El Partido Popular ha vuelto a criticar en las últimas semanas el papel de la formación política EH Bildu a raíz del acuerdo para los Presupuestos Generales del Estado, para los que EH Bildu, con representación en el Congreso de los Diputados con cinco escaños, ha dado su apoyo.
El líder del Partido Popular, Pablo Casado ha relacionado a esta formación política con ETA al asegurar que “Bildu justifica y reivindica ese terror”. En los últimos días, otros dirigentes del PP han calificado a los miembros de Bildu como “herederos de ETA”. El miércoles 9 de diciembre, Pablo Montesinos, vicesecretario de comunicación del PP, aseguraba que “Bildu es una formación política que no ha condenado el terrorismo”, durante una entrevista en el programa La Hora de la 1 de RTVE.
Desde EH Bildu remiten a lo expuesto en sus Estatutos donde defienden que queda de forma nítida el rechazo a toda expresión de violencia, incluida la de ETA, además de la petición de verdad, justicia y reparación para todas las víctimas. Algo que, argumentan, han demostrado en declaraciones y hechos en los últimos meses.
Repasamos de qué forma y en qué términos se ha posicionado EH Bildu sobre la violencia de la banda terrorista ETA.
El requisito para ir a las listas electorales en 2011: oponerse al uso de la violencia

Bildu se presentó por primera vez en abril de 2011 para concurrir a las elecciones municipales y forales de mayo de ese año. Una coalición electoral que formaron Eusko Alkartasuna, Alternatiba e Independientes de la izquierda abertzale y que llegó tras la decisión del Tribunal Supremo de ilegalizar a Sortu unos meses antes de la convocatoria electoral (algo que corrigió en 2012 el Tribunal Constitucional, que acordó su legalización).
Uno de los pasos que dio la coalición fue elaborar un decálogo que debían firmar cada uno de los miembros que fueran a ir en las listas electorales. Según informó en abril de 2011 el diario Gara, uno de los puntos de ese decálogo se centraba en el compromiso de oponerse “por todos los medios que legítimamente tenga a su alcance a cualquier (…) violación de cualquier derecho humano y al uso de la violencia para lograr objetivos políticos».
La presentación de la marca actual, EH Bildu, en 2012: “mayorías en pro de la paz”

Acto EH Bildu flickr Euskal Herria Bildu 2012/06/10
De cara a las elecciones autonómicas vascas de 2012, se presentó la coalición integrada por la izquierda abertzale, Aralar, EA y Alternatiba. La marca pasaba a llamarse Euskal Herria Bildu. Según se recogió en esta crónica de RTVE sobre su presentación, sus miembros defendieron que se trataba de una herramienta para «aglutinar mayorías en pro de la paz, la justicia, la libertad y la defensa de todos los derechos de todas las personas».
Tal y como nos explica Asier Blas Mendoza, director del departamento de Ciencia Política y de la Administración de Universidad del País Vasco, el hecho de que EH Bildu esté formada por varios sectores diferentes es una de las claves a tener en cuenta a la hora de analizar su respuesta en cuanto al terrorismo de ETA. Blas apunta que estas tres formaciones que de manera inicial conforman la coalición “condenan la violencia desde su nacimiento y no suscitan ninguna duda”. La formación que sí ha generado esas dudas es “Sortu, herederos de Batasuna”.
Los estatutos de Sortu en 2012: “rechazo de la violencia”
Sortu se incorporó a la coalición política después de que el TC acordó su legalización en esta sentencia. En febrero de 2013, el portavoz de Sortu, Pernando Barrena, anunció que iniciarían los trámites para pasar a formar parte de EH Bildu, según recogió elDiario.es.
En este caso, los estatutos de la formación que se firmaron en 2011 incluyen menciones a la violencia de ETA utilizando el término “rechazo”. Según puede leerse en el documento, “SORTU desarrollará su actividad desde el rechazo de la violencia como instrumento de acción política o método para el logro de objetivos políticos”. Un rechazo, que como quedó por escrito, “abiertamente y sin ambages, incluye a la organización ETA”.

