La Mesa del Congreso aprobó este miércoles la suspensión de los derechos y deberes parlamentarios del diputado y exministro de Transportes José Luis Ábalos. Lo hizo después de que el Tribunal Supremo confirmase su procesamiento por delitos como organización criminal, cohecho o malversación, en relación con el caso Koldo.
- Encarcelado desde el pasado 27 de noviembre, Ábalos llegó a solicitar ejercer el voto telemático desde prisión, algo que la Mesa del Congreso nunca ha llegado a concederle.
- La nueva situación del exministro se aplicará a partir de la sesión plenaria de este jueves, en la que Ábalos no podrá votar en ninguno de los puntos del orden del día.
La suspensión en el Congreso. El reglamento del Congreso establece en el apartado segundo del artículo 21.1 que los diputados quedan “suspendidos de sus derechos y deberes parlamentarios” en el caso de que la Cámara Baja conceda una autorización de suplicatorio, firme un auto de procesamiento y estos diputados entren en prisión preventiva.
- La suspensión de un diputado conlleva la pérdida de derechos como participar en las sesiones plenarias y votar o hacer preguntas orales, así como registrar otras para que se respondan por escrito, según el artículo sexto del reglamento del Congreso.
- También se le quita su derecho a sueldo y a toda ayuda o indemnización por gastos derivados de la función.
Sigue siendo diputado. Que se haya suspendido su derecho a votar, participar en los plenos o registrar preguntas no implica que Ábalos pierda la condición de diputado.
- El reglamento del Congreso indica en su artículo 22 que alguien deja de ser diputado en el caso de que, entre otros motivos, se anule su cargo en una “decisión judicial firme”, algo que, por el momento, no existe.
Las mayorías. Que Ábalos deje de participar en el Congreso supone la pérdida de un voto para el Gobierno puesto que, aunque el exministro pertenece al Grupo Mixto, solía orientar sus votaciones en el mismo sentido que el del Ejecutivo.
El Gobierno suma un total de 146 votos en el hemiciclo (los de PSOE y Sumar), a los que se podrían añadir los de los diputados de ERC, Bildu, PNV, Podemos, BNG y Coalición Canaria, lo que daría un total de 171 votos. PP, Vox y UPN también suman 171 votos, lo que podría dejar en manos de Junts las votaciones en la cámara.
- Incluso con la abstención de Junts algunas iniciativas no podrían salir adelante en la Cámara Baja si se dieran estas uniones.
¿350 o 349 diputados? Es la Mesa del Congreso quien tiene que decidir si modificar la composición del hemiciclo y contar con una cámara de 350 diputados (como hasta ahora) o con una de 349, lo que haría que la mayoría absoluta fuera de 175 votos y no de 176 como lo es en la actualidad.
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