Nos habéis preguntado a través de nuestro servicio de verificación por WhatsApp (+34 627 28 08 15) por diferentes mensajes que se han propagado en las redes sociales después de que se dieran a conocer miles de correos electrónicos relacionados con el coronavirus enviados y recibidos por Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos, entre enero y julio de 2020.
Estos mensajes, que circulan también en español, tergiversan o realizan en muchos casos interpretaciones fuera de contexto sobre lo que se dice en los emails. En particular sobre asuntos como las mascarillas o el origen del SARS-CoV-2.
Los correos electrónicos son reales, pero no han surgido de una filtración. Fueron obtenidos por Buzzfeed News y The Washington Post tras una petición de información. Además, algunas conclusiones que se han sacado de estos correos electrónicos son erróneas o están fuera de contexto.
No se han filtrado 30.000 emails ocultos de Anthony Fauci
En primer lugar, es falso que se hayan filtrado 30.000 emails de Anthony Fauci. Los correos electrónicos que están circulando por redes sociales parten de dos noticias de Buzzfeed News y The Washington Postde principios de junio. Y en ambos casos los correos se obtuvieron a través de la Ley por la Libertad de la Información (abreviado como FOIA por sus siglas en inglés), el equivalente estadounidense a lo que en España son las peticiones de transparencia.
En total, Buzzfeed News publicó más de 3.200 páginas de emails enviados o recibidos por Fauci entre enero y junio de 2020; y The Washington Post, más de 800 páginas de la correspondencia de marzo y abril de 2020.
Fauci no ha “reconocido” que el coronavirus salió de un laboratorio de China
Otro de los bulos que se han compartido a raíz de la publicación de estos correos asegura que Fauci sabía que el coronavirus pudo salir del laboratorio de Wuhan, pero que, aún así, afirmaba en público que esta teoría no era posible.
En abril de 2020, Fauci recibió un email de Peter Daszak, presidente de EcoHealth Alliance, una empresa sin ánimo de lucro que ayudó a financiar parte de las investigaciones del Instituto de Virología de Wuhan. Daszak agradecía a Fauci que hubiese dicho que la evidencia científica señalaba a un origen natural del virus y no una fuga de un laboratorio.
En una entrevista con la cadena de televisión estadounidense CNN, Fauci aseguró que este email estaba siendo malinterpretado. “Ese correo electrónico fue de una persona para mí diciendo ‘gracias’ por lo que sea que él pensó que dije, y dije que creo que el origen más probable es un salto de especies”, afirmó el estadounidense, que también apuntó que mantiene la “mente abierta de que podría ser una fuga de laboratorio”.
También hay otro correo de enero de 2020 en el que el inmunólogo Kristian Andersen le advertía a Fauci de que el virus “parecía fabricado”. Sin embargo, en el mismo email Andersen indica «todavía hay que hacer más análisis, por lo que estas opiniones podrían cambiar”.
Y como señala el verificador estadounidense PolitiFact, en marzo de 2020 Andersen publicó junto a otros científicos un estudio en la revista Nature en el que afirmaba que sus análisis “muestran claramente que el SARS-CoV-2 no es una construcción de laboratorio ni un virus manipulado a propósito”.
Un grupo de expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló tras una investigación en Wuhan que “una fuga de laboratorio es la hipótesis menos probable” y que lo más plausible es que una versión del patógeno surgiera en murciélagos y a través de un animal intermedio llegase a los humanos. No obstante, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pidió el pasado 26 de mayo a los servicios de Inteligencia de EEUU que le entregasen un informe sobre el origen de la pandemia de la COVID-19 en un plazo de 90 días.
Fauci no dijo que el coronavirus fue fabricado para ser un arma biológica
Relacionado con lo anterior, también circula un mensaje que asegura que el coronavirus se creó en un laboratorio y que su objetivo era crear un arma biológica. Esta idea surge de un correo electrónico enviado a Fauci con el asunto “método de producción de armas biológicas con coronavirus” y en la primera línea pone “así es como se creó el virus”.
Sin embargo, que una persona enviase un correo electrónico a Fauci diciendo que el coronavirus es un arma biológica no significa que él lo afirmase. Además, según indica PolitiFact, en el resto del correo electrónico no aparece ninguna prueba que demuestre esto.
El correo descontextualizado de Fauci sobre las mascarillas
Otra idea muy compartida fue la de que, gracias a estos correos electrónicos, se ha “filtrado” que Anthony Fauci sabía que las mascarillas no eran eficaces contra el coronavirus, pero que “impuso” su uso a toda la población. Sin embargo, este correo electrónico está sacado de contexto, ya que las evidencias científicas de ese momento no son las mismas que tenemos ahora.
En febrero de 2020, Fauci respondió un correo electrónico a Sylvia Burwell, secretaria de Salud de Estados Unidos entre 2014 y 2017. En él, el director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos le indicaba que no le recomendaba usar una mascarilla.
Pero los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) no comenzaron a recomendar el uso de mascarillas hasta abril de 2020. En un encuentro realizado con The Washington Post en julio de ese mismo año, Fauci explicó que no se dieron cuenta del alcance de la propagación asintomática y que cuando lo hicieron recomendaron el uso de la mascarilla para toda la población.