España forma parte de los países más descentralizados de Europa, junto a Alemania, Suiza y Austria. Sin embargo, ese hecho no significa que como Estado no se siga manteniendo una estructura sólida y compleja, además del Estado de las Autonomías existente en nuestro país.
Cuando hablamos de analizar la comunicación política digital, una de las primeras tareas a realizar es obtener la situación real en cualquier ámbito digital del elemento a analizar. Y esa situación se consigue mediante lo que llamamos un mapeo integral de redes. El objetivo consiste en comprender qué nivel de penetración se tiene en los ya múltiples espacios digitales donde nos relacionamos a diario la mayoría de la ciudadanía.
En este artículo voy a incluir la primera entrega de la información de ese mapeo integral de redes digitales de la Administración General del Estado español (AGE), es decir, el “instrumento del Gobierno para desarrollar e implementar sus políticas públicas o prestar servicios”.
La idea de intentar entender mediante este mapeo hasta dónde llega lo que comúnmente llamamos el Estado no es ni mucho menos una idea original. Viene precedida e inspirada de análisis como el realizado por Ana Ibarz y Rafa Rubio en el libro Las Redes Sociales en la Administración General del Estado. Comunicación, Transparencia y Gobierno Abierto, a través del Instituto Nacional De Administración Pública (INAP).
Comprender qué política de comunicación digital ejerce un Estado es, en cierto modo, comprender hasta dónde llega una Administración y dónde comienza la otra.
La cuestión digital: 2.358 maneras de seguir a nuestra Administración General del Estado
Empecemos por el resultado final del mapeo integral de redes. Y ese resultado nos dice que en el año 2.021, nuestra Administración General del Estado tiene, al menos, 2.358 formas diferentes de visibilidad digital ante la ciudadanía.
Esas formas diferentes se reparten entre múltiples webs, plataformas de redes sociales, sistemas de mensajería y repositorios varios de imágenes, vídeos y audios. Un sistema complejo de difusión de información pública, mensajes políticos y otro tipo de contenidos a los que cualquier ciudadano o colectivo puede tener acceso.
Si nos centramos en el tipo de espacios digitales que actualmente usa la Administración General del Estado, en el mapeo se han podido localizar hasta 19 plataformas distintas. Es decir, 19 ámbitos de uso diferentes a los que podemos llegar para informarnos o, incluso, intentar contactar con la Administración.
El entorno digital más presente es la web, ya sea mediante sites específicos de cada organismo, como en secciones desarrolladas dentro de una web ministerial.
Si hablamos de redes sociales, la red social más política es sin duda alguna Twitter, como ya explicamos en artículos anteriores. En este caso, la AGE tiene un total de 648 perfiles diferentes, cada uno con un cometido específico dependiendo del ministerio y del organismo que represente.
Le siguen otras redes de uso muy extendido como Facebook, Instagram o Youtube. También podemos ver cómo el sistema de mensajería Telegram comienza a ser usado en algunos organismos como un recurso eficaz para la difusión de información de interés público. El caso del canal Telegram del Ministerio de Sanidad, abierto en el contexto de la pandemia y con más de 300.000 suscriptores, es un claro ejemplo.
También es interesante destacar el comienzo de incursiones en redes sociales muy vinculadas con la Generación Z, es el caso de plataformas como TikTok y Twitch. Entornos en los que, en el contexto de la comunicación política e institucional, el aspecto comunicativo tiene sus dificultades, pero que conviene hacer un esfuerzo para llegar a esas nuevas generaciones.
La AGE digital: quiénes son y dónde están
Y llegados a este punto, lo que habrá que especificar es qué organismos son los que se han analizado. Un modo de explicarlo muy sencillo, los que se sientan en el Consejo de Ministros, es decir, la Presidencia del Gobierno y los 22 ministerios que conforman lo que llamamos el Gobierno de España.
La estructura y detalle de organismos, departamentos ministeriales y organismos adscritos a algún ministerio, se puede obtener a través de la web del Gobierno denominada Punto de Acceso General.
A través de dicha web, hemos podido obtener toda la información pública de la composición y estructura orgánica de cada ministerio, así como de Moncloa. Haciendo el análisis, se obtiene el dato de las oficinas físicas en las que la Administración General del Estado tiene implantación más allá de lo digital, no sólo en nuestro país sino en el resto del mundo. Se han contabilizado un total de 7.579 ubicaciones físicas dependientes, directa o indirectamente, del Estado español.
En la Tabla incluida en este artículo podemos ver el desglose por organismos de dichas oficinas físicas y su presencia digital en las 19 diferentes plataformas analizadas.
El organismo con una presencia física más compleja es el Ministerio de Hacienda (2.953 oficinas), muy por encima del resto de ministerios. Sin embargo, esa complejidad en la estructura funcionarial no tiene por qué corresponderse con una complejidad en la presencia digital. De hecho, el Ministerio de Hacienda sólo tiene una presencia digital de 43 perfiles en redes o webs. Sin duda alguna, el hecho de la asignación competencial a los gobiernos autonómicos juega un papel importante a la hora de entender las políticas comunicativas en cada ministerio.
Otro caso interesante es el del Ministerio de Ciencia e Innovación, siendo un organismo con una estructura ministerial poco compleja (ni siquiera tiene Secretarías de Estado), su presencia digital nos viene a decir lo contrario (612 perfiles diferentes). El motivo es la presencia de organismos públicos dependientes de dicho ministerio, como el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el cual tiene una red de centros muy compleja y que se ve reflejada en su presencia digital.
Si se observa con detenimiento la Tabla y se comparan las implantaciones físicas de los ministerios con su implantaciones digitales podemos obtener información muy interesante. Pero sobre todo es un buen punto de partida para iniciar análisis más profundos de cada ministerio.
En todo caso, nos ayuda a todos a entender algo más el rol que cumple cada ministerio en la acción de gobierno, incluso sirve para visibilizar algo que en la formación de los gobiernos siempre es objeto de debate, la utilidad o no de algunos ministerios, sobre todo en los nuevos tiempos políticos de gobiernos de coalición entre más de un partido político.
En el siguiente artículo profundizaremos algo más en el tipo de actividad que desarrollan los ministerios en todos sus perfiles digitales. Para finalizar, y como adelanto, simplemente un dato: en la red social política por excelencia, Twitter, desde la fecha de inicio de primer perfil abierto de los 648 analizados (enero del 2.008), se han publicado un total de 5.660.486 tuits.
Lo siento, pero no me ha servido para aprender cómo darme de alta en el sistema de certificación digital que ahora me exigen para relacionarme con las administraciones públicas.