La escalada de precios de la luz, que ha marcado récords en varios países, ha llevado a la Unión Europea a proponer una reforma estructural del mercado eléctrico, según ha anunciado la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. “Los precios de la electricidad que se disparan ahora están exponiendo las limitaciones de nuestro diseño de mercado de la electricidad. Fue desarrollado para diferentes circunstancias”, expuso. Algo que, según los expertos, podría hacerse aplicando la excepción ibérica en el conjunto de Europa.
“Tendría sentido que fuera algo que ya se ha aprobado y que está funcionando”, considera Mario Sánchez-Herrero, profesor de Economía de la Universidad Complutense de Madrid. A juicio del docente, el tope del gas a nivel europeo lograría evitar que el coste disparado de esta forma de energía “contamine el precio de la electricidad”.
No obstante, José Manuel Sala Arquer, catedrático de Derecho Administrativo y director del Máster en Derecho de la Energía y Transición Energética de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), mantiene la cautela, ya que aún no hay datos “sobre cómo se va a instrumentar esa intervención” anunciada por la Unión Europea y que algunos expertos dicen que no funcionará a nivel comunitario.
Mientras, el Consejo de Energía comunitario ya ha anunciado que se reunirá en Bruselas el 9 de septiembre para iniciar las negociaciones y examinar la situación energética.
La excepción ibérica en Europa debería complementarse con otras medidas
Desde el punto de vista de José Antonio Blanco Moa, profesor del departamento de Derecho Administrativo de la Universidad de A Coruña, “una medida como la excepción ibérica podría resultar positiva, pero es insuficiente para resolver el problema energético que existe de fondo”.
De hecho, también de acuerdo con Sánchez-Herrero, esta forma de intervenir en el mercado eléctrico debe ir acompañada de la reducción del uso del gas. “Aunque estuviera barato, no podemos seguir quemando gas”, indica, ya que su precio también se ha visto incrementado por el coste de los derechos de emisión de CO2.
Desde el Centro de Investigación de Políticas Económicas, un think tank europeo, defienden que la excepción ibérica depende también de las conexiones energéticas del país. “El instrumento puede funcionar en países con poca interconexión con los vecinos, un mercado de gas sin restricciones y cobertura limitada a futuro”, dicen.
No obstante, estas son características de la península ibérica y no son compartidas por todos los países europeos. Por esa razón, los expertos del centro creen que aplicar la excepción ibérica al resto de Europa no funcionará. A su juicio, en su lugar, las ayudas económicas son “mejores políticas que una intervención en el mercado mayorista”.
Frente a esta postura, Natalia Fabra, catedrática de Economía de la Universidad Carlos III de Madrid, considera que aplicar la excepción ibérica a toda Europa sería más positivo que la situación actual, en la que países vecinos, como Francia, adquieren la energía de España a precios más baratos que los de su mercado mayorista. “Si esta medida se aplica a nivel europeo, esta distorsión desaparecería, porque el precio de España baja pero también baja el de Francia”, expone, si bien incide en que el ahorro dependerá del contexto de cada país.
El mayor o menor éxito de la excepción ibérica depende de la cantidad de gas que utilice cada país
Pese a todo, el éxito que puede resultar de aplicar la excepción ibérica en toda Europa dependerá del ‘mix energético’ de cada país. Es decir, del peso que tiene cada fuente de energía en el total de electricidad que se utiliza en el territorio, ya que, como explica Sánchez-Herrero, cuanta más cantidad de gas usa el país, más debe pagar por la compensación a las gasistas.
Esto se debe a que el tope del gas fija un precio máximo al que pagar este recurso de generación energética. Este sistema supone que haya que compensar a las centrales que funcionan con esta fuente de energía, ya que lo venden a precio fijo pero lo compran a precios internacionales, por lo que, según Sala, “alguien las tiene que indemnizar”.
Por ello, como señala Moa, “si en el mix energético se utiliza mucho gas los precios seguirán siendo caros, si bien es cierto que lo serán menos que en la actualidad”. (*) Aun así, de acuerdo con Aitor Urresti, experto en energía de la Universidad del País Vasco, aplicar la medida sería positivo “de partida”. No obstante, indica que se pueden percibir “comportamientos del mercado extraños” dependiendo de cada territorio. “Habría que analizar país a país”, agrega.
