Las denuncias sin pruebas acerca de un supuesto fraude en las elecciones presidenciales del 3 de noviembre en Estados Unidos no cesan. En Newtral.es hemos verificado ya diferentes bulos sobre un presunto fraude en el recuento de los estados de Michigan y Wisconsin o sobre el supuesto voto de personas muertas en Detroit, afirmaciones falsas que también han sido desmentidas por verificadores en Estados Unidos.
[No, estas imágenes no demuestran un fraude electoral en Michigan o en Wisconsin]
Sin embargo, las teorías conspirativas continúan y ahora los mensajes virales, que también circulan en castellano, plantean que han votado muchas más personas de las registradas oficialmente. En concreto, se habla de «1,8 millones de votantes fantasma», según un texto sobre el que nos preguntáis en nuestro servicio de verificación por Whatsapp (+34 627 28 08 15).
Se cita para ello un presunto estudio de una organización denominada Judicial Watch que indicaría que «en 352 condados de 29 estados, el número de votantes registrados es mayor al número de ciudadanos en edad para votar». Este supuesto estudio ha sido publicado por el portal conservador Washington Times el 20 de octubre.
Según las afirmaciones, este presunto estudio encontró una disparidad al «hacer un análisis comparativo entre los datos poblacionales de la Oficina del Censo de Estados Unidos y el registro de votantes estatales». En virtud de esto, «ocho estados muestran tasas de registro de votantes superiores al 100 % (de la población): Alaska, Colorado, Maine, Maryland, Michigan, New Jersey, Rhode Island y Vermont». Los mensajes virales añaden que «en todos ellos ha sido declarado ganador el candidato demócrata, Joe Biden», con «la única excepción de Alaska».
Una estadística sin rigor metodológico
Este bulo ha sido desmentido por la verificadora estadounidense Snopes y por la británica Logically.
Según explica Snopes, Judicial Watch es una organización políticamente partidista que para su informe -que en realidad es una hoja de cálculo- ha mezclado sin rigor metodológico datos de diferentes características, y habitualmente con otros fines, para llegar a una conclusión falsa.
Por un lado, ha tomado datos de los registros de votantes en organismos electorales de diferentes estados. Y por el otro, los compara con la Encuesta sobre la Comunidad Estadounidense de la Oficina del Censo de Estados Unidos (conocida como American Community Survey). En concreto, los datos correspondientes al periodo 2014-2018, el último disponible.
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«La Encuesta sobre la Comunidad Estadounidense es un muestreo, no un censo», afirma el estadístico Philip Stark, de la Universidad de California en Berkeley. «Las estimaciones de población son aproximadas. Usar este muestreo para determinar el número de personas en condiciones de votar es problemático», indica a Snopes.
El profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Duke D. Sunshine Hillygus, en tanto, considera que comparar datos que son un promedio de un periodo de cinco años con los actuales registros de votantes es «como comparar peras con manzanas». Según explica a Snopes, la Encuesta sobre la Comunidad Estadounidense tiene como objetivo brindar a los funcionarios una aproximación a la situación de las comunidades para evaluar necesidades de financiación y servicios.
Estos datos no reflejan los cambios poblacionales producidos desde la realización de la encuesta, como por ejemplo las mudanzas a otras localidades. Tampoco tiene en consideración a quienes durante la realización de la encuesta eran menores de edad pero entretanto han alcanzado la edad necesaria para votar. O a aquellos que están en edad de votar pero no pueden hacerlo por otras razones, como por ejemplo tener antecedentes penales, señala Hillygus.
«La Encuesta sobre la Comunidad Estadounidense es útil como una instantánea de la población, pero no te dice cuál es el registro exacto de votantes en el día de la elección», agrega el especialista.
Un reciente trabajo del Pew Research Center, de hecho, señala que el 22% de los estadounidenses cambió su residencia desde el comienzo de la pandemia o conoce a alguien que lo haya hecho.
Stark, de la Universidad de California en Berkeley, señaló que al usar un promedio de población de los últimos cinco años, y hasta 2018, no se tiene en cuenta el crecimiento poblacional. De esta manera, se está generando la impresión de que hay más votantes que población.
Un bulo similar
En los últimos días también han circulado en las redes sociales mensajes que realizan este mismo planteamiento pero cambiando los nombres de algunos estados. Estos mensajes muestran una tabla en la que se señala, por ejemplo, que el estado de Nevada tiene una proyección de 1,6 millones de votos emitidos cuando los votantes registrados eran supuestamente 1,27 millones.
La imagen, sin embargo, recoge proyecciones de diferentes sitios y los mezcla sin ningún tipo de rigor metodológico. Además, se debe tener en cuenta que en numerosos estados los ciudadanos pueden registrarse como votantes en el mismo día de la elección, por lo que la cantidad de votantes que acuden a las urnas suele ser mayor a lo que indican los registros en las semanas previas.