El presidente en ejercicio de EE.UU., Donald Trump, ha acumulado un nuevo despido en su historial postelectoral. Tras fulminar al Secretario de Defensa Mark Esper, anoche (martes en Washington DC) despidió a Chris Krebs, director de la agencia de ciberseguridad que la semana pasada afirmó que las elecciones presidenciales pasadas fueron «las más seguras de la historia«.
«La reciente declaración de Chris Krebs sobre la seguridad de las elecciones de 2020 fue muy inexacta, ya que hubo fraudes e irregularidades masivas», dijo el presidente, que sigue sin admitir la victoria de Joe Biden, en su cuenta de Twitter.
The recent statement by Chris Krebs on the security of the 2020 Election was highly inaccurate, in that there were massive improprieties and fraud – including dead people voting, Poll Watchers not allowed into polling locations, “glitches” in the voting machines which changed…
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 18, 2020
«Por lo tanto, con efecto inmediato, Chris Krebs ha sido despedido como director de la Agencia de Seguridad de Infraestructura y Ciberseguridad (CISA)», un organismo que pertenece al Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
El mandatario, fiel a su estilo, continuó en una serie de tuits sus razones para el cese: «Lo único seguro en nuestras elecciones de 2020 fue que fueron prácticamente impenetrables para las potencias extranjeras. En eso, la Administración Trump se atribuye un gran mérito».
La semana pasada, en un comunicado, el Comité Ejecutivo del Consejo de Coordinación Gubernamental de Infraestructura Electoral (CCG), perteneciente al Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés), señaló que “no hay pruebas de que ningún sistema de votación haya eliminado o perdido votos, haya cambiado votos o haya sido afectado de alguna manera”.