocracia, sino que la frena también la derecha”
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El portavoz del Grupo de Esquerra Republicana (ERC) en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián, afirmó el 13 de junio en una entrevista en Público que “cuando la ultraderecha gana en Europa, no la frena solo la socialdemocracia, sino que la frena también la derecha”. A continuación dijo que la canciller alemana, Angela Merkel, era la encargada de hacerlo en su país, cuando “quizá es más de derechas que Casado”. 

Esta no es la primera vez que el portavoz de ERC dice algo así. En una entrevista en La Hora de la 1 del 8 de junio afirmaba algo similar en el contexto de la manifestación en contra de los indultos celebrada en la plaza de Colón de Madrid. 

“Porque en muchos países de Europa quien frena a la ultraderecha es la derecha. Quien frena a la ultraderecha en Alemania no es la socialdemocracia alemana, es Angela Merkel, y quizás es más de derechas que Casado, pero su raíz es antifascista. Aquí no pasa. Aquí nadie duda de que Arrimadas y Casado, si pueden, llegarán a Moncloa con el apoyo de Abascal. Eso es una anomalía dentro de Europa que nosotros tenemos muy normalizada”, dijo Rufián.

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Aunque en el Gobierno alemán no haya ningún integrante de Alternativa por Alemania, el partido antieuropeo y contrario a la inmigración del país, se trata del único país europeo en el que la “derecha frena el avance de la ultraderecha”.

En otros ejecutivos como los de Austria, Países Bajos o Estonia se han dado acuerdos entre los partidos conservadores tradicionales y estas nuevas formaciones más extremistas. 

Pese a que Rufián lo describe como “una anomalía” en Europa, los expertos consultados coinciden en que el caso de Alemania es el único donde claramente la derecha ha impuesto un ‘cordón sanitario’ a la extrema derecha en Europa. Repasamos los casos.

El canciller austriaco Sebastian Kurz llegó al poder en 2017 gracias al partido de extrema derecha 

Sebastian Kurz, actual canciller y presidente del Partido Popular de Austria (ÖVP), llegó al cargo por primera vez en el 2017, después de formar una coalición con el Partido de la Libertad de Austria (FPÖ), de extrema derecha, según el posicionamiento ideológico de este partido según establece el CIDOB (Barcelona Center For International Affairs), en un documento que analiza los partidos ultra europeos.

Cuando el canciller conformó su gobierno, Heinz-Christian Strache, líder de FPÖ, fue proclamado vicecanciller. Aun así, Kurz diluyó el acuerdo con FPÖ en 2019 por un caso de corrupción en este partido.

Kurz es el líder del partido conservador tradicional austriaco, el equivalente al PP español. Aunque Rufián asegura que el caso de España es una anomalía, el caso de Austria es otro ejemplo.

En este país, el canciller Sebastian Kurz contó con el apoyo del partido de extrema derecha del país en su primer gobierno en el que, además, ocuparon cinco puestos, como se refleja en su página web, entre ellos, el del Ministerio de Interior austriaco.

Jüri Ratas dio cinco carteras ministeriales al partido de extrema derecha de Estonia

Después de las elecciones generales de Estonia de 2019, el primer ministro Jüri Ratas repitió mandato, pero lo hizo gracias a una coalición entre su partido, Partido del Centro de Estonia, y el Partido Popular Conservador de Estonia, de derecha populista, según el CIDOB.

Una vez se formó el Gobierno, cinco de las 15 carteras ministeriales fueron concedidas al Partido Popular Conservador. 

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Aun así, la coalición terminó en enero de 2021, cuando Jüri Ratas dimitió como primer ministro al conocerse un caso de corrupción en su partido.

El primer ministro neerlandés, Mark Rutte, apoyado por la extrema derecha

Como recoge la página oficial del gobierno de Países Bajos, Mark Rutte llegó a primer ministro en 2010 con un acuerdo de coalición entre su formación, el Partido Popular por la Libertad y la Democracia, y Llamamiento Demócrata Cristiano.

