El 1 de junio se examinarán los primeros estudiantes en España de la prueba para acceder a la Universidad. Pero al mismo tiempo, alumnos que en otros países de la Unión Europea no tienen que hacer ninguna prueba estatal para conseguir plaza, preparan sus entrevistas individuales con las universidades o ya saben si han entrado en el grado que desean antes de terminar la enseñanza secundaria.
En Newtral.es hemos revisado el sistema de acceso a la universidad de los países de la Unión Europea para explicar qué modalidades son las más frecuentes, y qué tienen en común.
Países Bajos y Alemania: sin examen de acceso a la universidad obligatorio
A diferencia de la mayoría de Estados de la Unión Europea, algunos como Países Bajos, Alemania o Suecia no cuentan con un examen estatal obligatorio de acceso a la universidad.
Los estudiantes en Alemania deben aprobar el Abitur, que equivale a aprobar los exámenes finales de los últimos dos años de instituto. Aunque cada universidad puede incluir requisitos adicionales. En Países Bajos, el estudiante presenta su solicitud a la universidad meses antes de su graduación en el instituto. “Normalmente antes de enero”, cuentan a Newtral.es desde la Embajada del país. Las solicitudes se presentan por partida doble: a través de un portal del Estado, el Studielink, y a cada universidad. “Se pide que aporten una copia de su curriculum vitae, y una carta de motivación. Los programas más selectos suelen concertar entrevistas con los candidatos”, añaden.
Antes de su graduación en la enseñanza secundaria, los estudiantes reciben una oferta de plaza condicionada a que aporten su título con las calificaciones de secundaria para demostrar que han llegado a la nota mínima que solicita el programa.
Suecia cuenta con un sistema híbrido, explican desde la Embajada. Entre una y dos terceras partes de los estudiantes entran a la universidad en función de sus notas del instituto y del examen de acceso a la universidad, el högskoleprovet. Pero realizar la prueba es elección del estudiante, ya que al menos otro tercio puede acceder sin haber pasado esta prueba, presentando un diploma de instituto y otros documentos como un currículo que señale su experiencia previa, cartas de motivación o cartas de recomendación.
En el caso de Francia, depende del tipo de institución, según se explica en la Comisión Fulbright. Se hace diferencia entre las universidades públicas, para las que solo es necesario el título de baccalauréat (bachillerato), y las Grandes écoles, que son las universidades más prestigiosas del país. Para las segundas, el estudiante debe pasar por un programa adicional de dos años que culmina con un examen de admisión.
La mayoría de los países de la Unión Europea mantiene una prueba de acceso a la universidad obligatoria
En España, como te contamos aquí, la mayoría de los estudiantes debe aprobar una serie de exámenes después de graduarse en Bachillerato. Con este requisito cumplido, el resultado cuenta el 40% para la nota para acceder a la universidad, siendo el otro 60% la media de bachillerato. El acceso a la universidad se garantiza por baremo: si 100 estudiantes piden plaza en un grado que cuenta con 50 plazas, los 50 con las mejores notas de acceso entran en esa universidad.
En Grecia, el sistema es similar al español, explican desde la Embajada griega a Newtral.es. El mismo día del año todos los estudiantes realizan el mismo examen. A diferencia de España, en el que cada comunidad autónoma tiene fechas y preguntas distintas, “las preguntas son las mismas en todo el país. Da igual si es un estudiante de Tesalónica o de Creta”, explica el jefe de diplomacia pública de la Embajada. La diferencia entre los exámenes solo depende de qué rama de bachillerato haya elegido el estudiante en el instituto. Italia también mantiene un examen del Estado, necesario para acceder a la universidad y que se realiza una vez al año.
Por su parte, Finlandia cuenta con una serie de exámenes nacionales que los estudiantes deben aprobar para entrar en la universidad. Pero estos también difieren del modelo español, según explican desde la Embajada de Finlandia. Para aprobar el ylioppilastutkinto, la prueba finlandesa, el estudiante debe examinarse de cuatro materias. Solo una es obligatoria, que equivale a Lengua en España. Las otras tres son a discreción del estudiante y cada examen dura seis horas. Sin embargo, a diferencia de la prueba española, el estudiante puede examinarse de cada materia por separado hasta en tres ocasiones en distintos momentos del año. Así, pueden pasar meses entre un examen y otro.
Polonia, Estonia y Eslovenia: examen estatal con requisitos adicionales
En Polonia, según explican a Newtral.es desde el Ministerio de Ciencia y Educación, los estudiantes deben aprobar primero un examen nacional para acceder a la universidad. Aunque las universidades pueden imponer pruebas adicionales para determinar “la predisposición especial del estudiante para esos estudios”.
Estonia cuenta con un sistema parecido, un examen nacional además de los posibles requisitos que los centros pueden imponer. Fuentes del Ministerio de Educación e Investigación estonio explican a Newtral.es que estos pueden ir desde una prueba específica de esa universidad o grado, una nota mínima en el examen estatal o, incluso, una entrevista con los candidatos. La enseñanza pública es gratuita siempre que se estudie en el idioma estonio y no en inglés. Pero las universidades pueden cobrar por procesar la solicitud, aunque finalmente no se obtenga la matrícula.
Desde la Embajada de Eslovaquia explican que aunque hay un examen general que todos los estudiantes deben aprobar, cada universidad puede añadir sus propios requisitos, igual que en Estonia y Polonia. Eslovenia cuenta con un sistema muy similar al eslovaco: una serie de exámenes que hacen media con los últimos cursos del instituto, y requisitos extra que las universidades pueden tener en cuenta a la hora de evaluar la solicitud.
Las universidades de Bulgaria tienen la potestad para diseñar las pruebas de acceso, aunque cada año el Estado establece unos mínimos, según explican a Newtral.es desde el Ministerio de Educación y Ciencia de ese país. Cada una de las 66 universidades, 52 de ellas públicas, establece su propia prueba. Al igual que en los países anteriores, las universidades también pueden pedir documentación adicional a los solicitantes.
- Embajadas de: Eslovaquia, Eslovenia, Finlandia, Grecia, Lituania, Letonia, Países Bajos, y Suecia
- Ministerios de Educación de: Bulgaria, Dinamarca, Estonia, Hungría, Irlanda, Italia, Polonia y Rumanía
- Comisión Fulbright
- Página web oficial de la prueba universitaria de Finlandia
- Informe del Parlamento Europeo sobre los modelos de enseñanza superior