Circula por redes sociales una fotografía editada en la que se ve un camión cruzado en medio de una autopista vacía. El camión, que según los mensajes está bloqueando una carretera en Australia, muestra un mensaje pidiendo la renuncia del Gobierno.
“Es Australia bloqueada desde hoy hasta que se destruya la dictadura ¡todas las carreteras bloqueadas!”, afirman los mensajes de Facebook que comparten la fotografía del camión en la que se puede leer “Keep the Blockade Going Until the Government Resign” (“Mantén el bloqueo hasta que renuncie el gobierno”, en español). Sin embargo, se trata de un montaje realizado a partir de una fotografía de un banco de imágenes.
La imagen de la protesta de camioneros en Australia, descontextualizada
A finales de agosto, los camioneros australianos convocaron una serie de protestas para quejarse por los confinamientos y la obligatoriedad de vacunarse contra la COVID-19, pese a que la vacunación no es obligatoria en forma general en Australia. Como acto de protesta, varios manifestantes bloquearon una de las carreteras del estado de Queensland más concurridas, como recoge la noticia del medio local 7News.
Sin embargo, la imagen que se está compartiendo en redes sociales no muestra a un camión bloqueando una carretera en Australia, ni en ningún otro sitio. Se trata de una imagen de recurso de la plataforma Shutterstock que, según el verificador italiano Facta News, miembro de la Red Internacional de Fact-Checking (IFCN) al igual que Newtral.es, lleva subida desde 2017.
Además, de compartirse como si fuese en Australia, la fotografía viral ha sido editada. Si observamos la imagen original subida a esta plataforma no aparece ningún texto en el camión.
La COVID-19 en Australia
A pesar de las protestas de los camioneros, y otros ciudadanos que se unieron, la vacunación en Australia no es obligatoria en forma general. El Ministerio de Sanidad australiano aseguró a Newtral.es que “el Gobierno de Australia no ha declarado obligatoria la vacunación contra la COVID-19”. Al igual que se recoge en su página web. La única excepción son los trabajadores de ciertos sectores como los sanitarios de las residencias de ancianos, aunque se trata de órdenes de salud dispuestas en algunos estados específicos.
La vacunación en el país oceánico está siendo estable, pero más lenta que en otros países. A 8 de septiembre, 13.313.703 personas han recibido al menos una dosis de la vacuna contra la COVID-19, un 64,6% de la población mayor de 16 años. Pero solo están totalmente vacunados 8.186.949 ciudadanos, un 39,7%.
Actualmente, Australia está sufriendo la tercera ola del COVID-19, provocada por la variante Delta. Según se puede comprobar en los datos recopilados por Our World in Data, la curva de contagios lleva dos meses en continuo crecimiento, marcando máximos desde que comenzase la pandemia, y la de fallecidos lleva creciendo un mes.
Esta situación ha provocado que diferentes ciudades australianas, como Sídney, ordenen confinamientos para intentar doblegar ambas curvas y evitar que sigan creciendo. Además, el país oceánico mantiene las fronteras cerradas.
Esta estrategia funcionó durante los primeros meses de la pandemia, pero el primer ministro australiano, Scott Morrison, afirmó que “no es una manera sostenible de vivir en este país”. Sin embargo, para que acabe este “día de la marmota”, Morrison aseguró que debían alcanzar entre el 70 y el 80% de la población vacunada.
Otros bulos relacionados con las vacunas en Australia
En los últimos meses hemos verificado diferentes bulos en los que afirmaba que se estaba obligando a la población a vacunarse. Por un lado, se ha estado compartiendo que la vacunación de niños era obligatoria, incluso se afirmó que tres niños habían fallecido a causa de la vacunación. Sin embargo, ambas afirmaciones son falsas.
También se compartió un vídeo en el que se veía a varios policías persiguiendo y deteniendo a un grupo de ciudadanos en un parque. El texto que acompañaba al vídeo indicaba que eran policías que trataban de “forzar a vacunarse” a estos ciudadanos. Sin embargo, como explicamos en Newtral.es, se trataba de la disolución de una manifestación no autorizada.
También se compartieron por redes sociales unas declaraciones fuera de contexto del responsable de Salud de Nueva Gales del Sur. En el fragmento compartido, Jeremy McAnulty indicaba que “todos los ingresados en cuidados intensivos menos uno están vacunados”. Pero minutos después se corrigió asegurando que se había expresado mal y que la situación era la inversa. “De las 43 personas en la UCI, 42 no han sido vacunadas. La persona restante tiene solo una dosis”, explicó McAnulty.