Aunque no hubo cargos en el gobierno ocupados por representantes del partido de extrema derecha neerlandés, según el CIDOB, Partido por la Libertad, el 30 de septiembre de 2010 se firmó un acuerdo de tolerancia.

En él, los tres partidos firmantes, pactaron cómo debían tratarse políticas del Estado en relación a: inmigración, seguridad, cuidado de las personas mayores, y finanzas.

Este acuerdo terminó en 2012, con la disolución del primer gobierno de Rutte y la convocatoria de elecciones.

El partido de extrema derecha finlandés entró en el gobierno en 2015

Juha Sipilä llegó al cargo de primer ministro de Finlandia después de las elecciones parlamentarias de 2015. Esto fue posible gracias al apoyo de los diputados de su formación, Partido de Centro, y a una coalición de gobierno con el Partido Coalición Nacional y el Partido de los Finlandeses. Este último es la formación política de extrema derecha del país, como recoge en su análisis el CIDOB.

Debido a la coalición, el líder del Partido de los Finlandeses, Timo Soini, fue primer viceministro hasta 2017 y, después, ministro de Relaciones Exteriores. Además, otros integrantes de su partido ocuparon cinco carteras ministeriales entre 2015 y 2019, como se puede ver en la página oficial del Gobierno finlandés.

El Gobierno alemán no tiene integrantes del partido de extrema derecha de su país

Tal y como afirmaba Gabriel Rufián en las dos entrevistas, el Gobierno de la canciller alemana Angela Merkel no tiene integrantes del partido de extrema derecha, Alternativa por Alemania.

De hecho, el Ejecutivo alemán tiene ministros de tres partidos: Unión Demócrata Cristiana de Alemania (CDU), el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) y de Unión Social Cristiana de Baviera (CSU), pero ninguno de ellos pertenece al partido de extrema derecha del país.

En otros países no se ha dado el caso

Ignacio Molina, investigador del Real Instituto Elcano y profesor de Ciencia Política, señala que en algunos países como Irlanda o Luxemburgo “no ha ocurrido porque no se ha dado el caso”. 

El experto señala que en Alemania sí se ha hecho un cordón sanitario “por convicción”, tanto a nivel nacional como de los länder, como en el caso de Turingia. “Alemania es el único. Es el último muro de contención, con una elección hecha a conciencia”, añade Héctor Sánchez Margalef, investigador de CIDOB.

Desde Newtral.es nos hemos puesto en contacto con el gabinete de prensa de Esquerra Republicana en el Congreso para saber a qué se refería su portavoz, Gabriel Rufián, y afirman “que uno puede referirse a una realidad que sucede sin que por ello esté asegurando que se da en el 100% de los casos. Por ejemplo, eso ha sucedido en Alemania, ergo sucede en Europa”. Pero Gabriel Rufián aseguraba que la situación política que se da en España era una anomalía en el continente, algo que, como hemos visto, no es así.

Resumen

Aunque es cierto que en Alemania el partido de extrema derecha Alternativa por Alemania no forma parte del Gobierno, se trata del único ejemplo europeo en el que la derecha frena a la extrema derecha, como señalan los expertos. En otros países como Austria, Italia, Finlandia, Países Bajos o Estonia ha habido acuerdos de coalición entre los partidos conservadores tradicionales y los partidos de extrema derecha. 

La afirmación de Rufián mezcla datos correctos con otros que no lo son. Por un lado, dijo que Angela Merkel no ha permitido la entrada del partido de extrema derecha alemán al Gobierno, lo cuál es verdad, pero por otro afirmó “cuando la ultraderecha gana en Europa, no la frena solo la socialdemocracia, sino que la frena también la derecha”, y eso no es cierto, como se ve con Austria, Estonia, Países Bajos o Finlandia. Por tanto, consideramos que es engañoso.

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