Son ya 14 los jabalíes que se han detectado con signos de la enfermedad de la peste porcina africana en la sierra de Collserola (Barcelona). Los dos primeros casos fueron confirmados por el Ministerio de Agricultura el 28 de noviembre, después de 31 años sin contagios en España. Es una de las patologías más temidas por el sector porcino dada su virulencia y la ausencia de vacuna específica.
Lo único cierto es que esta es una enfermedad mortífera para cerdos y jabalíes, una vez se contrae el asfivirus que provoca fuertes hemorragias. Con un periodo de incubación de 4 a 19 días, su forma aguda puede acabar con la vida del animal en apenas tres jornadas. Este virus no puede ser contraído por humanos y hasta la fecha, este brote no ha recalado en cerdos.
¿Cuál es el origen de este brote de peste porcina africana?
El origen de esta peste porcina africana de 2025 es una incógnita por ahora. Se sabe que se puede transmitir mediante el contacto directo entre un animal enfermo y otro sano, según el Consorcio Europeo de Peste Porcina Africana (ASFORCE). Pero también –y esto es clave– puede contraer la peste un animal que consuma restos infectados o a través de vectores: desde garrapatas blandas (Argas reflexus) o del género del género Onnithodirus (moubata y erraticus). También por objetos contaminados, como neumáticos de vehículos o calzado.
Expertos en sanidad animal consultados por Efe investigan si algún elemento transportado por la carretera AP-7 (desde un resto alimentario a una rueda contaminada), está en el origen del foco de peste porcina africana detectado entre jabalíes en el área de Collserola, cerca de la UAB. El conseller de Agricultura de Cataluña, Òscar Ordeig, no descarta que fuera comida “que hubiera venido de otro punto de Europa a través de alguna autopista”.
- ¿Alemania, Italia o Europa del este? El investigador en peste porcina Francesc Accensi (CReSa y UAB) ve “plausible” la hipótesis de la contaminación de algún vehículo. ¿Procedente de África, como indica el nombre de la enfermedad? No, realmente. Esta enfermedad es endémica en zonas de Rusia (donde se introdujo en 2007) y en países del este europeo. En la UE, periódicamente se detectan brotes o casos en Italia, Alemania y Polonia, según recuerda el profesor Accensi.
Historia en España: Llegó en avión, desde África a Lisboa, en 1957. La peste porcina africana comenzó a propagarse entre los cerdos que se encontraban en las inmediaciones del aeropuerto de Lisboa, que resultaron contagiados al ingerir restos de la comida infectada que había sido consumida en los vuelos procedentes de África. Desde ahí comenzó a propagarse por Europa. En España, el último caso se registró en noviembre de 1994.
¿Va a saltar a la cabaña porcina? ¿Podría provocar una epidemia en explotaciones?
Realmente, no se sabe, pero el riesgo es real. Por ahora, sólo ha afectado a jabalíes, animales que en ciertos lugares se acercan sin problema a zonas pobladas (en este caso, las inmediaciones del campus de Bellaterra UAB) en busca de comida.
“No creo que debamos alarmarnos todavía“, apunta en el SMC de España, desde el IREC Christian Gortázar (UCLM). “La cuestión es que se han encontrado jabalíes en una zona relativamente pequeña, una mancha que además está más o menos bien definida. Vamos a ver si todos los casos sucesivos se producen en esa misma zona, en esa misma mancha; será una buena señal”.
Dentro de las distintas medidas de bioseguridad para evitar el salto de la peste porcina africana a los cerdos están ”los dobles vallados o los vallados reforzados con muros que estén cementados, es decir, que realmente sean impermeables al jabalí”, en explotaciones ganaderas. En caso de que el virus entre en una granja, hay que sacrificar a toda la cabaña porcina que haya estado en contacto y se establecerán zonas de protección y vigilancia.
¿Podría haber más jabalíes infectados que no se estén detectando?
Es una posibilidad, pero no hay pruebas de ello. Por ahora, se están viendo los cadáveres de ejemplares que se acercan a zonas transitadas de la sierra de Collserola. Este sábado, el conseller de Agricultura Òscar Ordeig ha señalado que aunque se ha perimetrado el acceso a la zona cero de la peste porcina africana en Collserola, mucha gente se ha saltado el precinto.
La buena noticia es que, tras haber hecho tests, se confirma que el virus no ha llegado a las 39 explotaciones que hay en un “radio de 6 kilómetros, ahora inmovilizadas. Hemos encontrado más animales muertos, pero todos los sospechosos están en Cerdanyola. Está muy focalizado y la prioridad es que no salgan de aquí”.
¿Podría funcionar una vacuna?
A diferencia de la peste porcina clásica –que además puede ser menos mortífera–, la africana carece de vacuna o tratamiento que suponga una barrera para su expansión.
La directora del laboratorio dedicado a esta enfermedad en el CBMSO, Yolanda Revilla Novella, explica que se ha intentado con vacunas de subunidades (similar a la de covid de Hipra) o vectorizadas y con virus inactivados o proteínas recombinantes y nada: “la efectividad ha sido nula“, aunque grupos españoles “han probado recientemente prototipos vacunales en Asia con resultados muy prometedores”.
Fragilidades de España ante la peste porcina africana
En 2024, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación detectaba varios problemas que venía abordando en los últimos años, de acuerdo con el memorando de medidas preventivas redactado en abril de ese año. Entre las principales fragilidades:
- Limitada concienciación y formación en temas biosanitarios, especialmente entre la comunidad cazadora.
- Sobreabundancia de jabalíes (más de un millón).
- Deficiencias en bioseguridad en algunas explotaciones porcinas.
- Capacidad limitada de matanza en caso de foco.
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