En Ucrania hay 28 sitios culturales (agrupadas en 7 categorías), además de varias zonas naturales, considerados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Desde el comienzo de la invasión rusa de Ucrania, la organización transmitió su preocupación por la conservación de estos lugares y ha instado a colocar el emblema del “Escudo Azul’ ante la posibilidad de que fueran dañados de manera intencional o involuntaria por los ejércitos.
El ‘Escudo Azul’ es un emblema creado en el Convenio para la Protección de los Bienes Culturales firmado en La Haya en 1954. En él se establecieron una serie de normas para proteger propiedades culturales durante conflictos armados. Entre ellas, se creó este emblema para marcar lugares que debían ser protegidos de ataques.
En Ucrania estos lugares se encuentran en el oeste del país. Algunos están en ciudades, como es el caso de la Catedral de Santa Sofía, el Monasterio de las Cuevas y La Iglesia del Salvador en Berestovo, todos en Kiev. Otros se ubican en zonas rurales como las tserkvas, iglesias de madera de la región de los Cárpatos.
El uso de ‘Escudos Azules’ en Ucrania
A través de una nota de prensa, el organismo de las Naciones Unidas indicó que “desde el principio de la guerra en Ucrania, la UNESCO ha actuado en el marco de su mandato, en particular para proteger la cultura”.
En el texto, la organización asegura que está en contacto con las autoridades ucranianas “para marcar sitios culturales y monumentos con el distintivo ‘Escudo Azul’ [...] para evitar daños deliberados o accidentales”. En concreto, destaca que “las propiedades inscritas en la lista de Patrimonio de la Humanidad están consideradas una prioridad”.
Así, indican que el proceso ya había comenzado en el “Conjunto del centro histórico de Leópolis”. Además, desde la UNESCO han confirmado a Newtral.es que también se han colocado en monumentos civiles y religiosos de Kiev.
El uso de este emblema en el pasado
El organismo encargado de la gestión de estos emblemas es la organización Escudo Azul, creada en 1996 a partir de diferentes organizaciones culturales internacionales. Esta organización se define en su web oficial como “independiente, neutral, no gubernamental, sin ánimo de lucro, que se esfuerza por proteger el patrimonio durante los conflictos armados y las catástrofes en todo el mundo”.
Uno de los principales lugares en los que se usó este distintivo, explican desde la UNESCO, fue en la ciudad antigua de Dubrovnik (Croacia), considerada Patrimonio de la Humanidad. En 1991 y 1992, durante la Guerra de Croacia, los edificios históricos de esta ciudad ondeaban la bandera con el emblema del ‘Escudo Azul’ para evitar ser atacados en los bombardeos que asediaban la ciudad. Esta fue la primera vez que se enviaron expertos a una zona de guerra para controlar el estado del patrimonio cultural.
En el caso de la destrucción de patrimonio histórico en Siria, en 2011, la organización emitió un comunicado en el que ponía a disposición de los expertos de Siria su red de organizaciones “para apoyar su labor de proteger el patrimonio del país y, en caso necesario, evaluar las medidas de recuperación, restauración y medidas de reparación”. Y en 2013 creó una lista de lugares de importancia histórica y arqueológica en Alepo para intentar evitar que se generaran conflictos ahí.
Además, desde hace unos años la destrucción de estos lugares puede ser juzgada como crimen de guerra. En 2016, la Corte Penal Internacional, procesó por primera vez a una persona por la destrucción de patrimonio cultural como crimen de guerra. Ahmad Al-Faqi Al-Mahdi, miembro de un grupo yihadista relacionado con Al Qaeda, destruyó en Mali 10 monumentos históricos, de los que nueve estaban en la lista de Patrimonio de la Humanidad. Esto fue considerado por la UNESCO como “un paso fundamental para frenar la impunidad por la destrucción del patrimonio cultural”.
Fuentes:
- Servicio de prensa de la UNESCO
- Blue Shield
- Lista de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO
- Corte Penal Internacional
En Ucrania hay 7 sitios patrimonio de la Humanidad, no 28. El resto son de la "lista indicativa", una especie de lista de espera.