La Unión Europea ha dado la luz verde definitiva este martes en el Parlamento a un acuerdo para establecer un único cargador universal de tipo USB-C para que se armonice su uso en teléfonos móviles, tabletas, libros electrónicos, cámaras digitales, videoconsolas y auriculares, a partir de otoño de 2024.
Hasta el momento no existía una legislación común que armonice los cargadores en los distintos países, aunque lleva tiempo en la agenda de la UE. Te explicamos en qué consiste el acuerdo alcanzado y cuáles son los plazos para que se implemente.
Cargador universal: trece años de negociaciones
El pacto alcanzado este martes para un cargador universal no entrará en vigor al menos hasta otoño de 2024. Así, primero es necesario que el texto se apruebe formalmente el Consejo de la Unión Europea y el Parlamento Europeo, como explican desde la propia Comisión Europea. Después, se dará dos años a la industria para adaptarse a la nueva normativa y los Estados miembro deberán transponer la norma a su propia legislación.
La Comisión Europea lleva impulsando este acuerdo desde hace trece años, cuando en 2009, alcanzó un acuerdo voluntario con los principales fabricantes de dispositivos móviles, que permitió reducir de 30 a tres los cargadores existentes: el USB 2.0 Micro B, el USB-C y el Lightning, exclusivo de Apple. Según los datos de este organismo esta falta de cargadores universales supone cerca de 11.000 toneladas al año de residuos electrónicos.
Ese pacto, sin embargo, expiró en 2014 y el pasado mes de septiembre el Ejecutivo comunitario lanzó una nueva propuesta que es la que finalmente ha fructificado este junio.
«¡Hoy hemos hecho realidad el cargador universal en Europa! Los consumidores europeos se sintieron frustrados durante mucho tiempo con la acumulación de múltiples cargadores con cada dispositivo nuevo. Ahora podrán utilizar un único cargador para todos sus dispositivos electrónicos portátiles», dijo el ponente de la propuesta en la Eurocámara, el eurodiputado socialdemócrata Alex Agius Saliba el pasado junio cuando se formalizó el preacuerdo.
A qué se aplicaría esta propuesta de la UE
El acuerdo alcanzado en la UE armoniza no solo el tipo de cargador universal a uno tipo USB-C, sino también la velocidad de carga rápida, independientemente del dispositivo de que se trate.
De momento, el cargador único no será compatible con ordenadores portátiles, relojes inteligentes o los dispositivos que miden la actividad física, por razones técnicas como su tamaño, según los documentos que aporta la Comisión.
La propuesta permitirá a los consumidores comprar nuevos dispositivos electrónicos sin tener que adquirir un cargador adicional y evitar así acumular 11.000 toneladas al año de residuos electrónicos, según las estimaciones de la Comisión Europea.
- Pulling the plug on consumer frustration and e-waste: Commission proposes a common charger for electronic devices
- One common charging solution for all – Recent Analysis
- Agencia EFE