Además, en otra parte del documento, mostraban su deseo de contribuir a “la definitiva y total desaparición de cualquier clase de violencia, en particular, la de la organización ETA”.
Pero aquí es importante, como explica el experto Blas Mendoza, diferenciar entre lo que pone el papel, en este caso, los estatutos, y cómo se organiza después el discurso. “Condenan en los estatutos porque es su obligación” para llegar a ser un partido político, es decir, es “una forma de adaptarse y ser un partido legal”. Una condena que no ha sido tan clara en los discursos, al menos, en los primeros años, cuando la tendencia era que no había “una condena específica (de ETA) o no como algo habitual, sino más genérica, de todas las violencias”.
Y no solo es el qué, sino el cómo. En los primeros años, es más común que se utilice el término “rechazar” que “condenar”. Los términos concretos, el lenguaje utilizado, es algo “fundamental”, tal y como explica otro de los expertos consultados a través del Observatorio de Estudios Internacionales sobre Terrorismo, Martín Alonso Zarza.
“El lenguaje es parte de la denominada batalla por el relato” y en cuanto a Sortu, “hasta el momento no ha condenado la violencia y ningún miembro de la formación ha imitado a Jon Iñarritu, diputado de Bildu, fundador de Aralar, que condenó el atentado de ETA en Palma y mostró su solidaridad con los familiares”. Cree Zarza, sociólogo y miembro del grupo de expertos de la Escuela de Paz de Bakeaz, que “si hay distintas posiciones en el interior de Bildu, la condena de Sortu, la componente hegemónica y la heredera directa de Batasuna, sigue pendiente”.
Blas Mendoza destaca también los pasos que se han dado desde EH Bildu en los últimos “dos, tres años” hacia una postura más específica en los discursos contra la violencia de ETA, como la condena expresa del diputado Iñarritu. También el hecho de que por primera vez estuvieran en el acto homenaje a Ernest Lluch, exministro de Sanidad asesinado por ETA, que se celebró en el Congreso el 30 de noviembre.
Contrasta con la postura que mantuvo Arnaldo Otegi, líder de la izquierda abertzale y actual Coordinador General de EH Bildu, durante una entrevista en el programa Salvados en abril de 2016. Otegi aseguró que él no había condenado la violencia de ETA porque entorpecería la labor de «conducir a toda la izquierda abertzale a la reflexión» y apostar por la vía política y democrática. Dice que hacerlo «reforzaría sectores» que apuestan por «la lucha armada». De forma más reciente, Mertxe Aizpurua, la portavoz de EH Bildu en el Congreso, durante una entrevista en Al Rojo Vivo en mayo de este año, evitó usar la palabra «condena» por el ataque a la casa de Idoia Mendia, secretaria general del PSE, que apareció con pintura roja y octavillas a favor de los presos de ETA.
La propuesta de EH Bildu en Navarra en 2015: “rechazo y condena” de la violencia “incluida la de ETA”
Sobre el papel, en el año 2015, EH Bildu sí incluyó el término “condena” al hablar de la violencia de ETA. Fue en un documento que presentaron en junio de 2015 de cara a lograr una coalición en Navarra tras las elecciones municipales y forales de ese año.
Su postura en la negociación con Geroa Bai, Podemos e Izquierda-Ezkerra se plasmó en 96 páginas entre las que se incluyó de forma expresa la condena a la violencia de ETA. De forma textual, asumieron el compromiso de conseguir sus objetivos políticos a través del “empleo exclusivo de las vías políticas, pacíficas y democráticas”. Y ahí añadieron el “rechazo o condena de cualquier tipo de expresión de violencia que se produzca, incluida la de ETA”.
Un hecho que se convirtió en noticia por su relevancia y así se contó en diferentes medios de comunicación como ABC, elDiario.es y el Diario de Navarra.
El acuerdo programático para el Gobierno de Navarra, 2015

Un mes después, EH Bildu fue una de las cuatro formaciones políticas que asumieron el acuerdo programático para formar gobierno en Navarra. Un documento que ratificaron con su firma y en el que se volvía a hacer mención a la violencia de ETA. En este caso, EH Bildu asumió “el compromiso de rechazo y condena sin paliativos de cualquier vulneración de derechos humanos o actos de violencia que se produjeran, sea ésta de ETA, de grupos de ultraderecha o de funcionarios del Estado”.
Así lo acordaron Geroa Bai, EH Bildu, Podemos-Ahal Dugu e Izquierda Ezkerra, que formaron un gobierno de coalición cuatripartito, presidido por Uxue Barkos.
Los momentos en los que los mensajes han sido más claros es otro de los aspectos que destacan los expertos. Según Blas Mendoza, “cuanto más se involucran en política institucional, avanzan más en ese rechazo más específico”. Algo que para Alonso Zarza responde a una estrategia clara, según defiende: “EH Bildu modula la expresión de sus posiciones en función de las expectativas que ofrece la estructura de oportunidad política”.
La actual “oferta política” de EH Bildu
En su actual página web queda recogido bajo qué principios funcionan como formación política. Hay un apartado específico de “proceso de Paz y soluciones democráticas al conflicto político”. Es ahí donde hablan de lograr un “escenario de paz y normalización democrática”.
Según nos explican desde EH Bildu, los estatutos de la coalición están redactados en base al acuerdo de Gernika de 2011 y el acuerdo soberanista Lortu Arte de junio de 2010 donde hay menciones a «un escenario de no violencia con garantías y de normalización política progresiva», la «desaparición definitiva de la violencia», el «compromiso con renunciar al uso de la violencia»,
Según el experto Martín Alonso Zarza, las variaciones en el discurso de Bildu “responden a criterios de oportunidad política”, ya que, según explica, “limita su cambio a la condena presente o futura, pero sin poner en cuestión la pasada”. Para Blas Mendoza, “se ve una evolución hacia una condena específica, aunque no llega a ser clara. Es una evolución que va poco a poco”.
Fuentes
Asier Blas Mendoza, director del departamento de Ciencia Política y de la Administración de Universidad del País Vasco
Martín Alonso Zarza, Sociólogo y miembro del grupo de expertos de la Escuela de Paz de Bakeaz
Sentencia del Tribunal Constitucional por la que se acuerda la legalización de Sortu, julio 2012.
Estatutos de Sortu firmados en febrero de 2011
Propuesta de EH Bildu para un acuerdo programático para el Gobierno de Navarra en 2015