El difícil acceso a los servicios básicos en la España rural: a 22 km del centro de salud y a 17 del tren

Servicios España rural
Un grupo de ancianos en un pueblo de Galicia - Shutterstock
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En España, los habitantes de las zonas rurales tienen que recorrer 22 kilómetros de media para ir a un centro de salud, 20 más que en la ciudad; y 17 kilómetros para llegar a una estación de tren, siete veces más que desde las urbes, según datos del Observatorio Rural de la Comisión Europea. La brecha entre la ciudad y las zonas rurales en el país es “más pronunciada que en el resto de países de la Unión Europea”, como recoge el estudio El acceso a servicios en la España rural, del Banco de España, que atribuye estas diferencias a la orografía y a los impuestos, principalmente.

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Vivir lejos de la atención médica

Los datos de distancia a servicios por municipio facilitados por el Centro Común de Investigación (JRC, por sus siglas en inglés) a Newtral.es muestran que los vecinos de La Bouza, una localidad salmantina cercana a la Raya –frontera portuguesa–, son los que tienen que recorrer mayor distancia por carretera para llegar al servicio de atención médica más cercano, en concreto, 118 kilómetros. En total, 32 municipios localizados en zonas rurales de las provincias de Cáceres, Guadalajara, Huesca, Salamanca y Palencia, se encuentran a más de 100 kilómetros de distancia al centro sanitario más próximo.

“Las zonas de alta montaña o pueblos de pocos habitantes, la situación en las islas más pequeñas, o lugares penalizados por redes de transporte poco desarrolladas son los que más dificultades encuentran para tener un buen acceso a la sanidad, tanto en atención primaria como de especialidades”, señala Carina Escobar, presidenta de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP).

El servicio de atención primaria, clave en la España rural

Escobar incide en la importancia del servicio de atención primaria en zonas rurales en España y la necesidad de dotarla de mayor capacidad de respuesta. “Su relación con los especialistas de los hospitales es fundamental para hacer derivaciones de calidad y un trabajo conjunto de seguimiento con los pacientes y cuidadores”, señala. Así, recuerda que “la carencia de profesionales sanitarios, el cierre de centros de salud y la ausencia de políticas sanitarias adaptadas que centren sus esfuerzos en los más vulnerables afectan directamente a la calidad y años de vida”.

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Una estadística de Eurostat sitúa a 11 regiones NUTS 3 españolas entre los 89 europeos en los que menos de la mitad de la población tenía en 2020 un hospital a menos de 15 minutos de su vivienda. La región en la que menos población vivía a menos de 15 minutos de un hospital era Cuenca, donde este porcentaje apenas llegaba al 31%. Le seguían la isla de La Gomera (39,5%), Teruel (39,7%), Fuerteventura (42,3%) y Zamora (45,7%). En el extremo opuesto se encontraban Melilla (99,7%), Barcelona (98%) o Madrid (96,9%).

“Tanto en las zonas urbanas como rurales dependemos de nuestro código postal para tener acceso a un primer diagnóstico, a un seguimiento de calidad y a tratamientos y terapias. Tenemos un problema de equidad en España muy importante que requiere de un compromiso político y de una visión de la salud de las personas y sus cuidados a medio y largo plazo“, afirma la presidenta de la POP.

La educación en zonas rurales: ¿un freno a la despoblación?

Mogán, en la provincia de Las Palmas, es la localidad española cuyos habitantes se encuentran más lejos por carretera de la escuela primaria más próxima (45,6 kilómetros), mientras que La Aldea de San Nicolás, también en Las Palmas, es el municipio que tiene más lejos el instituto de educación secundaria más cercano, a 61,4 kilómetros.

España contaba en el curso 2020-21 con 714 Centros Rurales Agrupados (CRA) –centros públicos que tienen unidades ubicadas en distintas localidades–, con 72.311 alumnos matriculados y 11.135 profesores impartiendo clases, según datos del último informe Las cifras de la educación en España del Ministerio de Educación y Formación Profesional. 

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El ex inspector educativo e investigador Rogeli Santamaría afirma en el Informe España 2020 que las escuelas en el medio rural son “un freno a la emigración“ y a la despoblación, al ofrecer un servicio que “posibilita el establecimiento de familias con niños y “un mayor arraigo de la población rural", frenando una “huida ilustrada" a las ciudades que “es facilitada por la adquisición de mejor nivel educativo".

Para Noelia Morales, profesora de Sociología en la Universidad de Salamanca, las escuelas en zonas rurales “no frenan por sí mismas el despoblamiento porque no contrarrestan otros factores, pero su cierre sí contribuye a reforzar el proceso de despoblación“. No obstante, recuerda que “las nuevas tecnologías y las posibilidades de la escuela rural para acometer innovaciones educativas están fructificando en casos de centros pioneros en innovación educativa”.

Transporte para acceder a los servicios en la España rural

De media, los habitantes de las zonas rurales en España se encuentran a 17,4 kilómetros de la estación de tren más cercana. El municipio español más distante del ferrocarril es Siles, en el noreste de la provincia de Jaén, cuyos vecinos están a una distancia media de 104,1 kilómetros por carretera hasta el transporte ferroviario.

“El principal problema del ferrocarril en España no es tanto la falta de infraestructura, sino la ausencia de trenes. Desde la Alianza Ibérica por el Ferrocarril pedimos que se garantice que se hagan al menos cuatro servicios diarios por sentido en cada estación”, afirma Pau Noy, presidente de la Fundación Movilidad Sostenible y Segura, en declaraciones a Newtral.es. 

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“Esta frecuencia permitiría a los habitantes de las zonas rurales de España acudir a la capital comarcal o provincial a hacer gestiones administrativas o ir al médico y poder volver en el mismo día. A las localidades rurales, estar vinculadas con el mundo y recibir turismo de forma sostenible”, señala Noy.

El tren, la alternativa de movilidad sostenible para el mundo rural

Algunos estudios defienden que la movilidad rural en España se caracteriza por “una gran dependencia de medios privados” en un entorno en el que “un elevado porcentaje de población carece de vehículo”. Por ello, buena parte de la población depende de unas “redes familiares y sociales a menudo precarias o menguantes y del transporte público”, especialmente del autobús, ante la “escasa presencia del ferrocarril” en estas zonas.

Cristina Arjona, responsable de Movilidad de Greenpeace, considera esencial seguir apostando por la implantación del ferrocarril en las zonas rurales y por el mantenimiento de las líneas que ya están en funcionamiento. “El tren es una apuesta de futuro. Es el medio de transporte que menos emisiones de CO₂ genera por pasajero, por lo que tiene una alta capacidad de dar respuesta a la crisis climática. No obstante, también hay otros medios de transporte, como el autobús, cuyo servicio aún tiene margen de mejora”, señala.

Por ello, la organización ambientalista propone convertir en “permanentes” los bonos de transporte urbano e interurbano introducidos por el real decreto-ley de medidas para hacer frente a la inflación y a las consecuencias de la guerra de Ucrania, implantando “un sistema de tarifa plana para el uso del transporte público en todo el territorio”.

Una desigualdad inconstitucional

El Defensor del Pueblo aseguró en su informe anual de 2018 que “la dificultad, incrementada por la crisis económica, para que los habitantes de las zonas más despobladas accedan a servicios básicos como sanidad, educación, transporte, banca y una buena cobertura de redes de banda ancha” genera “una brecha de desigualdad incompatible con los principios constitucionales de equidad e igualdad en el acceso a los servicios públicos básicos”.

Fuentes