La excepción ibérica en Europa podría modificar el modelo actual del mercado eléctrico
Von der Leyen habló sobre la dependencia energética y los elevados precios de la luz en Europa durante la conferencia internacional Bled Strategic Forum. “Estamos trabajando en una intervención de emergencia y en una reforma estructural del mercado de la electricidad”, dijo.
Ante esta propuesta, los expertos se encuentran divididos ante la posibilidad de que Europa aplique la excepción ibérica sobre el resto del territorio comunitario y los efectos que podría tener. De acuerdo con Sala, esta modificación no supondrá “la desaparición del actual mercado spot, de tipo marginalista”, basado en que la última energía que entra al mercado mayorista es la más cara y marca los precios del resto, sino que prevé que se trate de “una actuación de emergencia y por tanto limitada en el tiempo”.
Sin embargo, Sánchez-Herrero opina que la implementación de una posible excepción ibérica en Europa podría incluso cambiar el mercado eléctrico tal y como lo conocemos. “Ya no tiene sentido un modelo como el actual porque hay tecnologías con estructuras de costes muy diferentes”, destaca el experto.
El tope del gas reduce los precios de electricidad en España y Portugal respecto al resto de países
De acuerdo con Sánchez-Herrero, la excepción ibérica logra bajar los precios de la electricidad, lo que podría repetirse en Europa. Urresti se muestra de acuerdo, e indica que para analizar la efectividad del tope del gas hay que comparar los precios de la electricidad en España con el de otros Estados miembros y no con el coste de la luz hace unos meses en el propio país.
Según explica este experto, los mejores precios se deben a que, en el caso del mercado ibérico, la compensación solo se paga al porcentaje de energía generada mediante gas, mientras que el resto de energía obtiene el precio del mercado mayorista, reducido por el tope impuesto al gas. “Si en lugar de pagar este 30% o 40% con sobreprecio, tuviéramos que pagar toda la energía a ese precio, ahí sí que se nos disparaba la factura”, expone el experto.
Por esa razón, Urresti considera que los ahorros logrados son “muy importantes”. “El resto [de electricidad que proviene de otras fuentes de energía], el 60% que no lleva la compensación, lo estamos pagando a precios muy bajos y ahí tenemos el ahorro”, sentencia.
*El artículo se ha actualizado para añadir nuevas declaraciones de Aitor Urresti.
- Tuit de la Comisión Europea sobre el anuncio de la presidenta, Ursula von der Leyen, de la intención comunitaria de reformar el mercado eléctrico
- Mario Sánchez-Herrero, profesor de Economía de la Universidad Complutense de Madrid
- José Manuel Sala Arquer, catedrático de Derecho Administrativo y director del Máster en Derecho de la Energía y Transición Energética de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR)
- Tuit de la convocatoria de la reunión extraordinaria del Consejo de Energía de la Unión Europea por el ministro de Industria checo, Jozef Síkela
- José Antonio Blanco Moa, profesor del departamento de Derecho Administrativo de la Universidad de A Coruña
- Artículo ‘La intervención del mercado eléctrico ibérico no funciona para Europa’ del Centro de Investigación de Políticas Económicas
- Natalia Fabra, catedrática de Economía de la Universidad Carlos III de Madrid
- Real Decreto-ley 10/2022, de 13 de mayo, por el que se establece con carácter temporal un mecanismo de ajuste de costes de producción para la reducción del precio de la electricidad en el mercado mayorista
- Aitor Urresti, experto en energía de la Universidad del País Vasco
Lo que no es de recibo es que para controlar los precios del Mercado Regulado nos apliquen un sobrecoste del 100% al Mercado Libre. ¿Mercado Libre? No me hagan reir!. La dichosa excepción ibérica lo que me ha supuesto a nivel consumidor es que mi factura de 87€ se ha visto incrementada en otros 89€. Total a pagar: 176€!!!!!
No sé si habrá un ahorro a nivel macro, pero desde luego a nivel consumidor es un robo a mano armada.