Enrique Arias Gil: de colaborar con el ‘think tank’ del Ministerio de Defensa a “desinformador ruso” buscado por Europol

Tiempo de lectura: 6 min

Desde el pasado viernes, Enrique Arias Gil, un madrileño de 37 años, figura en la lista de los “más buscados” de Europol por —presuntamente— colaborar con un grupo de hackers al servicio del Kremlin que ha protagonizado miles de ataques informáticos contra instituciones nacionales y europeas, incluida la Casa Real española. La Policía Nacional considera que este individuo, que ha trabajado como analista experto en terrorismo y radicalización, habría facilitado información al grupo de ciberdelincuentes NoName057 sobre determinados objetivos. También gestiona un canal de Telegram llamado “desinformador ruso” desde el que todavía difunde propaganda.

Publicidad

Antes de que las autoridades españolas cursaran la orden internacional de detención, Enrique Arias ya era conocido en los círculos de seguridad y defensa españoles. Se doctoró en Seguridad Internacional por el Instituto Universitario General Gutiérrez Mellado, un centro asociado a la UNED donde se forman muchos analistas de inteligencia, e incluso llegó a colaborar en varias publicaciones del Instituto Español de Estudios Estratégicos (IEEE), el think tank del Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional (CESEDEN) del Ministerio de Defensa. También impartió formaciones en distintas academias y universidades privadas.

Lo más probable es que Enrique Arias se encuentre en Rusia, ya que en el verano de 2024 obtuvo una “beca” para estudiar en una universidad de Moscú, como dijo en una entrevista publicada por la Casa Rusa en Madrid. Entonces, uno de los canales de Telegram dedicado a difundir propaganda a favor del Kremlin en español difundió un vídeo grabado en la capital rusa donde él mismo manifestaba su deseo de vivir allí. “Quiero quedarme a vivir en Rusia toda mi vida si es posible […] Ya tenía amigos rusos con los que contactaba y que me han ayudado en todo”, relató. Además, el español aprovechó el vídeo para resaltar las supuestas bondades de Rusia frente a España en lo que se refiere a la “limpieza” y el “desempleo”.

Según la Policía Nacional, Enrique Arias es la persona que se esconde tras el canal de Telegram “desinformador ruso”, donde publica todo tipo de propaganda y ‘memes’ a favor del Kremlin. A través de este canal aplaude los ciberataques perpetrados por los hackers de NoName057 y difunde sus amenazas. “España consiguió ser el país más ciberatacado del mundo en las dos últimas semanas, superando a Estados Unidos e Israel juntos (…) los ciberataques llegaron al presidente español, ministros, exministros, el Congreso de los Diputados, el Centro Nacional de Inteligencia, expertos en ciberseguridad, medios de comunicación y altas personalidades empresariales”, publicó el pasado mes de marzo, cuando se sucedieron varios ataques contra instituciones españolas y europeas.

Otro de los grupos de hackers sobre los que difunde propaganda es TwoNet, autor de ciberataques contra Newtral, entre otros. En su canal —donde oculta su identidad— también ha difundido entrevistas a combatientes españoles que se han unido al ejército ruso para participar en la invasión a Ucrania y ha expuesto datos sobre periodistas y analistas en ciberseguridad españoles. 

Publicidad

Tras su inclusión en la lista de los más buscados de Europol bajo la acusación de ciberterrorismo, Enrique Arias ha publicado una carta donde asegura que él “antes era un patriota español” que trabajó como “analista de inteligencia”, pero ahora se identifica como “patriota ruso”.

De hecho, este jueves ha difundido una fotografía en la que aparece con el pensador ruso Alexander Dugin, considerado uno de los principales consejeros del presidente ruso y apodado “el Rasputín de Putin”. Dugin, al que considera un “maestro”, ha defendido ideas genocidas contra el pueblo ucraniano y es uno de los principales promotores de la invasión a Ucrania, por lo que está sancionado por la Unión Europea.

Enrique Arias Gil (dcha.) junto a Alexander Dugin (izda.) | Foto: Telegram

La admiración de Enrique Arias hacia Dugin no es nueva. En agosto de 2022, tras el asesinato de la hija del filósofo ruso, publicó un artículo con su nombre donde le definía como un “genio” y “titán de la filosofía”, al tiempo que abogaba por una salida a la guerra en Ucrania negociada entre la Unión Europea y Rusia con concesiones a Putin.

Este amor por Rusia contrasta con lo que Enrique Arias expresó hace solo dos años en un canal de Telegram que administraba, donde se despidió de sus compañeros de un think tank privado para el que trabajaba de la siguiente manera: “(…) Creemos en España. Queremos a España. España por encima de todo: más allá del origen, la ideología, las clases o el género. España es nuestra forma de ser, de actuar, de sentir; aunque muchos que dicen defenderla en el sector lo hagan solo de boquilla, y obedezcan solamente a intereses extranjeros, nosotros no somos así”.

Publicidad

Aunque hasta ahora se desconocía su colaboración con hackers vinculados al Kremlin, Enrique Arias ya había dado signos que despertaban recelo entre sus compañeros de profesión. En mayo de 2020, en plena pandemia por el coronavirus, el diario Vozpópuli desveló un manual de desobediencia difundido por redes sociales y mensajería que alentaba las protestas contra el confinamiento. En concreto, este manual revelaba algunos datos sobre el funcionamiento de los servicios de información de los cuerpos policiales —dedicados a labores de inteligencia— e instaba a los manifestantes a grabar a los agentes y difundir sus identidades. Los metadatos del fichero que contenía el manual apuntaban a Enrique Arias como uno de los autores, aunque él explicó que solo lo reprodujo.

Recientemente, bajo su alias de “desinformador ruso”, ha publicado un libro llamado Trabajad, Hermanos. Historias de la inteligencia soviética y rusa, el cual aparece editado por una supuesta editorial argelina llamada “Lubianka”. Así se apodaba a la sede del KGB, los servicios secretos soviéticos, por lo que es probable que se trate de una burla. “Me animó a escribirlo mi buen amigo y camarada Juan Antonio Aguilar, el director del Instituto Español de Geopolítica, quien me dijo que tales historias no deberían de permanecer en el olvido digital”, escribe el autor. Aguilar, que también prologa el libro de “desinformador ruso”, es un falangista considerado un “agente de influencia” de Rusia en España, como recoge una investigación de El Periódico y Newtral.

Fuentes
Publicidad