El presidente Joe Biden anunció este martes que el ejército de Estados Unidos ha matado a otro líder del ISIS en Siria. La organización terrorista pierde así a uno de sus cinco mayores jefes en Siria e Irak, países en los que estableció su califato entre 2014 y 2019.
El Comando Central de EEUU confirmó la muerte de Maher al-Agal tras un ataque de dron cerca de Jindires, una localidad al norte de Alepo. Al-Agal iba en moto con un asociado que salió herido del incidente. Según un grupo humanitario local conocido como Cascos Blancos, el segundo individuo falleció poco después. Las autoridades estadounidenses por ahora no han confirmado esa muerte.
«Este ataque aéreo representa la culminación de un trabajo de inteligencia determinado y meticuloso, y se erige como un testamento de la valentía y el oficio de nuestras fuerzas armadas», dijo Biden en un comunicado. «También demuestra que Estados Unidos no requiere de miles de soldados en misiones de combate para identificar y eliminar amenazas contra nuestro país».
Al-Agal era un líder influyente del ISIS, donde trabajaba «de forma agresiva» en la propagación del grupo lejos de Siria e Irak. El ISIS tiene una presencia notable en varios países de África, especialmente en la región del Sahel, y podría estar ganando fuerza en Afganistán.
¿Pero qué significan este y otros golpes de Estados Unidos contra el ISIS en Siria? ¿Y qué dicen estas victorias de la inteligencia estadounidense sobre el global de la guerra contra las ramificaciones globales del Estado Islámico?
El primero de unos cuantos
EEUU lleva años reduciendo su presencia militar en Oriente Medio. La retirada de tropas de Afganistán fue solo el clímax de un proceso que administraciones previas alargaron más de lo prometido. Pero la lucha contra el Estado Islámico nunca necesitó de un número destacado de tropas en el terreno, sino de ataques de drones y operaciones militares muy específicas.
- En 2019, el expresidente Donald Trump autorizó la Operación Kayla Mueller. El objetivo era matar o capturar a Abu Bakr al-Baghdadi, el entonces líder del ISIS que se escondía en el noroeste de Siria. Al-Baghdadi se suicidó con un chaleco explosivo tras verse contra las cuerdas, matando a dos niños que lo acompañaban.
- En febrero de este año, Biden autorizó otra operación especial para matar o capturar a Abu Ibrahim al-Hashimi al-Qurashi, el sucesor de Al-Baghdadi. Al-Qurashi también se escondía en el noroeste de Siria y se suicidó tras verse rodeado, matando a otras 12 personas, según las autoridades estadounidenses.
- Y este pasado junio, otro líder del ISIS fue detenido por la coalición que lidera Estados Unidos durante una redada en el norte de Siria. Hani Ahmed al-Kurdi era conocido como Wali de Raqqa, o el gobernador de Raqqa, la que en su momento fue capital del califato del ISIS. Al-Kurdi era un «experimentado fabricante de bombas y facilitador de operaciones», según la coalición.
Otros ataques y redadas de Estados Unidos se han saldado con la muerte de numerosos combatientes del ISIS en los últimos años. Pero también con el asesinato de cientos de civiles en bombardeos cuyos informes se retrasaron, maquillaron o clasificaron, según investigaciones de The New York Times.
- Ahora, EEUU solo cuenta con unos 700 soldados en Siria. Su presencia sirve como ayuda a sus aliados en la región para combatir posibles insurgencias yihadistas y proteger instalaciones petroleras.
El alcance reducido del ISIS
Desde su punto álgido en 2015, el ISIS tardó apenas dos años en perder el 95% del territorio con el que contaba en Siria e Irak. En esa región, el grupo está ahora mismo mucho más debilitado que en 2017.
- Los ataques terroristas del ISIS en países como Irak se ha reducido drásticamente con respecto a aquellos años, según un análisis del Centro de Combate contra el Terrorismo de West Point.
- Los restos de la organización solo han conseguido llevar a cabo insurgencias de baja intensidad y generalmente en zonas rurales, según un análisis del think tank suizo Centro por los Estudios de Seguridad.
- Y las operaciones a gran escala de antaño solo encuentran ejemplos anecdóticos difíciles de replicar, como el asalto a una prisión en el noreste de Siria hace unos meses.
Pero pese a que las fuerzas kurdas lograran impedir el rescate de miles de combatientes del ISIS en esa prisión, la operación resultó ser un quebradero de cabeza para la coalición de EEUU que ayudó a contenerla. Ese miedo es uno de los que comparten otros analistas desde hace años.
«El Estado Islámico tiene una capacidad demostrada para absorber derrotas tácticas, enquistarse en nuevos paraísos seguros, hibernar parcialmente, aprender de sus errores y volver para luchar en nuevas campañas», resumían en West Point en otro análisis de 2020 sobre el ISIS.
Tras los líderes del ISIS en Siria: nuevo foco
Sea por falta de líderes o combatientes, el debilitamiento del ISIS en Siria e Irak ha provocado que los miembros de la coalición encabezada por EEUU arrojen importancia sobre otro continente: África.
- El pasado 11 de mayo, la Coalición Global para Derrotar al ISIS destacó la necesidad de apoyar al grupo diseñado para luchar contra el yihadismo en África.
- El Africa Focus Group está formado por EEUU, Italia, Marruecos y Níger. Ese último país forma parte de la región del Sahel, muy afectada por el ascenso del yihadismo islámico.
- La presencia del ISIS y grupos afines lleva años desestabilizando algunas regiones de países como Nigeria y Somalia. Otras organizaciones terroristas yihadistas rivales del ISIS también están presentes en algunas de esas naciones.
Ahora, debido a la retirada de Francia de Malí y la llegada de mercenarios rusos a países de la región, miembros de la OTAN como España quieren una mayor presencia en África.
- Pedro Sánchez aprovechó la última cumbre de la Alianza Atlántica para destacar la necesidad de aumentar la presencia del grupo en el continente africano.
- Pero pese a la inestabilidad evidente en numerosos países del África subsahariana, Estados Unidos sigue priorizando su papel en Oriente Medio.
La importancia de las prisiones
Los expertos creen que los golpes contra los líderes del ISIS en Siria e Irak son clave para mantener al grupo en un estado al menos aletargado. Pero existen otras preocupaciones.
- Las crisis territoriales y políticas en Siria, Irak y Afganistán hacen temer que el ISIS seguirá teniendo oportunidades para reagruparse y resurgir.
- Y la presencia de miles de combatientes en prisiones de Siria hace temer que una nueva operación de rescate tenga consecuencias nefastas.
- Sin olvidar las heridas que podrían estar formándose en los menores todavía retenidos en cárceles y campos de refugiados. Es la puerta perfecta a una radicalización futura (o ya existente).
- The Washington Post: Key Islamic State figure killed in Syria drone strike, U.S. says
- Al-Monitor: Three takeaways from US raid that led to the death of IS’s Hajji Abdullah Read more: https://www.al-monitor.com/originals/2022/02/three-takeaways-us-raid-led-death-iss-hajji-abdullah#ixzz7Yu4gfIIf
- VOA: Global Coalition Preparing ‘Holistic’ Assault on Islamic State in Africa
- ICG: Exploiting Disorder: al-Qaeda and the Islamic State
- CFR: Countering a Resurgent Terrorist Threat in Afghanistan